Por Agustín Maza

“No importa porque el acuerdo se va a recalibrar todo en las próximas semanas”, afirmaron a BAE Negocios en el quinto piso del Palacio de Hacienda tras conocerse que el país no solo había incumplido la meta de acumulación de reservas pactada con el FMI para el primer trimestre sino que también, y por mucho, la de déficit fiscal. Con la misma seguridad esperan un ingreso de USD10.000 millones para reforzar las arcas del BCRA a partir de un adelanto en los desembolsos previstos en el acuerdo o vía otros organismos multilaterales. O ambas cosas. El objetivo es evitar una devaluación que se traduzca en el fin de las posibilidades del Frente de Todos en las próximas elecciones.

Los analistas advierten que las presiones sobre los dólares libres que se vivieron esta semana son el preludio de una inestabilidad que crecerá a medida que se acerque el período electoral. La fecha clave es el 13 de agosto, cuando se celebren las PASO. Cerca del ministro de Economía, Sergio Massa, coinciden en ese diagnóstico y por eso aceleran la búsqueda de un ancla que evite escenarios de precipitación de la crisis. 

El primer paso será “recalibrar” el acuerdo con el FMI para adaptarlo para reflejar el impacto de la sequía. Sí el programa se sostuvo hasta último momento como un ancla de la estabilidad, el resultado fiscal del primer trimestre despejó cualquier tipo de duda de que eso no existe más como tal. Fue el segundo incumplimiento, luego de que las reservas finalizaran el período USD2.000 millones por debajo de un objetivo que ya había sido flexibilizado en USD3.600 millones.

El rojo primario finalizó el primer trimestre en casi $690.000 millones frente a los $441.500 millones que contemplaba el acuerdo, es decir, más de un 50% por encima de lo pactado. El director de Analytica, Claudio Caprarulo, destacó que allí se observó el efecto de la seca en la recaudación por retenciones, caída de 84% real interanual en marzo, porque el desvío se dio a pesar del fuerte ajuste real del gasto. Proceso que continuó en abril según el último relevamiento semanal de la consultora.

¿Qué busca Massa del FMI?

A partir de ahí se puede entender qué es lo que busca conseguir antes de la revisión de junio el jefe de asesores de Sergio Massa y principal interlocutor con los técnicos del Fondo, Leonardo Madcur. Habrá un cambio en las metas fiscal, monetaria y de reservas pero se buscará un equilibrio para que no se interprete como una luz verde a un desbande del gasto, sino sostener cierta prudencia fiscal para no alimentar las expectativas de emisión e inflación. 

El déficit fiscal no será 1,9% del PBI este año, tras el 2,5% de 2022, y las consultoras anticipan que algunas triquiñuelas contables cerrará en 3% del PBI. La pregunta inmediata que se hacen los economistas es: “¿De dónde sale la plata para cubrir ese bache de más de 1% del PBI?”. En Economía apuntan a las subastas de bonos en moneda extranjera en manos de organismos públicos y a los recientes cambios impositivos que hizo Afip en el comercio exterior a costa de que el círculo rojo anticipara un inmediato traslado a precios de los mayores costos para importar.

La otra para de la negociación en marcha tiene que ver con la necesidad de que ingresen dólares al BCRA para nutrir las escasas reservas netas lo más pronto posible, que son el verdadero poder de fuego de la entidad y rondan los USD600 millones según la metodología del FMI. La lenta liquidación del dólar agro permitió revertir el saldo de ventas en el mercado durante abril, pero el rojo sumó USD2.917 millones y es un récord para los años de cepo tal como indicó la consultora Ecolatina en su último monitor cambiario.

Peor aún, la semana que viene hay pagos al Fondo por casi USD700 millones y otros USD764 millones la próxima. Ante la consulta de BAE negocios sobre la posibilidad de postergar esos vencimientos, en Economía afirmaron que por ahora vienen al día con esos compromisos. Argentina tiene pendiente aplicar un tipo de cambio más alto, en el orden de los $300, para el pago con dólares de algunos servicios como el "Qatar" o "Coldplay" para avazar hacia una mayor simplificación y desinsentivar su uso.

Los fondos que esperan con ansias en Economía es de USD10.000 millones, la mitad de lo que se perderá en concepto de exportaciones debido a la sequía. “Pueden ser adelantos de desembolsos del FMI o de otros organismos, pero Estados Unidos garantizó que nos va a apoyar porque somos un aliado en la región”, mencionaron. 

Los sucesores para Economía

Ese respaldo es la carta que tiene el ministro de Economía para no dejar atrás su sueño de ocupar la Casa Rosada, si es que puede garantizar al menos alejar el fantasma de la devaluación. Tras el renunciamiento de Alberto Fernández, el Frente de Todos buscará un candidato que saldrá del consenso o de la competencia interna. Vale recordar que a Mauricio Macri no le alcanzó con el salvavidas de USD45.000 millones que desembolsó el Fondo en la última parte de su mandato por órden de Donald Trump para su reelección.

En los propios términos de Sergio Massa, la función de ministro no es compatible con la de candidato. Es por eso que ya se barajan algunos nombres para reemplazarlo, todos de su riñón: el viceministro Gabriel Rubinstein; el actual director del Indec y hombre de confianza, Marco Lavagna; y Madcur por su trabajo frente al Fondo.

La renegociación del acuerdo, incluso el incumplimiento de las metas, es una carta importante para jugar dentro del FdT como un gesto a una Cristina Kirchner que nunca tragó el programa que cerró Martín Guzmán a principios de 2022. El Aracre gate terminó con una foto amistosa junto Alberto Fernández en Olivos en una señal de sintonía con un Presidente que abrió el juego a la competencia electoral dentro de su espacio.

El dólar no dará tregua

En ese marco, las consultoras advierten que en el mercado de dólar futuro se observa una dinámica alcista de los rendimientos a partir de agosto, lo que deja entrever que el mercado toma cobertura frente a una devaluación tras las PASO. Esa expectativa presionará la demanda de los dólares paralelos (blue, CCL, MEP), con una brecha frente al oficial que volvió a superar el 100% este viernes, por primera vez desde septiembre de 2022 remarcó Ecolatina, y que presionará una inflación con piso de 6%-7% mensual hasta fin de año.

“Con todo, en el año los dólares libres suben, en promedio, 30%, frente a una inflación proyectada para el primer cuatrimestre en torno a estos niveles. En este sentido, si bien vale destacar el ritmo aumento que adquirieron, estas cotizaciones vienen acomodándose a la mayor nominalidad de la economía, tras un 2022 en el que los dólares paralelos se abarataron. En este sentido, por el momento el nivel de los dólares libre no es de “crisis”: por caso, a precios de hoy el dólar CCL de finales de julio 2022 (renuncia de Martín Guzmán) llegó a valer $570”, concluyó Ecolatina.