Los efectos globales sobre las economías que está provocando la pandemia de coronavirus, han llevado las miradas de dirigentes, economistas y gente común al sector más rico de cada sociedad, y a buscar la forma en la que pueden ayudar a sostener el gigantesco costo de las medidas de emergencia tomadas por los gobiernos en todo el mundo.

Italia, España, o Brasil analizan varias las propuestas para conseguir fondos adicionales que permitan sostener sobre todo la situación de los más vulnerables.

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En Argentina, los diputados Máximo Kirchner y Carlos Heller impulsan el impuesto solidario -que se aplicaría una sola vez-, otros parlamentarios y economistas insisten en que se requieren cambios permanentes en los esquemas impositivos para lograr un doble objetivo: incrementar la recaudación a la vez que se logra un dispositivo más progresivo, por el cual tributen más quienes más capacidad contributiva tienen.

En este punto, Sebastián Nieto, jefe para América Latina y el Caribe del Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), entrevistado por el sitio web BBC Mundo, consideró que "la recaudación fiscal por el pago de impuestos sigue siendo muy baja en Latinoamérica y reduce poco las desigualdades". Y pone el tema en cifras: el fisco en la región recauda un 23,1% del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que en los países de la OCDE ese promedio alcanza un 34,4 por ciento. Si se desagrega por países, algunos como Guatemala, Paraguay y República Dominicana, recaudan menos del 14 por ciento.

En cuanto a la progresividad de los esquemas impositivos, resalta el hecho de que los impuestos sobre la renta de los individuos llega a un 2,2% del PIB en América Latina, mientras que recauda un 8,3% en los países de la OCDE. En este marco, Nieto propone subir el impuesto a la renta de los individuos, combinándolo con un incremento del impuesto a la propiedad y otros tributos relacionados con el medio ambiente, en lugar de aplicar un "impuesto solidario" a las grandes fortunas por única vez.

Propuestas de más impuestos

En el caso de la Argentina, el oficialismo propone aplicar un tributo de 2% a las personas que hayan declarado un patrimonio superior a los US$3 millones, con escalas crecientes que llegan hasta el 3,5%, aunque "por única vez".

"Ante una situación tan excepcional, se requieren medidas excepcionales", le dijo a BBC Mundo Julia Strada, doctora en desarrollo económico, directora del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) y directora del Grupo Banco Provincia, que promueve la iniciativa.

Según Strada, en la región viene creciendo la idea de cobrar un impuesto a la fortuna de los más ricos por una sola vez, principalmente  impulsado por los partidos políticos de oposición, como el del xpresidente Evo Morales en Bolivia; parlamentarios del PT en Brasil; técnicos cercanos al expresidente Rafael Correa en Ecuador; legisladores del Frente Amplio en Perú, o miembros del Partido Comunista en Chile.

Pero también avanzan en la idea los oficialismos. Por ejemplo el presidente de Perú, Martín Vizcarra, anunció que está estudiando la posibilidad de un impuesto "solidario" o impuesto a la fortuna, aunque sin dar más detalles. Y en España, la fuerza política Unidas Podemos, propone un impuesto a la grandes fortunas individuales, bajo el nombre de "tasa de reconstrucción".

En otros países como Suiza, y el Reino Unido, legisladores de distintas fuerzas políticas están hablando de un tributo "de emergencia". Como en Alemania, donde miembros del Partido Social Demócrata (SPD) propusieron un impuesto extraordinario a la propiedad -por una sola vez- para recaudar fondos adicionales frente a la pandemia.

Otra de las ideas expuestas por economistas y dirigentes políticos y sociales tiene que ver con un tributo sobre las propiedades, dice BBC Mundo. Al respecto, Emilio Pineda, jefe de la División de Gestión Fiscal del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), consideró que "hay un enorme espacio para mejorar el impuesto a la propiedad en Latinoamérica".

Recaudación y pandemia

La región recauda cerca de medio punto del PIB en impuesto a la propiedad, explica Pineda, mientras que los países de la OCDE recaudan por encima del 1,5%. "Hay espacio para triplicar el impuesto a la propiedad", dice el economista, agregando que es mejor concentrarse en este tipo de instrumentos, antes que gravar las fortunas en general. La experiencia internacional, argumenta, muestra que el impuesto a la fortuna, recauda mucho menos de lo que se esperaba porque es muy difícil de cobrar y los resultados han sido heterogéneos.

En tanto que otro segmento de economistas y políticos se orientan más en el sentido de un aumento del impuesto a los ingresos de las personas, es decir, las utilidades generadas por su capital (habitualmente invertido en acciones), y otros ingresos que pueden provenir, por ejemplo, de salarios, como el Impuesto a las Ganancias en Argentina. En Guatemala, el país con la menor recaudación de impuestos de la región, la oposición propuso aumentar este gravamen. Y en Italia, desde el oficialismo se promueve una "Tasa Covid" de carácter progresivo durante 2020 y 2021, sobre el impuesto a las ganancias anuales de las personas.