Asustado por la inflación, el ministro quemó los manuales libertarios y convocó a los supermercados para pedirles que no tomen las listas de Alimentos con aumentos. En paralelo, quiere que la paritaria más grande, la de Comercio se renegocie a la baja, porque con los plus alcanza el 9 por ciento y el Gobierno no homologa más de 1,5 por ciento. "Se pagará igual", le advirtieron.