El peronismo "renovador" mostró poder territorial y se lanzó con presencia massista

Sin el kirchnerismo, intendentes y gobernadores del PJ homenajearon a Cafiero. Estuvieron Solá y Alberto Fernández. Pidieron "unidad" para recuperar el Gobierno. Bajaron a Scioli del escenario. 

Con el 29ª aniversario del triunfo del Frente Justicialista Renovador de Antonio Cafiero en la provincia de Buenos Aires como excusa, el peronismo con poder territorial - con invitados especiales del massimo y sin presencia kirchnerista - le dio señal de largada al armado de la "corriente renovadora" que buscará darse una nueva conducción para alzarse con un triunfo en 2017 y recuperar el poder en 2019.   

El mensaje político de los "renovadores" fue claro desde la misma organización del acto. Los ganadores (intendentes bonaerenses y gobernadores de todo el país) se ubicaron sobre el escenario. Los perdedores, entre los que estuvo el ex candidato presidencial Daniel Scioli, abajo. Los oradores tuvieron un discurso en sintonía y dejaron un mensaje claro, que hizo eje en la necesidad de ordenar el partido, reconstruir el movimiento y recuperar el Gobierno (de manera democrática).  Los invitados agitaron las banderas de la unidad. El kirchnerismo quedó - por ahora - afuera.

"Hay un grupo de intendentes que hemos decidido asumir un compromiso que el propio pueblo nos reclama: transitar la reconstrucción y la renovación política del peronismo", abrió la lista de oradores el intendente de Bolívar, Eduardo "Bali" Bucca, desde el escenario ubicado en el cuarto piso del hotel NH, ubicado a metros de Plaza de Mayo. En el mismo lugar, la noche del 22 de noviembre, Scioli reconocía la victoria de Mauricio Macri en el ballotage.

Esta vez, el ex gobernador miraba el escenario desde un costado, mientras conversaba con el ex jefe de Gabinete Alberto Fernández, invitado especialmente para homenajear a Cafiero. "Nada de lo que está sucediendo, de lo que están sufriendo los argentinos y los bonaerenses, hubiera sucedido si no hubiéramos perdido las elecciones", remarcaba Bucca, antes de llamar a "hacer autocríticas" para "plantear un proyecto superador" y "volver a ser gobierno en la Nación y en la provincia de Buenos Aires.  

Fernández no fue el único representante del massismo en el acto. El ex gobernador Felipe Solá también participó del homenaje y tuvo, junto al ex ministro de Salud, Ginés González García, un lugar en el escenario, pese a no ser parte del grupo de intendentes y gobernadores que impulsa "la segunda renovación" desde el partido.  "Hay que reinventarse y volver a ganarse al pueblo. Hay que volver a aprender la lección de que se gana y se pierde", pidió Solá, quien evocó su experiencia de trabajo y militancia junto a Cafiero.

Aunque al llegar al hotel el ex gobernador dijo que no piensa en "volver al Partido Justicialista", admitió que se puede "imaginar un futuro común" con "contenidos". "No son los símbolos los que nos unen, sino el mandato que nos obliga a recuperar el país para la clase trabajadora", arengó durante su discurso. De manera irónica se refirió después el Gobierno nacional: "Nos unen éstos que no tienen sensibilidad social. Que parece que hubieran desembarcado ayer de un avión que llegó desde Polonia"

El discurso de la unidad por sobre las diferencias se repitió en varias oportunidades. "Tengamos en claro quién es el rival a vencer. Tenemos que construir desde las diferencias, teniendo bien en cuenta esto de la diversidad en la concordia", pidió el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez. Detrás suyo se ubicaban otros intendentes del grupo Esmeralda: Martín IsaurraldeAriel Sujarchuk, Fernando Gray, Mariano Cascallares, Gabriel Katopodis, Leonardo Nardini y Juan Zabaleta.

Invocando a Cafiero, los "renovadores" buscaron mostrar, además, que ampliaron el poder de convocatoria. Entre los intendentes, sumaron a Alberto Descalzo (Ituzaingó), Verónica Magario (La Matanza), Julio Pereyra (Florencio Varela) y Marisa Fassi (Cañuelas). Acompañando a los líderes territoriales, en primera fila del escenario, estuvo el patriarca y presidente del partido, José Luis Gioja. A su lado se ubicó el formoseño Gildo Insfrán, aunque no tuvo intervención durante el acto.

En tanto, la fueguina Rosana Bertone y el chaqueño Domingo Peppo fueron los elegidos para hablar en representación del grupo de gobernadores que también componen Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Sergio Uñac (San Juan). "Tenemos que estar unidos pero no amontonados. Tiene que volver el debate, tiene que volver la humildad al partido. El gobierno lo vamos a recuperar pero con las urnas", propuso el chaqueño Peppo.

En el salón también estuvieron el presidente del PJ bonaerense, Fernando Espinoza; el flamante miembro del triunvirato de la CGT, Héctor Daer; el jefe de los Canillitas, Omar Plaini; el líder del sindicato de taxistas, Omar Viviani; Ricardo Pignanelli, de Smata; Norberto Di Próspero, de APL; y Sergio Sasia, de Ferroviarios. También estuvo el jefe del bloque Justicialista, el sindicalista de Smata, Oscar Romero, aunque su compañero de bancada, Diego Bossio, se retiró del acto antes de que comenzara, supuestamente molesto por la llegada de Scioli. Por la familia Cafiero participaron el ex diputado Mario Cafiero ySantiago Cafiero, nieto de Antonio y elegido como orador- Cafiero pidió "volver a Perón y Evita" y no confundirse "en profesar una fe kirchnerista ni dejarse empujar como colaboracionistas del macrismo".

"La idea era mostrar volumen y dar el mensaje claro de que la conducción está acá, donde está el poder territorial", dijo a Letra P uno de los armadores del espacio. Fue el intendente de Hurlingham, Zabaleta, encargado de cerrar el acto, quien se lanzó de lleno a pedir la unidad. "Con el peronismo no alcanza, pero sin el peronismo no se puede. Vuelvan compañeros, vuelvan que los brazos están abiertos para construir no una victoria sino la felicidad del pueblo", arengó antes de que un video homenaje a Cafiero y la marcha peronista coronaran el acto.

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