Al cabo de una jornada en la que el "Pacto de Mayo" propuesto el viernes ante la Asamblea Legislativa por Javier Milei cosechó adhesiones en más de una decena de gobernadores, tres de ellos peronistas, Sergio Ziliotto se convirtió en el primero de los mandatarios provinciales en rechazar la propuesta presidencial. "Nunca será posible un acuerdo si antes no se respeta la Constitución Nacional", aseguró este sábado el titular del Ejecutivo de La Pampa.

"Para este gobernador, nunca será posible un acuerdo si antes no se respeta la Constitución Nacional y, a partir de sus máximos postulados, la división de poderes y el federalismo", expresó Ziliotto a través de un mensaje que publicó en sus redes sociales.

En ese sentido, dijo que no se construyen "consensos pretendiendo poner de rodillas al otro, agrediéndolo y quitándole lo que le pertenece y debe defender".    

"Tengo la responsabilidad de gobernar y defender a La Pampa. Ningún acuerdo me llevará a resignar ningún derecho de las y los pampeanos", enfatizó.    

Si bien el gobernador sostuvo que la base de la política es el "diálogo", consideró que debe construirse a partir del "respeto". "Los acuerdos devienen del consenso, no de la imposición", subrayó.    

A continuación, Ziliotto agregó en la publicación un fragmento de su discurso del viernes, al inaugurar el período de sesiones ordinarias 2024 del Poder Legislativo de La Pampa: "Bienvenido el diálogo que busca consenso. En todos los niveles, como siempre lo hemos propiciado. Pero debe ser diálogo con respeto".    

"No avalaremos ninguna iniciativa que pretenda cercenar derechos de las y los pampeanos. Y más aún si van en contra de nuestra historia y de nuestra entidad de provincia autónoma", alertó antes de advertir que "tampoco deben quedar dudas" de que resistirá "cualquier intento foráneo de destruir nuestra soberanía política a partir de quebrarnos económicamente".

La semana pasada, el gobernador de La Pampa se puso en pie de guerra contra Milei, en línea con sus colegas patagónicos, para respaldar a su colega de Chubut, Ignacio Torres, quien se enfrentó con el Ejecutivo después de que la Nación eliminara los subsidios al transporte urbano del interior del país y le hiciera a la provincia sureña un recorte de $13.500 millones de los fondos coparticipables de febrero por una deuda que mantiene el Estado chubutense.

Al inaugurar este viernes las sesiones ordinarias del Congreso, y tras un duro discurso en el que repasó la herencia recibida y algunas de las medidas de su gestión, y anunció un paquete de leyes "anticasta", el Presidente sorprendió al convocar a los 24 gobernadores del país a firmar el fundacional "Pacto de Mayo" el 25 de ese mes en Córdoba.

El mandatario invitó a los gobernadores y a todos los sectores políticos a dejar de lado las que denominó "antinomias del fracaso" para construir un nuevo orden social, político y económico.

También, adelantó que la semana próxima convocará a la Casa Rosada a los gobernadores para ir delineando el acuerdo, aunque lo condicionó a la aprobación de la Ley Ómnibus y a la firma de un nuevo pacto fiscal.

Si bien cosechó el rechazo del bloque de diputados de Unión por la Patria y de la izquierda, al que este sábado se sumó la CGT, la iniciativa del libertario fue valorada y muy bien recibida por los mandatarios "Nacho" Torres, Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Leandro Zdero (Chaco), Alfredo Cornejo (Mendoza), Carlos Sadir (Jujuy), Marcelo Orrego (San Juan), Claudio Poggi (San Luis) y Jorge Macri, jefe del Gobierno porteño.

E incluso recibió el beneplácito de tres gobernadores provinciales peronistas: Osvaldo Jaldo (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca) y Gustavo Sáenz (Salta).