La suba en las importaciones achicó el superávit comercial

La suba en las importaciones achicó el superávit comercial

Tanto las exportaciones como las compras externas continuaron creciendo durante junio. Pero el efecto de la recuperación económica, junto con el atraso cambiario y la expectativa de que esa dinámica se interrumpa luego de las elecciones, llevaron a un recorte del excendente de dólares de la balanza de bienes. Fue de 1.067 millones de dólares en el mes.

En junio se mantuvo el superávit comercial aunque, luego de dos meses de pico, se achicó respecto a los niveles de mayo. Y es que, si bien las exportaciones continuaron creciendo y marcaron el máximo nivel desde 2014, las importaciones tuvieron incremento bastante más abultado. Así, el superávit fue de USD1.067 millones, por debajo de los USD1.672 millones de mayo. El dato de las importaciones resulta alentador acerca de lo que ocurrió con la actividad en junio, pero se explica sobre todo por el atraso cambiario que se viene observando.

En ese sentido, cabe destacar que las exportaciones siguen creciendo. La comparación mensual desestacionalizada dejó una mejora de 8,9% respecto a mayo. Y las importaciones, también libres de factores de estacionalidad, crecieron 8,5%.

Sin desestacionalizar, es decir dejando el fenómeno estadístico de lado pero centrándose en los dólares devengados, sin embargo, las exportaciones dejaron USD163 millones extra y las importaciones drenaron mucho más, USD768 millones. Eso explica la diferencia entre el superávit de mayo y el de junio.

Al observar las comparaciones interanuales también se observan mejoras, por supuesto: las exportaciones crecieron 45,8%. Mucho lo explican los precios internacionales, ya que crecieron 32%. Pero también hubo una mejora de 10,6% en las cantidades. Cabe destacar, en todos los casos, que compara contra los pisos históricos de la pandemia.

Las importaciones, en cambio, crecieron 79,1%. Y 47,7% en cantidades. Y es que, pese al parate de la segunda ola, la actividad creció mucho entre un año y otro. Por otro lado, el dato desestacionalizado da cuenta de una mejora respecto al mes previo, lo cual se puede explicar en parte porque se volvió a la senda de la recuperación económica y en parte por el atraso cambiario y la expectativa de que haya correcciones después de las elecciones.

Desde la consultora Abeceb destacaron: “Las importaciones registraron una importante aceleración, acumulando ocho meses de alzas interanuales y llegando al mayor valor para el mes desde 2017, traccionadas principalmente por mayores volúmenes. Esto muestra el rebote de la actividad luego del año de la pandemia y una recuperación de la inversión, junto a una posible mayor flexibilización en los permisos de importación y un adelantamiento de importaciones frente a un tipo de cambio moviéndose en la zona del 1% mensual”.

Y desde LCG afirmaron: “Las importaciones continúan mostrando un alto dinamismo, con un crecimiento respecto de mayo de 8,5% sin estacionalidad. Adicionalmente, la tasa muestra un aceleramiento, observándose la misma 5,2 puntos por encima de la del mes de mayo, que había marcado una suba de 3,3% mensual. Una posible explicación para esto podría estar relacionada con los desequilibrios en el mercado de cambios, que motivarían un aumento de las cantidades importadas”.

 

Por Mariano Cuparo Ortiz

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