En busca de los votos para aprobar la versión abreviada de la Ley Omnibus en Diputados, el Jefe de Gabinete Nicolás Posse y el ministro de Interior Guillermo Francos recibieron en Casa Rosada al bloque dialoguista de Hacemos Coalición Federal que conduce Miguel Angel Pichetto. Con él, estuvo Margarita Stolbizer y los macristas disidentes Emilio Monzó y el cordobés Oscar Agost Carreño. No hubo representantes de la Coalición Cívica, ni del Partido Socialista santafesino ni del peronismo cordobés del interbloque. El encuentro giró alrededor de la reimplementación del Impuesto a las Ganancias que impulsa el Gobierno y a la modificación de la fórmula de Movilidad Jubilatoria con diferencias entre oposición y Gobierno, y que aún no fueron saldadas.

El Gobierno que ya se había reunido con referentes del PRO y la UCR tiene con estos encuentros un doble objetivo: sumar votos para la Ley Bases y postergar indefinidamente el DNU70 en Diputados para que continúe vigente. El mega decreto del presidente Javier Milei también estuvo en la agenda de la Rosada.

Al término de la reunión, los cuatro visitantes--de un bloque de 23-- hicieron un balance. Pichetto reveló que las sugerencias de su bancada giraron en torno al diferencial en el adicional para las jubilaciones y detalles de Ganancias. Los dialoguistas propusieron –como el proyecto de los lilitos— modificar la fórmula atándola a la inflación, que entre en vigencia en abril y tenga una recomposición retroactiva de 20 por ciento sobre febrero por la pérdida del primer trimestre, calculada en 36,6 por ciento. El Gobierno, en cambio, sólo admite un 10 por ciento.

"Son los temas que me parece que hay que acercar y acomodar para tratar de hacer algo razonable para un sector que ha sido duramente castigado en términos del proceso de inflación y licuación”, dijo Pichetto y agregó: "El gobierno anterior cambió la fórmula, la suprimió por un año y puso una que no tenía el ítem inflación. Es una fórmula híbrida que no tenía la inflación en un país inflacional".

“Fue una reunión positiva", dijo el cordobés Agost Carreño. "Que estuviera el jefe de Gabinete es muy importante. Hablamos sobre la nueva versión de la Ley Ómnibus y la posibilidad de lograr acuerdos”, destacó, pero admitió: “Aún estamos muy lejos en el tema jubilaciones, en el que les insistimos en un aumento real y urgente”. Stolbizer, en tanto, destacó la reducción de artículos de la LO --que pasó de 664 a 269-- y reclamó un avance del paquete fiscal: "Es la herramienta que el Gobierno tiene para llevar adelante un plan y nosotros estamos bastante dispuestos a colaborar", afirmó.

La fundadora del GEN también se refirió a otras sugerencias que propuso. Una, sobre el blanqueo de capitales: "Es algo que nos incomoda a nosotros en general y que tiene que ver con el capítulo de los testaferros --dijo--. La verdad es que dar un beneficio a aquellos que ponen a nombre de terceros (el dinero), es facilitar o beneficiar a quienes han hecho alguna trampa o cometieron un delito. Es un artículo que nos incomoda", argumentó.

Al igual que el PRO y la UCR, los federales también se mostraron a favor de una reforma laboral. Aunque a diferencia del resto, sostienen que debe ser a través de una ley aparte.

El bloque cree que ha dado señales de buena voluntad con ejemplos como haber levantado un pedido de sesión especial para esta semana en la que buscaban tratar un proyecto de Stolbizer para reponer el Fondo de Incentivo Docente. En ese sentido, también dejaron advertencias al Gobierno para que baje los decibeles de confrontación con los diputados si quieren alcanzar votos para sus proyectos.

Al encuentro también se sumaron el asesor presidencial estrella Santiago Caputo; José Rolandi, segundo de Posse, y el secretario de Interior Lisandro Catalán. Entre los diputados hubo faltazos. No fue Ricardo López Murphy ni Florencio Randazzo --que lo justificaron por problemas de agenda. Tampoco estuvo el cordobés Ignacio José García Aresca, contagiado de dengue. Su ausencia fue otra señal de advertencia al Gobierno. Los diputados que responden al gobernador Martín Llaryora sostienen que han dado muestras de su actitud dialoguista y que respondieron a los pedidos del Ejecutivo como no bajar al recinto la semana pasada pese a que su propio interbloque citó sesionar por las jubilaciones en la sesión que se frustró por falta de quórum. Además, la senadora Alejandra Vigo se abstuvo en el Senado para no votar contra el DNU. Y hoy consideran que para que los acuerdos prosperen la negociación del Gobierno debe pasar directo por Llaryora.