El vuelo de Aerolíneas Argentinas para buscar en Moscú las nuevas dosis de la vacuna Sputnik V sigue programado para este lunes por la noche, pero podría volver a ser reprogramado debido a que Rusia no confirma el envío.

El viaje estaba pautado en principio para el domingo pero se reprogramó para este lunes por la noche, tal como indica la web de Aeropuertos Argentina 2000. Sin embargo, nadie en el gobierno se anima a confirmarlo.

En el gobierno atribuyen la demora a problemas logísticos en Rusia, donde aparentemente no terminan de dar el visto bueno para la salida del avión. Sin embargo, el hermetismo es total y no hay ninguna explicación oficial.

La duda que surge es acerca de la capacidad de producción rusa, uno de los temas que el propio Vladimir Putin admitió como clave. Otro tema adicional es que la Constitución rusa establece que las vacunas producidas en su territorio deben ser destinadas a sus ciudadanos. Con Argentina se hizo una excepción a la espera que se active la producción en otros países, como India.

Lo que sí admiten en el gobierno es lo evidente: no llegarán en enero los 5 millones de dosis de la Sputnik V que habían prometido funcionarios nacionales como Ginés González García y Carla Vizzotti. Con suerte, si Rusia lo habilita, podrían llegar alrededor de un millón de vacunas en dos vuelos.

En el vuelo que en principio partiría este lunes se espera traer un número de dosis mayor a las 300 mil que se trajeron en los dos primeros viajes. Se estima que podrían ser entre 400 mil y 600 mil. La idea es llegar a un millón de vacunas con el segundo vuelo que partiría esta semana.

Más allá de la promesa incumplida de las 5 millones de vacunas (4 millones de la primera dosis y 1 millón de la segunda), lo real es que la campaña de vacunación argentina viene muy demorada (especialmente en algunas provincias) y recién se está completando la aplicación, mientras también se están dando los primeros pasos con la distribución de las segundas dosis.

A este ritmo, no tiene sentido la llegada masiva de vacunas (si es que pudiera darse) debido a los altos costos que implica el mantenimiento, que en el caso de la Sputnik V se hace a menos 18 grados. No hay novedades de un cambio en la estrategia de vacunación para acelerar los plazos. Para febrero el Gobierno promete otros 10 millones de dosis.

En paralelo, a comienzos de enero había trascendido que el jueves pasado saldría otro avión de Aerolíneas en este caso con destino a Beijing a buscar la primera tanda de un millón de vacunas aparentemente comprometidas con el laboratorio chino Sinopharm. La firma de ese contrato nunca se concretó y tampoco la vacuna fue aprobada por Anmat.