El candidato de Provincias Unidas hizo un discurso en la Bolsa de Comercio surfeando entre críticas al gobierno nacional y promesas de diálogo post elecciones. Sarcasmo con Macri por la funcionalidad del espacio federal y “paso a paso” sobre el 2027.
Por Bettina Marengo.
Juan Schiaretti surfeó entre críticas y promesas de diálogo en el enclave más cercano a Javier Milei de toda la provincia, la Bolsa de Comercio, donde ayer fue la figura principal de uno de los tradicionales Almuerzos de Coyuntura de la entidad. En el mismo lugar, pero para festejar los 125 años de la Bolsa, estuvo hace tres semanas el Presidente, en lo que fue el lanzamiento de campaña violeta de cara a las elecciones del 26 de octubre.
Schiaretti habló de Provincias Unidas como la opción “sensata y con sentido común” a La Libertad Avanza y al kirchnerismo, pese a que su anfitrión, Manuel Tagle, le marcó la cancha diciendo que Provincias Unidas “puede ser una opción moderada” pero no tiene que abandonar los principios de libre mercado. El exmandatario respondió a su turno con llamado al diálogo post elecciones, aunque aclaró que el pedido está en la cancha del León. “No se puede maltratar a todos”, advirtió.
Sorprendió una definición del exgobernador y candidato de Provincias Unidas: dijo que la elección en Córdoba no está polarizada, pese a que admitió que la fuerza que representa y La Libertad Avanza son los espacios con más intención de voto para las elecciones de medio término. Como sea, el candidato quiso que quedara en claro que el cordobesismo se despegó de la lista de Gustavo Roca, dato que las huestes del oficialismo provincial evitan dar. El gobernador Llaryora no asistió pero su gente tiene otra lectura, aseguran que la “no polarización” fue una mención a la baja virulencia de la campaña, algo bastante real si se tiene en cuenta que los mayores palos fueron con otra peronista, Natalia de la Sota.
Molestos con los que vinculan a Provincias Unidas con expresidente Macri, como hizo la diputada disidente, pero no solo ella, los schiarettistas vienen diciendo que el calabrés “está terminado” y niegan el primo de CABA, Jorge Macri, vaya a sumarse a Provincias Unidas. “Operaciones massistas”, aseguran. Se verá. Lo cierto es que Schiaretti le retrucó a Macri sus críticas de supuesta funcionalidad al kirchnerismo del esquema de los seis gobernadores y su ponderación de la polarización. “Lo dice para que levante Bullrich en CABA (donde es candidata a senadora por LLA en acuerdo con el PRO), que se está cayendo, o para levantar en provincia de Buenos Aires”, señaló y ahondó la tensión: No lo vi al expresidente decir que la cosa era blanco o negro cuando quiso ser presidente, sino ir por el equilibrio.
Por lo demás, se negó dos veces a responder sobre una eventual candidatura presidencial dentro del espacio Provincias Unidas de cara al 2027, ni propia ni de terceros, y se mantuvo en su objetivo de hoy: juntar la mayor cantidad de votos en los comicios de fin de mes tanto en lo provincial como a nivel nacional para ayudar a Milei a “corregir lo que está mal” con un bloque voluminoso en el Congreso.
El evento en el edificio nuevo de la Bolsa, ubicado camino al Aeropuerto, reunió a empresarios, dirigentes empresariales y economistas, con la diputada Cecilia Ibañez como única representante opositora al cordobesismo. Escucharon y aplaudieron los candidatos Miguel Siciliano, Carolina Basualdo, Laura Jure e Ignacio García Aresca, junto a los ministros de Producción, Pedro Dellarrosa, recientemente bendecido como candidato oficialista a intendente de Marcos Juárez 2026, y Sergio Busso, de Agroindustria. Dato: participó el fiscal general de la Provincia, Juan Manuel Delgado, abogado cercano a Schiaretti y proveniente del mundo empresarial.
En lo económico, el primer candidato de Provincias Unidas desplegó su manual de liberalismo con sensibilidad social, y equilibrio fiscal con plan productivo. Para él, el gran error de Milei es enamorarse de los instrumentos y de los métodos. “Bajar la inflación a martillazos”, graficó varias veces. Dijo que la baja transitoria de las retenciones dispuesta por el gobierno nacional supuestamente hasta el 31 de octubre no fue tal sino “una parodia” para que las cerealeras le adelanten dólares al gobierno y reclamó, como siempre, la eliminación del impuesto a las exportaciones.
Hubo también una confesión, a dos días de la última junta de los gobernadores de Provincias Unidas antes de las elecciones, mañana miércoles en CABA. Admitió que es candidato a diputado por Córdoba porque los gobernadores (no Llaryora, aclaró) le pidieron que jugara en su provincia como parte de la estrategia nacional del espacio. “No merezco medalla por eso”, deslizó.
Comentá la nota