Gestión y militancia se deben complementar, no confundirse

Gestión y militancia se deben complementar, no confundirse

Por: Gerardo Gómez Muñoz.

Sumar militancia a la gestión es aportar dos elementos que cualifican la actividad en función de gobierno. Lo imperdonable sucede cuando groseramente se milita con otros intereses, descuidando la acción de gobierno y prostituyendo la virtud del esfuerzo en aras del bien común.

El breve exordio viene a cuento de lo que sucedido en la calles céntricas de Mar del Plata con la muerte de dos indigentes por el estado de abandono, de ambos, que pernoctaban en la calle en estas noches de tremendo frío. Por supuesto que como es de esperar con los políticos puestos a responsables de estas muertes las explicaciones saturan y hartan, pero no alcanzan a disimular siquiera que se debe a falencias funcionales del organismo oficial que tiene por función excluyente prever que estas imperdonables fallas se produzcan.

La responsabilidad final le cabe a la actual secretaria de Desarrollo Social que, seguramente, estará abrumada de pesar por esta real tragedia doble pero lo debe ser también por su trayectoria política de reconocida militancia en el campo social. Seguramente no fue el desinterés el disparador de estos dos hechos desgraciados e irreparables. Pero, con y sin excusas, en algún grado y en algún paso del accionar oficial hubo algo de incuria.

La muerte de estos desafortunados prójimos no se produjo en barrios lejanos de la ciudad donde ni siquiera hay luz que permita visualizar a dos personas durmiendo en la calle, en la vereda o bajo un alero.

Uno estaba tirado entre cartones y diarios en plena avenida Luro y La Pampa en la zona de la Estación Ferroautomotora, sector de buena iluminación; y el otro en el miserable cobijo que prestaba el acceso a un edifico en Catamarca y Diagonal.

No pueden decir luego los funcionarios que ellos recorren las 24 horas buscando en las calles eventuales pernoctores de este tipo “los que viven en situación de calle”.

Los que trabajan en su atención desde la fe o la solidaridad de organizaciones al servicio de los desposeídos, inclusive desde la política, saben sí que el trabajo puede demandar, realmente, las 24 horas.

Tal vez la gente que trabaja a órdenes de Vilma Baragiola no puedan hacerlo más allá del horario asignado y pagado. También se sabe que la malhadada gestión de José Cano, podador irracional y enfermizo de fondos destinados a educación, salud, asistencia a los planes sociales y programas destinados a los sectores carenciados, no contemplaba fondos suficientes para este tema específico.

Además en la concepción cada vez más cerrilmente neoliberal que avanza en sectores gubernamentales hay vidas más importantes que otras. Pero también cuando hay más preocupación y más militancia para ganar espacios laborales que derivan a politiquerías que buscan ganar clientes partidarios y no para ponerse al servicio de terceros que necesitan sí, pero que no dan réditos materiales, se llega a situaciones como éstas que exigen mucho palabrerío no ya para borrar o disimular responsabilidades sino para no perder posiciones políticas futuras.

Mucho le debe doler a Baragiola esta situación pero más le va a costar contestar a los cuestionamientos razonables y necesarios que parten desde la oposición y que por tanto deben ser contestados. Es exigible que así sea porque alguna razón debe existir para que en menos de un mes dos personas necesitadas duerman en la calle sin que el organismo oficial que “trabaja las 24 horas” para que esto no suceda no los haya ni advertido.

Además, el invierno ni siquiera ha comenzado lo que permite suponer que podría en el futuro inmediato más casos imperdonables como éstos en los que se fueron dos vidas humanas sin que los pagados para cuidarlos puedan brindar explicaciones razonables, sí las hay.

Voces que claman

La oposición no parece, así debe ser, callar sin encontrar la más mínima información sobre la responsabilidad de la Secretaría de Desarrollo Social o de quién sea sobre estas dos muertes. Y lo está haciendo con seriedad, porque no salió a batir el parche en busca del bochinche mediático.

Claudia Rodríguez, la concejal de Acción Marplatense, enumera una serie de datos que hace por lo menos presumir que hubo obligaciones no cumplidas por la secretaría a cargo de Vilma y enfatiza cuál es “el protocolo” en el que se escuda la funcionaria responsable del área para repartir por los medios culpabilidades a diestra y siniestra.

El segundo caso desnuda otras situaciones como el incidente protagonizado por la segunda víctima -el muerto no declara- por lo cual es expulsado del refugio. ¿Basado en qué protocolo fue tirado a la calle y dejado quizás en la peor noche del año a merced del frío más impío? Casualmente Baragiola, tal vez afectada de faringitis no ha salido a los medios a los que es tan afecta a decir qué pasó.

La edil del Frente para la Victoria Marina Santoro dice que hace ya un mes y medio -15 de abril- se pidió una explicación e información sobre el operativo frío y el equipo de intervención en la calle y el convenio con el Hogar Nazaret. Esta última mención da una pista para llegar a ciertos secretos donde queda al descubierto cómo la gestión a veces se opaca con la militancia mal entendida.

El muy activo presidente del bloque del Frente Renovador Lucas Fiorini ya anduvo por allí y por eso ahora se sabe que el municipio debe aportar por convenio anterior una mensualidad, son 70 mil pesos para albergar a 50 indigentes por día-noche. Esa cifra parecería que destartalaba el impresentable presupuesto de José Cano (los mismos radicales y arroyistas que vieron el trabajo dicen que da vergüenza), porque el inminente hombre de un monoblque, no pagó nunca esa “ingente suma”.

Ahora se sumó otro curioso, Martín Aiello el último secretario de Pulti en Desarrollo Social, quiere saber como funciona el programa “El Puente” que también atendería a los pobres argentinos “en situación de calle”.

En estos días anduvo por aquí Daniel Salvador, vice gobernador y a la vez presidente del comité provincial de la UCR. Ojalá de paso haya hablado con los correligionarios sobre la fecha de elecciones internas, lo que liberaría de distracciones militantes a Vilma y tantos otros convocados a esa épica que, quizás los distrae un poco de la gestión.

Los aprestos partidarios

Fieles a su historia -al menos en estas formalidades- los radicales ya vienen inquietos porque no se confirma la fechas de sus elecciones internas. Dicen que Nico Maiorano mientras sigue a Messi en las canchas norteamericanas se da un tiempito para cartear buscando novedades que Vilma y otros asociados a la lista común, le aportan. Esta inquietud inicial fue notoriamente exacerbada por la elección en Río Cuarto que fue tema central ayer en los centros de la garrulería política.

En los cafés habituales de los corrillos políticos fue dable ver dedos alzados en ristre de radicales que enrostraban a correligionarios la sociedad con Macri.

Otros que vienen sobrellevando airosamente el duro invierno al calor de las dotadas estufas oficiales, seguían gustando el café con aire de “gallinas distraídas”. Se aportaban esclarecedores como “en Río Cuarto tuvimos desde 1983 todos los intendentes, menos uno, y ahora metimos a Mauricio Macri con sus spots y mensajes telefónicos en la campaña después de haber ganado con 70 por ciento y perdimos por 14 puntos”. Además, “eso fue porque quisieron mostrar la total unidad del PRO-UCR, porque la campaña era como una consolidación de Cambiemos”.

Peronistas que sonreían de arco a arco tenían lo suyo “porque ahora se creen que se cayeron todas las barreras y que se le abren los caminos” y las respuestas salían como latigazos “y ustedes creen que van a ganar con el tarifazo y los despidos y vayan buscando paraguas porque viene la lluvia de inversiones”. Todo muy divertido y civilizado, cerrado en uno de los habituales foros cafeteriles con un aplauso unánime al kirchnerista que se despidió “a ustedes los voy a buscar en el próximo semestre”. Acallado el divertido bullicio, uno pudo abocarse en cuidados murmullos, cosechando datos sobre el discreto escarceo interno en diversos sectores.

Pulti, Faroni, Fiorini, Cheppi

Hay ya algunos que han cantado qué se proponen de cara a las próximas elecciones. Por ejemplo, Gustavo Pulti, aprovechó el Día del Periodista para convocar a un agasajo, cuya respuesta fue de atender. Unas cuantas decenas se dieron cita en las bien servidas mesas compartidas con concejales actuales y ex de Pulti, ex funcionarios y dirigentes.

Significativa la presencia en lugar preferencial de Bonifatti y la ausencia de Ariel Ciano. Uno desmintió así que se había ido de Acción Marplatense y que estaba peleado con el jefe y el otro confirmó que se ha ido. Aunque algunos confidentes dicen que el ex intendente asegura que no está dicha la última palabra.

Lo de Pulti fue claramente un “aquí estoy vivito y coleando”. Dijo un discurso de alto vuelo para destacar todo lo hecho, especialmente en los campos social y educativo, en sus dos gestiones y “todo lo deshecho por el nuevo gobierno en sólo seis meses”. Se rió un poquito del patético José Reinaldo Cano y quedó en claro que es un animal político, que no está herido y que sin dudas conduce a Acción Marplatense.

Movido por la actividad de su bloque de concejales con Lucas Fiorini, el Frente Renovador es el sector político que más se hace ver en estos últimos tiempos: Todos los temas de interés y que golpean a la gente, sin excepción, ha sido abordados y muchas veces liderado por él, el otro edil Alejandro Carrancio, el secretario del bloque Martín Abonjo, el dirigente Marcelo Viejo, y el tercer concejal Cristian Azcona.

Pero el grupo no duda quien lo encabeza y éste no deja margen sobre su aspiración a ser el próximo candidato a intendente de Massa. También las paredes cuidadosamente pintadas se encargan de decirlo, pese a lo que acaba de decir Javier Faroni en LA CAPITAL.

Fiorini, está seguro que la ligazón del diputado a Sergio Massa, va a ser más fuerte que la no militada aspiración de Faroni.

Otras versiones que vinculaban a Fiorini en conversaciones con Urtubey y con Randazzo, no fueron desmentidas, pero sí rebajaban el peso de la cuestión “no, el salteño, me parece que no da” y dio a entender que Randazzo todavía no se sabe qué quiere. Pero desde el archivo el periodista puede afirmar que Fiorini trabajaba en la interna massista con el intendente de San Miguel, Joaquín de la Torre que ahora está alejado del tigrense.

El Frente para la Victoria en cierta reunión de hace dos meses habló, pero no hubo afirmación ni siquiera oficiosa de la postulación de Carlos Cheppi como primer concejal, para luego lanzarlo a la candidatura de intendente en 2019. Pero, las versiones indican que la diputada nacional Fernanda Raverta y quizás el concejal Marcos Gutiérrez y alguna otra “orga” interna no comulgarían con esa construcción.

El oficialismo municipal

No cesa la inestabilidad interna en la comuna, ganada en estos días por las versiones que provocan adversas reacciones a diestra y siniestra. Nicolás Maiorano, el brioso concejal de la UCR, mirando los partidos de Argentina en Estados Unidos, el secretario de Salud y Coordinador de Gobierno Gustavo Blanco, también por el país del norte. Algunos licúan la bronca con datos que también llegan con sordina “está con su familia, sus hijos”. Y el dato aleatorio de que este viaje se da en momentos de la irrupción de la “Gripe A” en Mar del Plata con tres muertos a este día.

La frutilla del postre, frutilla agria, es el dato de la presencia en Estados Unidos, también en estos momentos del “Ruso” Daniel Katz que habla de la vigencia de su buen pasar económico. Los que se pasan de mal pensados quieren convencer a los que escuchan que no es casual el silencio de Baragiola ante las quejas del arco opositor por los dos indigentes muertos por el frío mientras dormían en la calle. El “Ruso” viajero habría aconsejado “hasta que yo no vuelva no hables”.

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