Las razones de Bullrich para renunciar a la reelección en Pro y sumarse al gobierno de Milei

Las razones de Bullrich para renunciar a la reelección en Pro y sumarse al gobierno de Milei

La excandidata de Juntos por el Cambio prepara su llegada al Ministerio de Seguridad; en su entorno afirman que está “dolida” con el expresidente, y advierten: “Ahora que Mauricio haga lo que quiera con el partido”

 

Matías Moreno

En el cierre de un día cargado de tensión por la exteriorización de la fisura de su vínculo político con Mauricio Macri, la titular de Pro, Patricia Bullrich, ingresó esta noche al Teatro Colón, donde la esperaba su pareja, Guillermo Yanco, para asistir a la fiesta de despedida que organizó Horacio Rodríguez Larreta, a quien derrotó en las PASO, al concluir sus ocho años de gestión en la Ciudad. Larreta, el gran protagonista de la noche, no podía saber que su celebración se desarrollaría en plena crisis del partido por el fuerte enfrentamiento que provocó entre Macri y Bullrich la decisión del presidente electo Javier Milei de convocar a la excandidata de Juntos por el Cambio para que asuma al frente del Ministerio de Seguridad.

Macri y Bullrich atraviesan un distanciamiento que asoma definitivo. En la intimidad se dedican reproches cruzados y enojos. Si el “pacto de Acassuso” los unió, la pelea por el reparto de poder en el nuevo gobierno de Milei los empujó a hacer visibles sus diferencias. Horas después de que visitara al presidente electo en el Hotel Libertador para ultimar los detalles de su arribo a la cartera de Seguridad, una oficialización que se demora y genera dudas, Bullrich pateó el tablero. Al tanto del enojo de Macri con su decisión de aceptar el ofrecimiento de Milei para regresar a la cartera de Seguridad, un rol complejo que no anhelaba volver a asumir, la expostulante presidencial, que se mantiene en silencio desde el jueves pasado, cuando el líder de La Libertad Avanza le ofreció el cargo, anunció esta tarde que convocará a elecciones internas en Pro para elegir a las nuevas autoridades del partido fundado por Macri en 2002, pero, sobre todo, aclaró que no se presentará para pelear por un nuevo mandato.

“Dedicaré todo mi esfuerzo, energía y tiempo en trabajar por una Argentina próspera y segura”, concluyó en un comunicado escueto que publicó en la red social “X”.

Bullrich intenta enviar un mensaje interno en medio de los cortocircuitos en Pro por su decisión de aceptar el ofrecimiento de Milei. Es decir, avisa que se correrá de la conducción partidaria, al autoexcluirse de la posibilidad de continuar como presidenta, para que no le achaquen que su decisión comprometía a sus socios de Pro. Macri había dejado trascender su malestar con Bullrich, a quien atribuye haber obrado de forma inconsulta, sin que se abriera una discusión en la fuerza respecto de cuál debía ser el rol de Pro. Es más, el expresidente coincidía con referentes del partido, como Rogelio Frigerio, en que Bullrich debía dejar el cargo. Anoche, Bullrich explicitó su ruptura con Macri cuando avisó a Viviana Canosa que no se dejará someter por el expresidente.

Al correrse de la presidencia de Pro, Bullrich procura ponerse por encima de la disputa interna y allanar su desembarco en la administración de Milei como ministra de Seguridad. De hecho, Bullrich cerró su publicación con un guiño, luego de que surgieran dudas respecto de su vuelta a la cartera que ocupa Aníbal Fernández. Señaló que trabajará por una “Argentina próspera y segura”. Hoy, tras su cumbre con Milei, trascendieron versiones de que podría recalar en Trabajo. Sin embargo, sus voceros y LLA descartaron esa chance. Lo consideran una operación que atribuyen a sectores del PJ o kirchnerismo.

“Patricia no es Pro, es ella. Ahora que Mauricio haga lo que quiera con el partido, que se arregle”, describe un alfil de la exministra al tanto de las conversaciones. Los colaboradores de Bullrich remarcan que no pone condiciones para asumir en Seguridad y que su objetivo es que el gobierno de Milei sea exitoso en la gestión nacional. Considera que esa es la exigencia de la base electoral de JxC. “Está haciendo un sacrificio al volver a Seguridad y no especula”, indican cerca de la titular de Pro. Repiten que ella aceptó el reto porque el presidente electo se lo pidió.

Si bien Bullrich avala la idea de que Cristina Ritondo presida la Cámara de Diputados en caso de que haya un acuerdo con LLA, no puso esa cláusula a la hora de negociar con Milei. Resta saber qué pasará con los once diputados que responderán a su liderazgo a partir del 10 de diciembre. Es la tropa que fue a romper el encuentro de la liga de gobernadores de JxC, quienes consideran que la coalición debe redoblar los esfuerzos para preservar la unidad del espacio para garantizar una alternativa a futuro. Por eso, creen que JxC no debe cogobernar con Milei, sino colaborar para darle gobernabilidad. En cambio, Bullrich considera que el peronismo o Axel Kicillof están destinados a ser la oposición. Atribuye a sus socios ubicarse en un “no lugar” y apuesta a una integración de las fuerzas del cambio.

“El partido servía en la oposición, ya no”, admite uno integrante de la mesa chica de Bullrich. Hace unos días ella cenó con Laura Rodríguez Machado, Pablo Walter y Juan Curuchet en un hotel porteño. Había un sector que anhelaba iniciar el operativo por la reelección de Bullrich, pero la exministra, dicen sus laderos, no planeaba volver a conducir el partido. Solo lo hubiese analizado si ganaba Sergio Massa. “Si acepta es por ella, no es por el Pro. Ese es el mensaje”, sintetiza uno de los dirigentes fieles a Bullrich. Atribuyen las demoras a la estrategia de comunicación de Pro o los detalles en torno a otros nombramientos. No está claro aún si ella pide o no por Luis Petri u otros. Hay versiones cruzadas.

Mientras espera que Milei oficialice la designación, ella avanzó con el armado de su equipo en Seguridad durante los últimos días. Se vio con Guillermo Ferraro, quien será su par en la cartera de Infraestructura, y hoy se vio con Sandra Pettovello (Capital Humano). También se juntó con los gobernadores electos Ignacio Torres (Chubut) y Frigerio (Entre Ríos), con quienes habló como futura titular de Seguridad.

En el entorno de Bullrich remarcan que, al correrse de Pro, intenta ponerse por encima de la disputa partidaria. “Quiere salir del chiquitaje. Es señal de que va a ser ministra de Milei”, reconocen en el círculo de confianza de la titular de Pro. Los suyos recuerdan que la movida responde a su estilo de liderazgo. Recuerdan que ya se había pedido licencia del partido cuando compitió por la candidatura presidencial de JxC. De hecho, creía que Larreta debía hacer lo propio en la Ciudad. “El Pro debe replantear su identidad o su rol”, insisten los laderos de Bullrich.

En el campamento de Bullrich no creen que Macri no haya presionado por cargos a Milei o que no haya entrado en el poroteo, como dejó trascender el expresidente. Al contrario, sugieren que sí le pidió a Milei por un grupo de funcionarios y puso la mira en Ferraro y Guillermo Francos, futuro ministro del Interior. “Está dolida con Macri. Y su actitud de dueño y jefe”, remarcan cerca de Bullrich.

Quienes rodean a la titular de Pro notan malestar en las filas libertarias por los supuestas exigencias de Macri. “Están muy disgustados con él. Perdimos, no podemos ir a dar órdenes ni llevar listas de amigos, como hizo Mauricio. Patricia tiene una actitud colaborativa”, lanza una de las espadas legislativas de la exfuncionaria.

Los feligreses de Macri celebraron el corrimiento de Bullrich. Insisten en que “negoció por su cuenta” y sostienen que el expresidente, si bien está dispuesto a colaborar con la gobernabilidad, no asfixia al líder de la LLA para reclamar ministerios o secretarios de Estado. Hoy mantuvo reuniones políticas y aún no agendó una cumbre a solas con Milei. “Mauricio no va a cogobernar con él”, avisan.

Comentá la nota