Juntos por el Cambio activó el "operativo Geniol" para sacar de la cancha a Macri

Juntos por el Cambio activó el

El PRO por estas horas es una olla a presión. Algunos señalan que la interna por futuros liderazgos, está en el momento de mayor tensión. Horacio Rodríguez Larreta quiere sacar provecho de las luces que lo encandilan favorablemente por la convivencia política con el Presidente en medio de la pandemia. No obstante, con la mayor discreción, se comenta que le abrió la temporada de caza a algunos de sus alfiles, para comenzar a trabajar en su campaña presidencial.

Por: JORGE JOURY.

El Gobierno ya olfateó la movida. Y en vez de apuntarle a Larreta, al que mantiene como buen aliado en la sensible lucha contra el virus en el AMBA, eligió empezar por desgastar a otros principales jugadores. Para ello, utiliza el menú más apropiado al momento: cascotear con la nefasta herencia recibida en el rubro salud. Un ministerio al que Mauricio Macri convirtió en secretaría y en donde hasta resucitaron por la falta de presupuesto, enfermedades del pasado como el sarampión. Y en la Provincia, pegarle a María Eugenia Vidal con el marcado deterioro de los hospitales que dejó, también le viene bien a Kicillof. Bajarle las defensas a Vidal, es una manera de empezar a domesticarla por su fuerte peso a nivel legislativo.Además, es una dirigente que aún mantiene un aceptable caudal de imagen positiva. Hasta Ginés González García se sumo al fuego de artillería y disparó sobre ella, señalando que la gestión bonaerense "fue horrible".

La propia presidenta del PRO, Patricia Bullrich, admitió que en  Cambiemos existe mar de fondo por el apoyo de sectores al presidente Alberto Fernández en el marco de la pandemia, y cuestionó al Gobierno por "plantear unidad cuando te pega una patada por abajo de la mesa".

La ex ministra de Seguridad, de buen olfato para rosca política, admitió que el planteo del Presidente en trabajar de manera conjunta para "construir unidad", principalmente con Horacio Rodríguez Larreta, despertó "ciertas discusiones" dentro de la alianza opositora.

"Algunos dicen que por un lado están los halcones, y por otro las palomas", reconoció Bullrich, mientras que al ser consultada sobre si ella se referenciaba como el "halcón" y el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta la "paloma", contestó: "Eso es lo que dicen".

Bullrich que encarna el ala más dura del equipo amarillo, también contestó las críticas que realizó Alberto Fernández a la ex gobernadora, y sostuvo que el mandatario plantea "un juego totalmente sucio".

"No hablamos con Vidal. Igualmente, como presidenta del PRO salí en defensa de ella y de nuestro gobierno, porque el Presidente está planteando que hay que trabajar todos juntos y construir la unidad y después te pega por abajo de la mesa una patada: es como un juego totalmente sucio", arremetió la ex funcionaria, dejando al descubierto que algo se ha quebrado en el escenario opositor y hay montescos y capuletos en plena contienda.

Lo que Bullrich sospecha es que el Presidente está "tratando de dividir a la oposición", ya que "hoy existe una oposición muy potente y un oficialismo fuerte". 

Bullrich, conocedora del tejido más sensible del kirchnerísmo, eligió pegar por el lado de la decisión de la Oficina Anticorrupción de renunciar a la querella en las causas en las que está imputada la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner junto a sus hijos Máximo y Florencia por las causas "Hotesur" y "Los Sauces".

"Es algo serio, grave. El hecho de que todo el organismo técnico, los que trabajan ahí desde tanto tiempo hayan decidido no seguir al responsable de la oficina diciendo que lo que hace es ilegal, y que al mismo director le da igual, demuestra que es una acción meramente política de querer salvar a la vicepresidenta de los casos por los que está siendo acusada", señaló.

"Evidentemente esto va en camino a ir poniendo todos los días un elemento nuevo en este intento de consagración de la impunidad que vienen construyendo, que había parado un poquito con la cuarentena, pero vuelve con fuerza", sentenció.  

Mientras tanto, Mauricio Macri observa desde afuera. Sabe que si asoma la cabeza, el Gobierno le mandará la caballería con algunas causas que están merodeando por Comdoro PY. El ex mandatario pasa la cuarentena en su quinta de Los Abrojos, en el partido de Malvinas Argentinas, pero ocupado en otros menesteres. En su entorno reconocen que está “a full” con su cargo en la FIFA, aunque aún no puede administrar los fondos ni viajar producto de la pandemia. No obstante, siempre se mantiene cauto, sin hablar ante los medios. Federico Pinedo, una de sus principales espadas, lo definió como un “silencio patriótico”. El titular de la UCR y diputado, Alfredo Cornejo fue un poco ,más allá y señaló que era “prudente” que no hable. 

Dentro de las filas del PRO nadie se anima a decirle que su figura ya tiene fecha de vencimiento y ante el avance de Rodríguez Larreta, hoy está en un segundo plano. 

Según se supo, la propia Vidal se sumó al ala moderada de la coalición opositora que encarna Larreta y trabaja en un armado territorial.Ya dio la primera puntada en una teleconferencia con legisladores santafesinos de su partido

Tal vez el más duro de los que apareció en esta disputa intestina, sea Emilio Monzó, el más ninguneado en su momento durante la gestión macrista. El ex presidente de la Cámara de Diputados nunca logró ser líder dentro de Cambiemos y Peña lo mantuvo siempre fuera de las grandes discusiones. Ahora el dirigente bonaerense va por la revancha y comentan que ya está trabajando en la campaña presidencial de Larreta. Algunos llaman irónicamente esta movida "el plan Geniol", por el notable parecido del jefe de Gobierno porteño, con esa legendaria publicidad del analgésico creado en el año 1927. Monzó ya le acercó al economista Jorge Remes Lenicov.

Comentan que Monzó articula con Martín Lousteau, con quien se solía reunir semanalmente desde antes de la cuarentena en las oficinas que tiene el senador en calle Costa Rica, en Palermo Sensible o Villa Freud, una zona llamada así por los numerosos consultorios de psicólogos que hay en el vecindario.

Este grupo sumó a Remes, el primer ministro de Economía que devaluó la moneda actual y terminó con la ley de convertibilidad en los primeros días de 2002, durante el gobierno de Eduardo Duhalde.

Días atrás, Remes les diagnosticó que el gran desafío del sistema político argentino es ir al centro porque, según sostiene, las dos fuerzas más importantes del país están conducidas por los extremos.

Remes dijo que Alberto se dedicó a gestionar y no liderar el peronismo, que sigue detrás de Cristina, y que la prueba de supervivencia de Cambiemos es abandonar la intransigencia de Macri y Patricia Bullrich y darle el lugar a los Larreta, los Monzó y los Lousteau.  

“No hay una disputa entre Macri y Larreta, hay una transición natural”, disparan en el entorno del ex jefe de Estado. ¿Qué piensa Macri de una posible candidatura en 2021? “Hoy no es algo que considere. En todo caso se verá más adelante si el espacio lo necesita. Eso si, quien crea que se retira de la política, no lo conoce”. Cerca del "ala dura" de Cambiemos Patricia Bullrich, ex ministra de Seguridad y hoy presidente del PRO y su candidato a vice Miguel Pichetto, observan expectantes. Los dos también sueñan con llegar a la Rosada. El liderazgo concreto de JxC se verá cuando se armen las listas para las elecciones legislativas para el 2021. Los primeros lugares los deciden los jefes. Macri por ahora espera. No tiene apuro. Pero el ala moderada es evidente que ya puso primera. 

*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información, graduado en la UNLP y analista político. Para consultar su blogs, dirigirse al sitio: Jorge Joury De Tapas. 

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