La oposición copó las tribunas y celebró las críticas al Gobierno

La oposición copó las tribunas y celebró las críticas al Gobierno
Aprobaron las palabras de Etchevehere referentes de diversos sectores; fuerte presencia de Pro y ausencia del oficialismo
Parecía que se asustaban, pero terminaron aplaudiendo. Los dirigentes opositores que acudieron a la inauguración de la exposición de la Sociedad Rural Argentina (SRA), en Palermo, coincidieron tanto en calificar como "muy duro" el discurso del nuevo presidente de la entidad, Luis Miguel Etchevehere, como en aprobar cada una de sus palabras.

Como en los últimos años, el macrismo fue mayoría entre los asistentes, pero ayer dio un paso más: en una picardía de último momento, metió a sus dos candidatos a senador nacional en la primera fila del palco, bien cerca de los fotógrafos.

El Gobierno, fiel a su costumbre, no envió representantes al acto. Tampoco hubo dirigentes del FAP, la Coalición Cívica o el massismo, salvo por el "agrodiputado" bonaerense Jorge Solmi, recientemente incorporado al Frente Renovador. De hecho, la asistencia de políticos fue menor a la esperada para un año electoral. El fuerte tono político del discurso de Etchevehere ayudó a disimularlo.

El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, desembarcó en el predio de Palermo junto con su mujer, Juliana Awada, y el candidato a senador nacional de Pro por Entre Ríos, el productor rural Alfredo De Angeli, a quien eligió para enfrentar a la prensa. Detrás de ellos llegaron el jefe de gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el ministro de Espacio Público y candidato a senador nacional, Diego Santilli.

La comitiva de Pro se completó con los intendentes de Vicente López, Jorge Macri, y de San Isidro, Gustavo Posse, las diputadas Gabriela Michetti, Paula Bertol y Patricia Bullrich (aliada), el candidato a senador por Misiones, Ramón Puerta, y el subsecretario de Transporte, Guillermo Dietrich, entre otros funcionarios porteños que se ubicaron en las primeras tres filas del palco.

Para cuando comenzó el himno, Michetti y Santilli (que inicialmente se había sentado más atrás) aparecieron codo a codo en la primera fila, muy cerca de las cámaras. Un lugar que, protocolarmente, hubiera correspondido a Rodríguez Larreta, según comentaban los asiduos a la exposición. Pero nadie pareció ofenderse con el "descuido".

Macri, por otro lado, recibió un par de guiños en el discurso del presidente de la SRA, como cuando criticó el traslado de la estatua de Colón, en dos oportunidades. El líder de Pro los devolvió luego, al elogiar las palabras del dirigente rural: "Dijo puras verdades. Es un gobierno empecinado en construir un falso relato, construido sobre la mentira".

El gobernador cordobés, José Manuel De la Sota, y el gremialista Gerónimo Venegas fueron los únicos "no macristas" en conseguir un lugar en primera fila. De la Sota también elogió a Etchevehere. "Fue realista y el campo se siente así. El Gobierno fomenta la división y no conozco país que progrese dividido", sostuvo.

La UCR estuvo representada por los diputados Oscar Aguad, Lucio Aspiazu y Ricardo Gil Lavedra, que no se separó un segundo de Alfonso Prat-Gay, su compañero en la interna porteña del Frente UNEN. "El discurso de Etchevehere fue muy duro, muy opositor, pero no por eso menos veraz", señaló el economista, que por primera vez en semanas no tuvo al lado a la diputada Victoria Donda. "Se quedó dormida", la excusó.

Párrafo aparte merece el paso fugaz del diputado Francisco de Narváez, que ayer no ocupó la primera fila del palco como cuando era socio en la explotación del predio. Sucede que De Narváez vendió su parte en ese negocio días antes de que el Gobierno intentara expropiar el predio, por lo que en la Rural quedó la sospecha de que "El Colorado" conocía -"y no avisó", lamentaban ayer- las intenciones de Olivos.

Con todo, el candidato de Unión por la Libertad y el Trabajo volvió a ser uno de los más buscados por la gente para sacarse fotos, circunstancia que su mujer, Agustina Ayllón, aprovechó para remarcar, cada vez que la presentaban como "la esposa de", que ella también es candidata. "A diputada, por La Plata", repetía, dispuesta a no perder un solo voto.

"¿Va a venir Scioli?", preguntó una de esas simpatizantes. Le respondieron que no, porque el gobernador bonaerense "estaba embarazado". La mujer no entendió el chiste, que aludía a la frase que Scioli usó para definir su alineamiento total con Olivos. Tampoco quiso creer cuando le dijeron que era kirchnerista.

"EL PASADO DEL DESALIENTO"

El presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Julián Domínguez, sostuvo que "en la Sociedad Rural hay dirigentes jóvenes con mentalidad vieja", en alusión al discurso pronunciado por Luis Miguel Etchevehere. "Qué pena que se empeñe en llevarnos al pasado del desaliento", agregó el ex ministro de Agricultura, quien contrapuso el "liberalismo individualista" con el "humanismo social", en alusión al kirchnerismo..

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