El excandidato presidencial Sergio Massa vuelve a moverse en el tablero político. Este miércoles compartirá un almuerzo con intendentes bonaerenses del Frente Renovador (FR), en lo que será la primera postal concreta de su reaparición orgánica dentro del peronismo desde su derrota electoral. La reunión marcará el inicio de una serie de encuentros con dirigentes del espacio y buscará dar forma a una estrategia definida para lo que viene.

Con la candidatura ya confirmada de Cristina Kirchner a diputada provincial por la Tercera Sección Electoral, los movimientos internos del PJ bonaerense comenzaron a acelerarse. En el "massismo", la jugada de la expresidenta fue leída como un punto de inflexión: si la campaña se polariza, Massa podría convertirse en una carta fuerte para equilibrar el escenario desde el Frente Renovador.

Crecen las presiones para que Massa se postule

“Las elecciones en la provincia se van a nacionalizar y polarizar. Si vamos en unidad, habría que pensar cómo construir los mejores acuerdos en cada sección”, señalaron a NA desde el entorno del excandidato presidencial. Sin embargo, también dejan abierta la puerta a otra posibilidad: si Unión por la Patria se fragmenta, Massa podría encabezar una lista legislativa propia.

Desde la mesa chica del tigrense, los intendentes y dirigentes más cercanos ya promueven un “operativo clamor” para que compita. Entre ellos, la diputada nacional Cecilia Moreau y Rubén Eslaiman, presidente del Frente Renovador bonaerense, son los principales impulsores. Ambos coinciden en que Massa debe ser candidato a diputado nacional en las elecciones de octubre.

En paralelo, se proyecta un congreso del Frente Renovador para las próximas semanas, con el objetivo de definir la posición del espacio frente al nuevo panorama electoral.

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Unidad opositora y tensiones internas

Aunque el extitular de Economía aún no definió públicamente sus próximos pasos, en su equipo aseguran que prioriza la unidad del peronismo por encima de cualquier candidatura personal. “Sergio va a estar donde el peronismo, el país y la gente lo necesiten. Le importa más la unidad de quienes no estamos de acuerdo con las políticas del Gobierno que una candidatura personal”, insisten.

Pese a ese discurso conciliador, la candidatura de Cristina también agudizó las tensiones internas, especialmente entre los intendentes que mantienen distancia con el kirchnerismo. “Complica el panorama para Axel Kicillof, pero más aun para los jefes comunales que no quieren alinearse con CFK”, analizan desde el massismo.

Para graficar esa situación, uno de los armadores del FR lanzó una frase filosa: “Terminan como Robespierre”, en alusión a la guillotina de la Revolución Francesa.