De la Sota propone más federalismo contra la “saña centralizadora”

De la Sota propone más federalismo contra la “saña centralizadora”

Ratificó en Mendoza su aspiración presidencial, evitó calificar al gobernador Pérez y a los candidatos Bermejo y Cornejo, y reconoció ser amigo de Cobos.

El peronista José Manuel de la Sota, tres veces gobernador de Córdoba y precandidato a presidente por el Partido Demócrata Cristiano, se presentó en Mendoza como ‘el único aspirante a la presidencia del interior’, aunque aún negocia una eventual competencia en las PASO de un espacio común con el senador puntano Adolfo Rodríguez Saá y el diputado nacional, Sergio Massa. 

Así lo reflejó una extensa nota publicada en el diario Los Andes.

Luego de que su spot de campaña lo definió como alguien que ‘cree en el peronismo, pero tiene el coraje de criticarlo’, presentó su libro ‘Quiero y puedo’ ante un auditorio de 300 personas, predominantemente empresarios y profesionales.

 

También asistieron dirigentes sindicales (como el caso del titular de gastronómicos, Ernesto Guerra) y referentes del peronismo federal como el ex diputado nacional Enrique Thomas y el ex intendente de Luján, Luis Carral.

Se pronunció por reducir un 30 por ciento los impuestos a lo largo de cuatro años “como lo hice en Córdoba y como no lo han hecho (Mauricio) Macri  en la Ciudad de Buenos Aires ni (Daniel) Scioli en la provincia”. Consideró posible “eliminar las retenciones a las exportaciones de productos regionales” porque “sólo representan el 5 por ciento de los ingresos y no desfinancian al Estado nacional”. 

Desarrollo y pacificación

El cordobés propone “eliminar los subsidios a quienes no los necesitan” porque “éste es el país de los subsidios y hay una cultura de la gratuidad que no es buena ya que desalienta las aspiraciones”.

De la Sota cree necesario un “plan de desarrollo nacional que priorice el desarrollo regional” cimentado “en una reformulación del Mercosur y un nuevo tipo de relación con Brasil” y que incluya “un programa de justicia fiscal para las empresas competitivas que creen nuevos puestos de trabajo”.

Asimismo, se pronunció  por ‘un acuerdo social por 24 meses para bajar la inflación” y “por la reforma a la actual, arbitraria e injusta ley de coparticipación” mediante  “un programa que destine el excedente anual de la recaudación por impuestos coparticipables a un fondo de reparación a ser distribuido entre las provincias de acuerdo  con indicadores de insuficiencia de infraestructura y pobreza”.

En ese sentido calculó que “en seis años se podría transferir más del 20 por ciento de lo que hoy retiene el gobierno federal en su saña centralizadora, para llegar a un 50 y 50 que equilibre el actual 66 a 33 por ciento”.

De la Sota se presentó como “el presidente de la pacificación y de la reconciliación del país” y dijo tener amigos “en todos los partidos políticos de Mendoza”.

Evitó opinar sobre el gobernador, Francisco Pérez, y sobre los candidatos peronista, Adolfo Bermejo, y radical, Alfredo Cornejo, aunque dijo que tiene “excelente relación con el ex gobernador (Julio) Cobos por encima de las distintas visiones”. 

Y manifestó: “Yo no voy a las provincias a armar aparato  para tener un gobernador adicto cuando sea presidente, ni le financio las campañas o le junto personajes de distintos pelajes. Yo quiero gobernadores que defiendan sus provincias y que no sean delegados del poder central”.

Cuestiona a Scioli y Macri

José Manuel De la Sota repitió tres veces su gobernación de Córdoba, luego de otros tantos intentos fracasados frente a los radicales Eduardo Angeloz y Ramón Mestre.

Fue el embajador en Brasil de Carlos Menem y diputado nacional. Hoy aspira a la presidencia alentado por dirigentes sindicales como Hugo Moyano,  Luis Barrionuevo y Gerardo ‘Momo’ Benegas. Y políticos como Francisco De Narváez y Julio Bárbaro. Cercano a Sergio Massa -con quien negocia competir en las PASO- considera que el sciolismo es un ‘continuismo mediocre’ y el macrismo ‘una vuelta al pasado’.

Comentá la nota