Los trabajadores movilizados decidieron suspender las medidas de fuerzas tras la propuesta de la firma de ponerse al día con los sueldos. Las tratativas
Los trabajadores movilizados decidieron suspender las medidas de fuerzas tras la propuesta de la firma de ponerse al día con los sueldos. Las tratativas
Esta semana los dirigentes tendrán una reunión clave con los directivos de la empresa, en búsqueda de destrabar el conflicto y empezar resolver los reclamos que se centran en que la firma abone “los salarios en forma íntegra y suministrar ocupación efectiva, además del reclamo de diferencias salariales adeudadas”, manifestaron.
Han pasado muchos meses desde el inicio del conflicto, son casi ocho desde que la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra) comenzó el bloqueo de SanCor Cooperativas Unidas Limitada, situación que en todas las plantas se extendió hasta el inicio de este año, pero que puntualmente en la central de Sunchales aún continúa.
La empresa Conaprole podría comenzar a jugar fuerte en el mercado doméstico.
Si bien algunas prepagas y obras sociales reconocen descuentos a sus afiliados, en paralelo, hay muchas otras que no. El Gobierno confirmó que no la incluirá en el Calendario Nacional.
La justicia de Santa Fe imputó a empleados de SanCor, que integran ATILRA, por los bloqueos que realizaron en la planta que la empresa tiene en Sunchales.
La Asociación Trabajadores de la Industria lechera (ATILRA) denunció que se habría detectado una nueva maniobra fraudulenta de los directivos de SANCOR C.U.L.
El sindicato lechero ATILRA sumó una denuncia judicial al largo conflicto que mantiene con la cooperativa SanCor.
ATILRA presentó en Rafaela un hábeas corpus por el accionar de SanCor y prepara un paro nacional lácteo. Hubo irrupción de la policía en la fábrica y hasta en domicilios particulares de trabajadores pero la fiscalía desmintió haber dado orden judicial para esos procedimientos.
Desde el sindicato Atilra adelantaron que si SanCor no paga la deuda salarial accionarán judicialmente hasta llegar a la quiebra.
Integrantes del Cuerpo de Delegados de Sancor manifestaron que “no todos los directivos están de acuerdo en esta campaña sucia contra nosotros” y sostuvieron que “la gestión de una empresa es responsabilidad de quienes la dirigen”.
La Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina (ATILRA) volvió a pronunciarse “ante la acuciante situación” de Sancor y destacó “los alcances de la lucha que vienen llevando adelante” los trabajadores.
Los paros de Atilra dejaron de ser masivos y porque los empleados volvieron a trabajar a las plantas de SanCor. El gremio les exige el dinero que les dio.
SanCor y sus procederes fascistas
En una decisión inédita y peligrosa, el Gobierno de Santa Fe dispuso la presencia de fuerzas de seguridad en el interior de la planta que la cooperativa láctea Sancor posee en la localidad de Sunchales. Fue a raíz de un largo conflicto laboral que suele paralizar las actividades en reclamo del pago de salarios.
El Cuerpo de Delegados del Personal de Sancor CUL difundió una Carta Abierta dirigida al gobernador de la provincia de Santa Fe, Maximiliano Nicolás Pullaro, que tituló: “Denunciamos grave incumplimiento del deber del funcionario público e intento de sofocar nuestro reclamo laboral”.
Los legisladores nacionales del PRO de Santa Fe, Verónica Razzini, Alejandro Bongiovanni y Gabriel Chumpitaz arribaron a la sede central de SanCor para amenazar y agredir a los trabajadores en conflicto calificándolos de «delincuentes” y afirmando que “no van a parar hasta verlos en la cárcel».
El conflicto laboral entre ATILRA y la empresa cooperativa SanCor ha alcanzado un punto álgido, con el Cuerpo de Delegados del Personal rechazando las acusaciones vertidas por los directivos de la compañía en un reciente comunicado
El cuerpo de delegados de SanCor salió al cruce de la versión de los directivos y les recordó que vendieron 8 plantas y que no se sabe que pasó con ese dinero. Además advirtieron que la deuda de la empresa «la torna inviable» y que los directivos «planean la retirada».
El sindicato liderado por Héctor Ponce se negó extender a la conciliación obligatoria y retomó las medidas de fuerza.
El martes venció la absurda conciliación dictada por falta de pago de haberes de SanCor a sus dependientes. Dialogamos al respecto con los integrantes del Cuerpo de Delegados del Personal (CPD)*, que participaron de las audiencias dispuestas por el organismo de aplicación.
Tras una nueva audiencia en el Ministerio de Capital Humano, donde se propuso una extensión voluntaria rechazada por los trabajadores crece la incertidumbre por la disputa.
Radiografía de cuatro casos, en distintas provincias, con final abierto. Quién es el gremialista K que impulsa “acciones extremas”.
La Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina (ATILRA), el gremio que conduce Héctor Ponce, destacó “un fallo que muestra el camino” en el marco de la situación de Sancor.
Se trata de un período de cinco días hábiles hasta que el 23 del actual se realice otra reunión entre el sindicato Atilra y la empresa.
El gremio de los trabajadores lecheros había pedido que la Justicia impida movimientos económicos, administrativos y financieros de la empresa.En octubre comenzaron las asambleas que paralizaron la actividad. El 22 de diciembre se dictó la conciliación obligatoria entre las partes.
Delegados de SanCor, que está en conciliación obligatoria con el sindicato Atilra, hablaron de un supuesto vaciamiento y se refirieron al estado de las plantas industriale.
El Ministerio de Capital Humano resolvió su primera Conciliacion Obligatoria desde la asunción del Gobierno
La Asociación Trabajadores de la Industria Lechera (ATILRA) denunció que los directivos de SanCor CUL no efectuaron ninguna propuesta sobre cómo pagarán la “deuda salarial histórica” con los/as trabajadores/as.
Tras meses de conflicto, dos plantas de SanCor volvieron a funcionar
Los directivos de la empresa denunciaron aprietes, y que están al límite de desechar miles de litros de leche debido a la incapacidad para procesar el producto. El sindicato exige pago de salarios, un aumento y otros aportes.
Luego de rechazar que el cierre de una fábrica de quesos de la firma fuera responsabilidad del accionar sindical, se insistió que no hay bloqueo, y acusó a los directivos de no pagar los sueldos completos.
La empresa lo atribuyó a un conflicto con el sindicato. Trabajadores mencionaron que ya no fabricaba hace semanas.
Sancor anunció el cierre de su planta de quesos blandos situada en la localidad santafesina de San Guillermo, y responsabilizó de la situación a la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra), a la que acusó de estar «paralizando la actividad productiva y comercial» desde hace 40 días. Días antes, Atilra difundió datos sobre el estado financiero que deja la administración de la cooperativa, con un pasivo de, al menos, U$S 379.400.000 y al borde de la quiebra.
A a pocas horas de haberse emitido un nuevo comunicado de SanCor Cooperativas Unidas Limitada expresando la necesidad de retomar la producción, se conoció la noticia más temida que había anticipado la semana anterior Bichos de Campo: Se cierra la planta de San Guillermo, y con esta situación que no está definida si será definitiva, quedan en el camino las fuentes laborales de 26 personas.
Las cabezas de la compañía no tienen respuestas para los acreedores y el consejo de Administración está fracturado. Los trabajadores remarcan que "la culpa ha sido de la administración".
La firma dejaría de operar un establecimiento en San Guillermo, Santa Fe, por las interrupciones en la producción debido a medidas de fuerza de Atilra.
Durante poco más de una hora y media, este martes en el Ministerio de Trabajo de la Nación se cumplió la tercera audiencia entre la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra) y la representación de SanCor cooperativas Unidas Limitada.
La interrupción es consecuencia de la imposibilidad de procesar la leche que le acercan sus proveedores. La opción del fideicomiso generaría despidos