Mientras se recupera del cuadro de coronavirus que lo mantiene alejado de la gestión, al menos de manera formal, desde hace tres semanas, el intendente Ariel Sujarchuk deshoja la margarita. Su nombre está en la conversación y distintas fuentes lo apuntan como posible candidato a diputado nacional del Frente de Todos. Pero la definición, al parecer, se hará esperar hasta el sábado a última hora, cuando se cierren las listas para las elecciones primarias de septiembre.

Desde hace varias semanas que Sujarchuk está en la danza de nombres que suenan para ir en los primeros lugares de la lista del Frente de Todos, según dan cuenta quienes siguen de cerca el complejo armado electoral oficialista en territorio bonaerense. Claro que el menú de opciones es bastante amplio y hay otras alternativas de peso sobre la mesa.

Dicen que la discusión sobre el elegido para encabezar la lista en la provincia se habría reducido a dos nombres: Santiago Cafiero y Victoria Tolosa Paz. El jefe de Gabinete sería el favorito del kirchnerismo duro y del massismo, aunque el presidente Alberto Fernández querría conservarlo en el equipo de gobierno y preferiría que vaya la concejal platense, también titular del Consejo Nacional de Políticas Sociales.

“Los más prudentes, entre funcionarios y dirigentes, hablan de una tercera opción, una intermedia, con un intendente como punta de lanza. Ahí la danza de nombres es más amplia y alcanza a Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), Ariel Sujarchuk (Escobar), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas) y Mariano Cascallares (Almirante Brown)”, afirma un artículo publicado en el sitio web de La Nación (ver acá) que resume una versión muy extendida.

El periodista Santiago Dapelo, que firma esa nota, también sugiere la posibilidad del ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis, otro de los “imprescindibles” del presidente, en la lista de potenciales postulantes.

Podrían agregarse a esta nómina el ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, y el ex gobernador Daniel Scioli, actualmente embajador en Brasil, aunque su nombre sonó bastante menos y perdió fuerza en los últimos días.

Un mes atrás, al ser consultado también por La Nación, el jefe comunal escobarense reconoció abiertamente su interés en ser el primero de la lista: “Si me lo piden, yo ocuparía ese lugar. Sería una hermosa responsabilidad”, afirmó (ver nota acá).

“Es fundamental que quien encabece nuestra lista no sea un candidato inventado. Acá tiene que ser un ministro o un intendente, hombre o mujer, quien represente. Porque va a ser la voz de lo hecho y de lo que vendrá”, analizó Sujarchuk en esa entrevista, sin rodeos para dar su opinión.

Por ahora, la definición se hace esperar. El plazo para presentar las precandidaturas vence el sábado a medianoche y no sería raro que recién en ese momento, o muy poco antes, se conozca la decisión. Quienes deben tomarla son el presidente y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en acuerdo con el titular de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa.

Por otra parte, no es un dato menor que en diciembre finalizará el mandato de la escobarense Laura Russo, quien ingresó a la Cámara de Diputados en 2017, cuando todavía era la esposa de Sujarchuk. También se especula que ella, de no ir él en la lista, podría renovar su escaño.

 

Por lo pronto, está claro que el intendente de Escobar se erigió en una figura de referencia para el peronismo bonaerense. Aunque en los últimos meses dejó de vérselo en los estudios de los canales de noticias que solía frecuentar, su apellido sigue estando en boca de todos cuando se habla de candidaturas y nuevos liderazgos desde las comunas.

En 2019 pasó algo similar, aunque de menor intensidad, cuando se mencionó que podría ser compañero de fórmula de Axel Kicillof (ver nota acá). Pero aquello no se dio, como tampoco la posibilidad de conseguir un cargo de ministro o secretario de Estado, ya sea en el gobierno nacional o en el gabinete provincial. Tocó todos los timbres, pasó por todos los despachos, pero ninguna puerta se abrió para él. La pandemia, desde ya, no ayudó mucho.

Quizás ahora sí sea el momento de Sujarchuk, que exhibe como cucardas sus triunfos electorales en 2015, 2017 y 2019, incluso en los momentos dorados del macrismo; la gestión de su primer mandato y el 65% de apoyo que obtuvo en las urnas para ser reelecto.

Entre tantas conjeturas, trascendidos y alguna que otra operación política, hay una certeza: si Sujarchuk va en la lista de diputados nacionales, será en un lugar expectante y para asumir el cargo. En ese caso, el actual intendente interino Alberto Ramil debería seguir al frente del Ejecutivo. Sería una forma casi ideal de investirlo como su sucesor natural para 2023.

Falta un montón, sí, pero mucho de eso también está en juego ahora.

 

Por Ciro D. Yacuzzi