A un valor inicial de mil pesos el cubierto, la senadora nacional Gabriela Michetti aprovechó una costosa cena de gala, dentro del salón Terrazas que posee la Sociedad Rural Argentina en el barrio de Palermo, para exhibir la convocatoria política y los aliados que todavía no puede mostrar desde de su partido, el PRO: la fuerza que ayudó a fundar en 2003 y que la llevó a una fugaz vicejefatura de gobierno en 2007, para luego abandonar el cargo y transformarse en diputada. El pretexto oficial de la cita del jueves a la noche fue recaudar fondos para los proyectos comunitarios de la Fundación Suma, que creó y preside Michetti desde hace cuatro años. Sin embargo, el desfile de unos 500 invitados, entre funcionarios, políticos, empresarios, actores, lobbystas y periodistas, le permitió a la anfitriona mostrarse ante las cámaras y los flashes con un amplio arco de relaciones políticas alrededor de una expectante candidata que buscará suceder al jefe de gobierno Mauricio Macri en 2015 o acompañarlo como su candidata a vicepresidente.

El evento estaba previsto para las 22, pero comenzó poco antes de las 22:30, cuando llegó Michetti entre ovaciones y abrazos de los comensales que la esperaban en la antesala de un salón decorado con impecables manteles blancos y centros de mesa arbolados para recibir un delicado menú. La diputada nacional Elisa Carrió llegó a tiempo sólo para saborear el postre porque llegó tarde a la Rural debido a la votación del Código Procesal Penal dentro de la Cámara de Diputados. Carrió fue la última en llegar, pero se tomó el tiempo suficiente para mostrarse junto al jefe de gobierno, Mauricio Macri, que arribó al salón junto a su esposa Juliana Awada pocos minutos antes del comienzo del evento. Casi al mismo tiempo entró el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, el principal y mayor adversario político de Michetti en la pelea que mantienen ambos por suceder a Macri el año que viene.

INTERNA PRO: PLATO PRINCIPAL. Como si fuera un casamiento, un bar mitzvah, o una fiesta de 15, la liturgia de los saludos y los aplausos previos a la cena fue para todos los invitados, de rigurosa etiqueta. El recorrido inaugural de la anfitriona cosechó un largo besamanos de funcionarios porteños y de los invitados especiales, extrapartidarios, que buscaron preludiar la secreta, pero discretamente anunciada, tardanza de Carrió, quien se ganó las miradas de todos cuando Michetti comprobó, con alivio, que todos los invitados que habían confirmado asistencia habían cumplido, salvo el gobernador salteño Juan Manuel Urtubey, hasta ahora dentro de las filas del kirchnerismo. Entre los invitados que estuvieron a primera hora, aparecieron el radical Oscar Aguad y el senador mendocino y precandidato presidencial de UNEN Ernesto Sanz, pero también figuras del peronismo porteño, como Juan Manuel Olmos, presidente del Consejo de la Magistratura. "Vas a votar Aguad", lo chicaneó Patricia Bullrich.

Antes de abrir el evento, Michetti explicó a este diario que la cena de gala "es otra forma de financiar y de hacer la política", y reafirmó sus deseos de ser candidata a jefa de gobierno el año que viene. "Yo me veo más en la Ciudad que en otro lado, pero todavía no hablé con Mauricio. Creo que siendo candidata en la Ciudad ayudo más a Mauricio en su candidatura presidencial si hay desdoblamiento", deslizó la senadora en directa referencia al tema que más atención concentró en cada una de las mesas de la gala: si Macri mantiene el desdoblamiento de los comicios porteños con los nacionales, como establece una ley hace 13 años, o los unifica, tal como dice el proyecto de ley que mandó a la Legislatura hace 45 días, según confiaron varios legisladores que dialogaron con este diario. Un segundo antes de entrar al salón, Macri tampoco eludió las preguntas sobre este dilema: "Yo quiero unificar –le contestó a Tiempo–, pero creo que el desdoblamiento va a ser la salida final", dijo el alcalde y consideró que la cena "fortalece al PRO como partido". "Ya veremos cuál es el lugar que ocupará cada uno", deslizó.

Casi al mismo tiempo llegó Teté Coustarot, que venía de presentar un libro sobre la vida del gobernador bonaerense Daniel Scioli. Junto con el modelo Iván de Pineda realizó una subasta que, luego del postre, juntó más de 100 mil pesos entre asistentes como Juan Carr, de la Red Solidaria, y famosos actores y periodistas como Gonzalo Bonadeo, Fernando Bravo, Ari Paluch, Leonor Benedetto, Carolina Perin, Alfredo Leuco y el fiscal José María Campagnoli. También se pudo divisar entre las mesas a ministros porteños como Néstor Grindetti, Andrés Ibarra, Francisco Cabrera, Marcos Peña, Daniel Chain, el senador Diego Santilli, el titular de la Legislatura Cristian Ritondo o el delarruista Darío Lopérfido, mano derecha de Hernán Lombardi. Por la Coalición Cívica, también estuvieron Maxilimiliano Ferraro y Toty Flores, que descartaron pelear internas dentro del PRO, pero temen una unificación de Primarias y un desdoblamiento de comicios. Pasada la medianoche, cuando todos iniciaban la partida, un encumbrado invitado se animó a evaluar la cita. "Michetti ya está instalada, pero los juntó a todos para demostrarle al otro que no puede juntar nada", dijo el funcionario, mientras señalaba a un taciturno Rodríguez Larreta, que pasó toda la noche bien lejos de los flashes.