Él, en Morón; ella, en Misiones. Él, en Mendoza con Julio Cobos; ella, en el caluroso norte del país. Él, en Bahía Blanca; ella, en Entre Ríos con Alfredo De Angeli.

Las agendas de Mauricio Macri y Gabriela Michetti, la fórmula presidencial de Pro en el frente Cambiemos, se desdoblarán en la mayoría de los días que faltan hasta el fin de la campaña para las Paso, el viernes 7 del mes próximo.

Los responsables del armado nacional de Pro, el secretario de Gobierno porteño, Marcos Peña, y el ministro de Gobierno, Emilio Monzó, definieron que el tándem continúe por separado sus recorridas por el país, con una tendencia: Macri estará en el conurbano bonaerense buscando votos para él y su candidata a gobernadora María Eugenia Vidal, mientras que la senadora porteña recorrerá -como ya lo viene haciendo- las geografías más lejanas del país para levantar las acciones de sus candidatos allí.

"Tenemos la ventaja de que Gabriela es una muy buena candidata y de este modo podemos llegar a más lugares con nuestro mensaje", afirmó ayer Peña a LA NACION.

Los ejemplos de esa división de tareas son tajantes. Hoy, mientras Mauricio Macri esté de visita en una fábrica de galletitas en Morón junto al candidato a intendente Ramiro Tagliaferro, Michetti estará en Misiones con Humberto Schiavoni, titular de Pro y candidato a diputado nacional por esa provincia. Mañana y pasado Macri seguirá con sus recorridas por el conurbano, y el jueves estará en Mendoza con el ex vicepresidente, candidato a senador nacional por Cambiemos y con grandes chances de hacer "una gran elección", según se esperanzan en la UCR, y también en el macrismo. Michetti, en cambio, tiene planeada una visita a Jujuy y Salta para el jueves, y a Entre Ríos el viernes.

BATERÍA DE CAMPAÑA

La senadora estará acompaña por su vocera, Paula Schuster; algún dirigente macrista (fue Paula Bertol la semana pasada, será Laura Alonso en esta), y los infaltables camarógrafos y fotógrafos provistos por la comunicación Pro. "Con Gabriela tenemos esa posibilidad de duplicar la campaña, cosa que otros vices no pueden hacer", desafió Pablo Walter, ex senador y responsable de la campaña Pro en el noroeste argentino.

Macri y Michetti se unirán, sin embargo, en dos ocasiones: en visitas a programas de radio y tevé, el martes, y en la inauguración de la muestra de la Sociedad Rural, en la mañana del sábado. "Ella está chocha con el desafío, y cosecha mucho cariño en cada lugar al que va", afirmaron cerca de la senadora, que también dio por cerradas sus controversias con el líder de Pro en torno a la elección porteña.

Los dirigentes que rodean a Macri dieron "por superada" la polémica acerca de la supuesta "kirchnerización" del líder de Pro por su discurso del domingo, luego de los festejos por el triunfo de Horacio Rodríguez Larreta como continuador de la gestión Pro en la ciudad. "Lo hemos explicado bien, definimos la propuesta y lo seguiremos haciendo", afirman en Pro.

Y se muestran entusiasmados con la batería de actividades que se vienen: reuniones masivas con fiscales (la del sábado en Mar del Plata congregó a más de mil), timbreos de todos los candidatos en sus respectivos distritos, más la actividad de los call centers con los que esperan llegar a millones de hogares de todo el país a través de voluntarios.

Estarán, por orden de Macri, todos los dirigentes de peso involucrados en las horas decisivas. Incluso Rodríguez Larreta, que tras su triunfo y unas breves vacaciones en Miami se sumará, desde pasado mañana y según pudo saber la nacion, a las recorridas de Vidal por la provincia, y en apoyo a otros candidatos Pro del conurbano, en la provincia que más preocupa al líder de Pro.

EL SECUESTRO Y BOCA, EN LA WEB

La cuenta regresiva para las PASO ya comenzó, y Mauricio Macri volcó ayer en su sitio web buena parte de los hechos salientes de su vida personal, con sus propias opiniones sobre esas vivencias. En- globados bajo el título "El gran desafío. Cuatro momentos", y con una mezcla de texto y videos, el candidato de Pro se refirió a los trece días en los que estuvo secuestrado, en 1991; a su pasión por Boca Juniors, club que presidió entre 1995 y 2007; a sus contactos de campaña con vecinos de todo el país, y a sus hijos, grandes y pequeños. "Quiero ser presidente porque estoy convencido de que puedo ayudar a que todos los argentinos tengan una vida más feliz", dice el líder de Pro en uno de los párrafos..