La estrategia de Santilli para el debate de candidatos después de una actuación deslucida de Vidal

La estrategia de Santilli para el debate de candidatos después de una actuación deslucida de Vidal

Educación, trabajo y seguridad serán los ejes del hombre PRO en el debate. En la previa, mostró que habrá chicanas por las escuelas cerradas durante la pandemia y habrá gestos hacia la gestión del Covid en la Ciudad. Buscará dar más propuestas que pelas.

Por CARLA PELLIZA

Después de la desdibujada participación de María Eugenia Vidal en el debate de candidatos porteños, su par bonaerense, Diego Santilli, planificó su estrategia para el intercambio de propuestas con sus adversarios en la provincia, sobre todo Victoria Tolosa Paz. El tono del discurso está bajo cuatro llaves pero tendrá confrontaciones con el gobierno nacional, propuestas vinculadas al mundo de trabajo, la educación y la seguridad y una comparación poco lineal entre la gestión de la pandemia en la CABA y a nivel país.

El encuentro televisivo de candidatos bonaerenses en el canal TN se planteó, días antes, un poco más feroz que el de los porteños. En la provincia ganó Juntos pero el Frente de Todos apela a acercar el bochín o, incluso en el mejor de los casos, dar vuelta el resultado del 12 de septiembre. Ambos miran al mismo universo, aquellos millones que no fueron a votar en la PASO y aquellos que quedaron huérfanos porque sus opciones no superaron el piso del 1,5% necesario para llegar a las generales.

Santilli correrá con una ventaja. Ya vio cuál fue el discurso del Frente de Todos en la Ciudad y va a estar preparado para eso. Deuda, espionaje, falta de construcción de escuelas, rechazo a las medidas sanitarias de cuidado ante la pandemia y vacunas, por mencionar algunos. Los dos primeros temas dejaron mal parada a Vidal la semana pasada. Sobre los compromisos económicos, la ex gobernadora reconoció que quisieron pagar la deuda con más deuda. Sobre el espionaje que sufrieron ambos, ensayó una débil defensa a Mauricio Macri.

Según el vidalismo, Mariu pudo haber contestado mejor o peor pero no estuvo mal lo que hizo. Las preguntas de Leandro Santoro no la sorprendieron, las esperaba y eran obvias pero podría haberlas respondido más sólidamente. Pese a ello, para su equipo la ex gobernadora estuvo por encima del resto, evitó caer en confrontaciones, no gritó ni tuvo encontronazos con nadie. Incluso llamó la atención la falta de ataques de un Javier Milei que se vio neutralizado por Myriam Bregman.

En realidad, Vidal sí confrontó pero nadie lo reconoció. No confrontó con Santoro sino con el gobierno nacional. Pidió la renuncia del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, apuntó contra el vacunatorio VIP, las clases virtuales y el cumpleaños de Fabiola Yáñez en Olivos. Sin embargo, para su equipo no fue una pelea, fue decir lo que la sociedad piensa. Algo similar se verá en Santilli.

A fin de cuentas, los debates sirven para fidelizar votos, llegar a aquellos que no fueron a las urnas y, probablemente, no mucho más. Salvo cuestiones excepcionales, no hay ganadores pero sí perdedores, como fue el caso de Milei, por lo que un error grosero puede salir muy caro. Por eso, “el colo” buscará aprovechar sus escuetos minutos para hablar de propuestas y responder si hay que responder.

Los tres ejes del candidato de Horacio Rodríguez Larreta serán educación, trabajo y seguridad. Emergencia educativa, beneficios patronales para fomentar el empleo joven y cambiar el Código Penal para garantizar penas y su cumplimiento. Pero también tirará dardos al Frente de Todos, en especial con el cierre de escuelas por la pandemia y la gestión del COVID.

En tándem con Vidal, la campaña de Juntos por el Cambio pasó por revalorizar la actuación de Fernan Quirós, ministro de Salud porteño, y rebajar la de Ginés González García en Nación. Alguien que, dirán, ganó el Premio Hipócrates de la Academia Nacional de Medicina frente a alguien que tuvo que renunciar por el vacunatorio VIP.

La previa

Algo de esto ya se pudo ver el viernes en el Coloquio de IDEA donde, ante los empresarios más influyentes, se dio un debate de candidatos sin demasiados cruces pero con algo de contenido para marcar el camino y las propuestas. Estado presente, Estado chico, Estado casi ausente, reformas económicas, impositivas y educación fueron algunos de los temas que decidieron poner en valor los postulantes con algo en común: la necesidad del consenso amplio para mantener un mismo plan por varios años sin importar el signo político gobernante. Algo que pidió, horas antes, Larreta en lo que fue el lanzamiento de su campaña presidencial que, en realidad, empezó hace bastante.

En IDEA, Santilli pidió consensos grandes en lo fiscal, porque hay impuestos imposibles, en laboral para crear puestos de empleo genuinos, en lo federal para el desarrollo y reglas claras a lo largo del tiempo. Tolosa Paz se concentró en marcar el camino de la recuperación, de la importancia del Estado en el proceso, de la creación de un esquema impositivo progresivo para incentivar la producción, la inclusión laboral y el empleo joven.

En el medio, Florencio Randazzo bregó por un Estado más eficiente y previsibilidad para el empresariado. Cynthia Hotton no despotricó contra el Estado pero pidió reducir el gasto y José Luis Espert exigió limitar su margen de acción solo a lo esencial, con una reforma laboral, un dólar más caro y la eliminación del proteccionismo.

Del lado contrario, Tolosa Paz remarcó que más exportaciones no implican menos mercado interno y Santilli dijo que el Gobierno no puede dar previsibilidad económica si tuvo escuelas cerradas un año y medio y liberó presos durante la pandemia porque la gente quiere educarse, trabajar y vivir en paz. Un discurso al que se plegó Randazzo al decir que se destruyó la educación pública y que hace falta “mano justa” para los delincuentes.

Las propuestas no dejaron demasiado. Espert, Hotton y Randazzo fueron bastante genéricos. El primero pidió eliminar el proteccionismo y vincular la Argentina con el mundo; la segunda fue hacia una nueva ley laboral y el tercero habló de garantizar la estabilidad económica. Santilli y Tolosa Paz sí presentaron un listado de iniciativas que ya se comunicaron durante la campaña.

Para el hombre PRO, la prioridad será la educación con la sanción de su emergencia para ir a buscar a los jóvenes que abandonaron el colegio en pandemia, hacer obligatoria la evaluación del sistema y mirar el equipamiento, infraestructura y conectividad. Vincular lo escolar al mundo del trabajo, promover el empleo joven con alivio a las cargas patronales durante cinco años y poner el foco en la seguridad con la reforma del Código Penal.

Tolosa Paz, en tanto, propuso la obligatoriedad de la sala de tres años y el presupuesto que la educación se merece. Apuntó contra el cambio de prioridades de la oposición que hoy levanta la bandera de los colegios pero discontinuó el Conectar Igualdad y las Becas Progresar. Para la candidata del Frente de Todos, una de las cuestiones centrales será promover el empleo joven con reducción en las cargas patronales por tres o cinco años y, por otro lado, garantizar el acceso a servicios básicos esenciales en todo el territorio bonaerense.

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