El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) confirmó esta semana que el martes 24 de octubre, 48 horas después de las elecciones presidenciales, se abrirán los sobres con la oferta económica que presentaron las empresas “telco” Personal, Movistar y Claro para participar de la subasta por los tres lotes de 100 MHz del espectro radioeléctrico por donde se brindará el servicio de telefonía móvil 5G (quinta generación) en Argentina. En medio de la corrida bancaria, el ministro de Economía, Sergio Massa, adelantó los tiempos del proceso licitatorio y va en busca de que el Estado se quede con los 1.050 millones de dólares en que valuó el pliego licitatorio. Es cierto que los pliegos admiten el pago en pesos, pero el candidato presidencial oficialista ya se anotó un primer beneficio: primereó a la oposición, que tenía otros planes en el asunto.

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Con la jugada, el ministro candidato, que maneja el Enacom a través de su presidente e histórico vocero, Claudio Ambrosini, levantó la guardia ante los referentes en telecomunicaciones de La Libertad Avanza (LLA) y de Juntos por el Cambio (JXC), quienes manifestaron su disconformidad respecto de que la licitación pública se realice en el tramo final del actual gobierno de Alberto Fernández.

La coalición cambiemista y el espacio libertario pretendían negociar con el ganador de las próximas elecciones definido. Las empresas también y se opusieron al planteo oficial. De hecho, Telefónica, que controla Movistar, pidió un amparo judicial, pero finalmente cedió para no quedarse afuera y está en carrera junto a Personal, propiedad del Grupo Clarín a través de Telecom, y Claro, del octogenario magnate mexicano Carlos Slim, una de las 15 personas más ricas del planeta.

 

 

El 5G de Javier Milei

Con la fecha puesta, por debajo sigue el ruido. El propio Javier Milei reclamó infructuosamente -mediante una carta al Presidente- que detuviera la licitación. También anunció la presentación de una denuncia judicial para impedirla, por medio del abogado Diego Spagnuolo, que aún no produjo novedades.

El representante de Milei en el área de las telecomunicaciones es Rodolfo “Chofo” Bianchi, quien en declaraciones al diario La Nación aseguró que “la licitación es algo que se tiene que hacer con un nuevo gobierno”. Letra P le preguntó a Bianchi qué argumentos sostiene para pedir que se frene el proceso y Bianchi se negó a responder: “no es que no quiera, no puedo”, dijo, sumando un nuevo enigma libertario.

Bianchi confirmó que es “el representante de Milei” en las jornadas que días atrás organizó la Asociación Argentina de Televisión por Cable (ATVC). Allí explicó que “la licitación del 5G es una discusión de largo plazo, donde hay que tener en cuenta a las pymes y se debe trabajar con las pequeñas comunidades”.

Bianchi fue candidato a intendente en la ciudad mendocina de San Rafael por la LLA. Salió tercero. El Chofo viene de una familia empresaria de Mendoza. Es nieto del fundador de Bodegas Bianchi. Creó una empresa de internet en San Rafael y luego desarrolló otras empresas en Colombia. También es un dirigente gremial empresario y fue el primer presidente del Polo TIC del Sur Mendocino (PIT).

Milei ya anunció que, en caso de ganar las elecciones, va a crear el Ministerio de Innovación. Bianchi confirmó a Letra P que el responsable de esa cartera será el fundador de la fintech Afluenta, Alejandro Cosentino. Hincha de Boca y exejecutivo de la división American Express para América Latina y el Caribe y del Banco Santander, Cosentino tendrá a su cargo las políticas de telecomunicaciones.

En la denuncia política contra la licitación -por ahora no judicializada-, el partido de Milei puntualizó que “el pliego está mal diseñado" y que "se pretende beneficiar a las empresas estatales en perjuicio del sector privado”. También reprochó que las telco puedan pagar la licitación con pesos. En LLA se horrorizan porque la licitación prevé la “prestación básica universal” para garantizar un plan de 5G con tarifa accesible para personas no tengan ingresos mayores a dos salarios mínimos vitales y móviles. "Atentan contra la libre empresa", remarcó el abogado de Milei.

ARSAT, en la mira

Por su parte, la candidata a diputada por Juntos por el Cambio en la Ciudad de Buenos Aires Silvana Giudici, que representa a la oposición en el directorio del Enacom, afirmó que “la licitación del 5G es otra oportunidad perdida por este gobierno, porque no incluyó una consulta pública y tampoco tuvieron participación en el proceso las pymes, ni la academia”.

Giudici estuvo al frente del Enacom durante los dos últimos años de la presidencia de Mauricio Macri y, al igual que las telco, rechaza que el Estado se quede con un segmento del espectro para ARSAT. JxC y las compañías lo consideran competencia desleal. El Enacom explicó en los considerandos del proyecto que la participación de la empresa argentina de telecomunicaciones creada en 2006 está relacionada con el Plan Estratégico de Conectividad Federal del Estado nacional.

El servicio de 5G es hasta diez veces más rápido que el 4G y permite generar conexiones prácticamente sin tiempo de latencia, casi sin delay (hasta un milisegundo o menos) entre el envío y la recepción de información. De allí que se pueda aplicar, por ejemplo, para hacer una intervención quirúrgica con instrumentales en forma remota entre el paciente y el equipo médico. Además, el 5G soporta un millón de conexiones simultáneas, contra los mil aparatos conectados que resiste el actual sistema de 4G.

En esta etapa, el más veloz fue Massa. Sin embargo, la disputa recién empieza.