Las 5 razones por las que Mauricio Macri decidió ampliar la mesa chica del poder

Las 5 razones por las que Mauricio Macri decidió ampliar la mesa chica del poder

El Presidente evaluó la necesidad de preservar a Peña, tener un mayor contacto con el Congreso y los gobernadores y dar muestras de unidad

Acorralado por la crisis cambiaria o por las reiteradas quejas de los socios de Cambiemos, el presidente Mauricio Macri decidió en las últimas horas ampliar la mesa chica de toma de decisiones del Gobierno en una estrategia que no termina allí: habrá nuevos nombres que se sumen y se tratará de ensayar cierta apertura política, evitar el desgaste de algunos funcionarios y mostrar unidad hacia afuera.

La decisión de sumar a la mesa chica del Gobierno a uno de los fundadores de Cambiemos como Ernesto Sanz, al presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, y al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, aparece hoy como la muestra más visible de este giro en la estrategia presidencial.

Sin embargo, la intencionalidad de Macri no termina allí y esconde otros objetivos de corto plazo para su gobierno a la hora de transitar crisis como las que se registran hoy.

Hasta ahora la mesa chica de toma de decisiones de la Casa Rosada estaba conformada por Macri, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, sus segundos Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, la gobernadora María Eugenia Vidal y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Pero este esquema se ampliará.

Según confiaron a Infobae fuentes calificadas de la Casa Rosada y de Cambiemos, existen al menos 5 razones bien claras que sustentan la decisión de Macri de ampliar y modificar el funcionamiento de la mesa chica de trabajo:

(Télam)

1-Ajustar el diálogo con los gobernadores. La incorporación de Frigerio con mayor asiduidad a la mesa chica busca generar un nexo más fluido de Macri con los gobernadores. El Presidente cree que aceitar el lazo con los mandatarios provinciales será crucial para mantener un Senado alineado y para que haya una "coordinación de criterios entre la Nación y las provincias", como dijo un allegado al jefe de Estado. En este mismo esquema se contempla también la eventual incorporación a la mesa chica de los gobernadores de Cambiemos Gerardo Morales (Jujuy) y Alfredo Cornejo (Mendoza). "Hay que asegurar la ampliación de base política para que se asuma responsabilidad de gobernadores oficialistas y opositores", evaluó un ministro.

2-Preservar a Peña. No son pocos los que aseguran en la Casa Rosada que uno de los funcionarios más cuestionados hacia adentro de Cambiemos y en el Gobierno tras la crisis cambiaria fue el jefe de Gabinete. "Marcos [Peña] es el que maneja todo y el que se cerraba cada vez más en la toma de decisiones", se excusó ante Infobae un ministro que trata a diario con el jefe de Gabinete. Visto a la inversa, en la Jefatura de Gabinete advierten que la decisión de ampliar la mesa chica responde a la idea de "preservar" la figura de Peña ante el desgaste mediático y las críticas internas del propio Gobierno. De todas maneras, la reformulación de este esquema de trabajo no impedirá que Peña siga siendo el timón central luego de Macri en la toma de decisiones.

El presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó

3-Un Congreso aliado. En la Casa Rosada creen que uno de los disparadores de la crisis cambiaria fue la decisión de los diputados de la oposición de avanzar con la ley que pone un freno al aumento de tarifas de servicios públicos. Esto coincidió casi en paralelo con la decisión de Monzó de dar un paso al costado. "Perdimos un soldado fiel y con ello el control en Diputados", admitió un destacado legislador de Cambiemos en abierta referencia a la decisión de Monzó y a lo relegada que había quedado su figura. Ahora el Gobierno recalculó y decidió sumar al presidente de la Cámara baja a la mesa chica con la intención de tener una línea más fuerte de acción en el Congreso.

4-No ahuyentar aliados. En los últimos días Macri mantuvo conversaciones secretas con antiguos aliados de Cambiemos que se alejaron del Gobierno como Martín Lousteau. Pero el objetivo de ahora no es tan extremo. La idea de sumar a Sanz a la mesa chica del Gobierno forma parte de esta estrategia de contención en Cambiemos. Es que el referente de la UCR de Mendoza y fundador de Cambiemos es una pieza clave en el armado oficialista que había sido relegado en la toma de decisiones. Es probable que se sumen intercaladamente a este espacio reducido de poder otros referentes de la Coalición Cívica o de la UCR. Se habló del jefe del interbloque de Diputados Mario Negri o del auditor radical Jesús Rodríguez, quien casualmente hoy tuvo reuniones en la Jefatura de Gabinete.

5- Mostrar unidad y pluralidad. Más allá de que el nuevo esquema de funcionamiento de la mesa chica obtenga resultados o se trate de puro marketing para afuera, lo concreto es que se busca mostrar un Gobierno más unido y plural. "Aquí tenemos una coalición de gobierno que es Cambiemos y que hay que respetar con todas las diversidades de voces", dijo un funcionario que formó parte de estas ideas. En ese eje conceptual de Macri figura la idea de una mesa chica renovada del poder más variada que muestre a un Gobierno unido y no a una mesa aislada de la realidad. Esta es una emulación del esquema de liderazgo que más admira el Presidente y que es el de Nelson Mandela. No fue casual que justamente hoy estuviera durante 45 minutos dialogando en la Casa Rosada John Carlin, el periodista británico que escribió El factor humano, que es un fiel retrato de la presidencia multicolor del fallecido presidente sudafricano.

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