El presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Oscar Ojea, alertó sobre el impacto que está teniendo el plan de ajuste en las condiciones de vida de los más pobres y de la clase media, reclamó que se mantenga la distribución de alimentos mediante la participación de los movimientos sociales que administran comedores populares, y describió un complejo panorama social, desde la falta de acceso a remedios para el dengue, a una aguda crisis en los colegios católicos.