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CARLA PELLIZA

Ya proclamado como presidente por el Congreso de la Nación, Javier Milei repartió varios abrazos en el recinto al que llegó hace menos de dos años. Uno de ellos fue para Cristian Ritondo, jefe del bloque PRO que aspira a presidir la Cámara. El encuentro cara a cara fue el primero desde el domingo 19 de noviembre a la noche en el Hotel Libertador.

Ritondo y Milei conversan por teléfono, pero no se habían vuelto a ver desde la jornada de la victoria electoral. Como muchos dirigentes del PRO duro –y el radical Luis Petri-, el bonaerense estuvo en la vivienda – búnker del entonces candidato. Cuando terminó su discurso, en el lobby del hotel, esperó, junto a Martín Yeza y Alejandro Finocchiaro, quienes serán compañeros de bancada, la llegada de Mauricio Macri para subir al piso 21 y encontrarse con el presidente electo.

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En esa reunión no pudieron tratarse temas sensibles, había más de una decena de presentes, pero Cristian estuvo ahí para la foto y para darle pie a la negociación que todavía se mantiene, la de la conducción de la cámara de Diputados. Su nombre está, junto al de Florencio Randazzo y algún legislador tapado de La Libertad Avanza, en la mesa de Guillermo Francos.

Milei confirmó que su futuro ministro del Interior es el encargado de presentar las “mejores propuestas” para que él, después, elija la mejor. El miércoles en Diputados hubo una señal, al menos de acercamiento. El encuentro entre el presidente electo y Ritondo no pasó desapercibido. Tampoco lo hizo la ausencia de Randazzo.

“Vos sos mi amigo”, celebraron en ese abrazo. No conversaron sobre la conducción de la Cámara, cruzaron algunas palabras superficiales, según supo este medio. Antes de ingresar al recinto, el diputado confirmó que tiene trato directo con el presidente electo, que conversaban cuando ambos trabajaron en el parlamento y que lo hacen ahora.

Randazzo, el otro candidato

El que no mostró esa cercanía fue Randazzo. Su ausencia fue tomada como una “falta de respeto” tanto a Milei como a la carrera de la que participa para comandar a 257 – él incluído – legisladores. Según pudo saber este portal, el diputado tenía un turno médico imposible de cancelar y, además, decidió no “meter ruido” con su presencia en un acto “formal”. Un día antes de la asamblea legislativa, el ex ministro de Cristina Kirchner se mostró junto a su antiguo compañero de fórmula, el cordobés Juan Schiaretti.

Según reveló el propio Randazzo, como ya hicieron distintos espacios de Juntos por el Cambio, su intención será la de “ayudar en la gobernabilidad” con “un peronismo democrático, federal”. Como ya contó El Destape, un sector del peronismo, particularmente referenciado en Miguel Pichetto, no vería con malos ojos una alianza con la UCR, socia fundadora de la alianza con Ernesto Sanz en la mesa, con el que el ex senador tiene coincidencias. Habrá que ver dónde encaja la posición adoptada por el cordobés y el bonaerense.

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Antes de ingresar al parlamento, Ritondo fue consultado sobre la posibilidad de que Randazzo consiga 137 diputados para garantizarle esa gobernabilidad a Milei. “Es raro. Yo soy presidente del principal bloque, de la segunda minoría y conmigo no habló nunca. Es raro que tenga un número tan alto. Pensar que son 105 los diputados de Unión por la Patria y cinco los de izquierda, acumulan 110. Pensar que se tiene absolutamente a todos los demás diputados…”, sostuvo el PRO.

Los que apoyan al ex ministro del Frente para la Victoria destacan su capacidad para dialogar por fuera de la grieta. Pero Ritondo no se mostró convencido de eso ni de la posición que podría adoptar Randazzo en ese rol: “No hay que mentirle a la sociedad sin tener ningún proyecto puesto en la mesa y saber qué vota cada uno. Hay sectores acá que no votaron la derogación de la ley de alquileres. Entonces la verdad pensar que van a cambiar su voto… Hay que ser serios”.

Oscar Zago, jefe del bloque de La Libertad Avanza, según informó El Destape, anticipó en declaraciones a Radio 10 que en “72 horas” o “como mucho el fin de semana” deberá estar resuelta la presidencia de Diputados.

Alianza en el Congreso, no coalición de Gobierno

La relación que puedan tener La Libertad Avanza y el PRO en el ámbito legislativo, sin embargo, no se extendería, a priori, a los gobernadores deseosos de mantener cierta distancia prudente para negociar. Ese alejamiento le permite a Jorge Macri, por ejemplo, retomar algunos diálogos con la UCR en la Capital Federal.

En las últimas horas, hubo una reunión con Martín Lousteau pero “todavía no hay nada” definido. Según pudo saber este portal, se destrabó la negociación para intentar mantener la continuidad en la conducción del Banco Ciudad con Guillermo Laje, de la UCR, a la cabeza. Sin embargo, el radicalismo perdería Desarrollo Económico, Deportes y Ambiente, aunque todavía no se abandonaron las esperanzas sobre esta última cartera y la Procuración.

Del riñón de Lousteau, Maximiliano Pullaro también mantuvo una agenda movida. El gobernador electo de Santa Fe, tal vez la mejor noticia del año para el senador porteño, se reunió con Guillermo Francos y con Patricia Bullrich, ministra de Seguridad no confirmada, para avanzar en la problemática provincial y Mariano Cúneo Libarona, futuro titular de Justicia. El radical y la PRO se conocen desde la última gestión.

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La relación de Francos con Santa Fe es particular. La vice de Pullaro, Gisela Scaglia, fue nuera del futuro ministro del Interior y quedaron en una excelente relación. La reunión se hizo en el hotel de Maximiliano en la CABA, base que utilizó para asistir a la reunión de gobernadores de Juntos por el Cambio.

El encuentro abordó la problemática de la obra pública. Pullaro puso sobre la mesa la necesidad de atender la situación de las rutas nacionales y pidió una incidencia fuerte de la provincia en la nueva concesión de la Hidrovía. Poco después, en una conferencia de prensa, amplió que el futuro gobierno "plantea una inversión público privada, como fue en algún momento en el Gobierno de Mauricio Macri".

Francos también se encontró con Leandro Zdero, otro radical pero del sector del correntino Gustavo Valdés, el otro que intentará competir, como Lousteau, por la presidencia del Comité Nacional de la UCR. También conversaron sobre la obra pública, pero faltará algún otro encuentro para terminar de pulir la situación.

La reunión fue calificada como “amena”, enfocada en la situación estrictamente provincial y su relación con el gobierno nacional. El futuro mandatario encontró disposición de trabajo institucional mancomunado. Por ahora, más allá de la posición neutral, los jefes provinciales se mantuvieron expectantes.