El Concejo se alborota y el oficialismo suma un nuevo "árbitro"

El Concejo se alborota y el oficialismo suma un nuevo

Nicolás Lauría toma distancia de la oposición más dura y busca disputar con Acción Marplatense el rol de definidor de los proyectos clave. Fotomultas quedó contra las cuerdas y las alternativas del oficialismo para aprobar el Presupuesto 2022 y el aumento de tasas. 

Por Mariano Suárez

 

El sorpresivo cambio de postura de Nicolás Lauría que decidió apoyar públicamente el convenio del Ejecutivo con la Universidad de San Martín (Unsam) para instalar un sistema de fotomultas en Mar del Plata pareció modificar el tablero político del cuerpo legislativo. No obstante, su apoyo no cambiará la suerte del expediente que, si no hay otro cambio inesperado, será archivado en la próxima comisión. En el Ejecutivo lo saben y por eso ponen la atención en la otra batalla legislativa: el Presupuesto 2022 y el aumento de tasas.

Este miércoles, con la presencia de la presidenta del Concejo Deliberante, Marina Sánchez Herrero, la comisión de Hacienda terminó con las rondas de funcionarios y este martes pondrá el expediente a votación. La intención del oficialismo es que el jueves se apruebe el presupuesto y la suba de tasas del 45% en la sesión preparatoria y el 31 en la sesión de concejales y mayores contribuyentes.

El plan, todavía, tiene algunos puntos grises. El oficialismo tiene 11 votos y la oposición hoy cuenta 10 en contra. Hay tres votos que están el terreno de los indecisos: dos de Acción Marplatense y Lauría.

El partido que lidera Gustavo Pulti tendrá una reunión en las próximas horas para definir su postura. Su manual político les indica que deben aprobarlo. “El presupuesto es el plan de gobierno que lo desarrolla el intendente. Ellos ganaron las elecciones y tienen que poder implementar ese plan”, analizan en AM.

¿Por qué entonces no confirman su apoyo? En 2021 el oficialismo aceptó modificaciones propuestas por su espacio (presupuesto participativo, Caps en Batán) y si bien incluyó los pedidos en el Presupuesto no ejecutó nada. “Para nosotros, el gobierno dejó de ser creíble. Vamos a hacer sugerencias, pero también buscar cómo hacer para garantizarnos que las implementen y no hagan lo mismo que el año pasado”, fustigan.

Luego de su acercamiento el oficialismo a través de las fotomultas, Lauría también avisa a sus interlocutores que “por ahora” no acompañará el presupuesto.

Con el apoyo de Acción Marplatense al oficialismo le alcanzaría para aprobarlo tanto en la preparatoria como en la de mayores contribuyentes, donde sumaría 24 votos. Debería desempatar la presidenta del cuerpo y, según argumentan en el oficialismo, la Asesoría General de la Provincia ya reconoció que eso es posible (siempre se dijo que se necesitaban 25).

¿Qué pasa si AM decidiera rechazar los proyectos? El voto de Lauría y sus dos mayores contribuyentes (Guillermo Volponi le permitió designar al suyo) pasan a tener otro peso. “Sus acciones crecen”, analiza una fuente legislativa.

Fotomultas, contra las cuerdas

El apoyo de Lauría al proyecto de fotomultas tuvo más impacto mediático y simbólico que real. Desde su alejamiento del oficialismo y su unión con Alejandro Carrancio para conformar un nuevo bloque se había convertido en un férreo opositor. Escribió, en ese contexto, una durísima carta contra el intendente Guillermo Montenegro.  

Sin embargo, el sorpresivo apoyo al expediente del Ejecutivo significó su ruptura con el Frente de Todos, pero no cambió el destino del convenio. “Nosotros anticipamos nuestra posición para que no sigan pasando cosas raras”, afirman desde AM. Aclaran que no están en contra de que Mar del Plata tenga fotomultas, pero aseguran que debería realizarse a través de una licitación, como lo hizo Gustavo Pulti en su gestión. Salvo algún cambio que hoy no se vislumbra el expediente será archivado.

El cambio de postura de Lauría generó especulaciones sobre su regreso al oficialismo, incluso a un cargo del Ejecutivo. “No hay nada de eso”, dicen, categóricas, fuentes del gobierno local. Aunque hay un dato que no pasa desapercibido: a diferencia de lo que ocurrió con Carrancio y Lucas Fiorini, Montenegro jamás habló mal de Lauría.

En el entorno del concejal afirman algo parecido: no habrá regreso al Ejecutivo y tampoco al oficialismo. “Apoyaremos los proyectos que nos parecen bien y votaremos en contra de los que no”, explican, en un discurso casi calcado al de Acción Marplatense. Y no es casual: Lauría buscará quitarle al partido de Pulti su rol de árbitro en el cuerpo legislativo.

Lo que está claro es que el exbasquetbolista se distanciará de su compañero de bloque Alejandro Carrancio, que sostendrá su perfil como férreo opositor al gobierno de Montenegro. En rigor, los dos concejales que tejieron su alianza luego de abandonar el “montenegrismo” caminaban por caminos distintos hace rato, pero su rol de opositores al jefe comunal los llevaba hacia la misma dirección.

Ya sin la conducción de Fiorini que decidió acercarse a Fernanda Raverta y trabajar en el PJ, Carrancio busca convertirse en el referente de Javier Milei en Mar del Plata. Luego de la foto que se sacó con el economista durante su ruidoso paso por Mar del Plata, en las últimas horas, viajó junto a la presidenta de Crear, Cecilia Martínez, para mantener distintas reuniones con referentes de ese espacio. La más comentada fue con el economista, Carlos Maslatón, de altísimo perfil en las redes sociales.

El camino de Lauría, por ahora, es incierto. Sus negociaciones con el Frente de Todos quedaron sepultadas y la posibilidad de un regreso a Juntos tampoco parece clara. “Va a seguir en el Concejo”, dicen desde su entorno. “No la tiene fácil, porque lo van a mirar mal los opositores y hay muchos oficialistas que quedaron molestos con él”, sostienen en los pasillos del Concejo.  

En un cuerpo legislativo dividido por dos bloques mayoritarios aquellos bloques o ediles que buscan romper la polarización también protagonizan su propia pelea por lucir el traje de árbitro y no ceder protagonismo. 

Comentá la nota