Las alimenticias argentinas aumentaron diez veces más que en otros países de Latinoamérica

Las alimenticias argentinas aumentaron diez veces más que en otros países de Latinoamérica

Según datos de la FAO, en el país las empresas alimenticias registraron aumentos en una proporción de diez veces más que en el resto de los países de la región. Las más ricas de uno de los continentes más pobres. Mientras, se desentienden de la inflación.

Un nuevo informe vuelve a poner a las empresas alimenticias contra las cuerdas por la inflación galopante en Argentina. Esta vez el estudio no es de nuestro país sino del exterior, y registra que los alimentos aumentaron aquí, diez veces más que en toda la región.

El dato surge de un informe privado que analizó el alza de una canasta que incluye bebidas no alcohólicas y su relación con el aceleramiento de los precios de los commodities, y el impacto que tuvo en los precios locales.

Es que las empresas de Alimentos y Bebidas tienen por costumbre trasladar los precios internacionales a los costos locales de las góndolas. Ello impacta, claro, en el bolsillo de los trabajadores y trabajadoras, sin piedad.

Es que con las subas ingresan mes a mes más argentinos y argentinas a la pobreza, puesto que sus precios miden la Canasta Básica Alimentaria. A pesar de ello las empresas del sector se niegan a reconocerse como responsables de la inflación.

Es más se dan el lujo de acusar a los trabajadores y a las negociaciones paritarias como eje de la suba generalizada de precios. De más está decir que afirman eso cuando ofrecen, al mismo tiempo paritarias a la baja y hacen propuestas insuficientes.

 

Responsables de la inflación

La inflación de los alimentos en la Argentina pasó de ser de 3% mensual en promedio en 2020 a ser de 4,4% en los primeros meses del año, mientras que en la mayoría de las economías de la región los índices desaceleraron o se mantuvieron estables.

Es que Argentina forma parte de un grupo selecto de países que vieron sus índices de precios acelerar por la suba de los valores internacionales de los alimentos. Ello fue trasladado por las empresas del sector, con ganancias extraordinarias, a los precios locales.

La situación generó que durante los últimos años las empresas alimenticias vieran incrementar sus ganancias de manera exponencial. Es más, ante la posibilidad de controles de precios para evitar la suba inflacionaria, salieron a usar su lobby para seguir manteniendo sus privilegios.

Esto lo hicieron a través de la Coordinadora de Empresas Alimenticias (COPAL) que preside Daniel Funes de Rioja. Pero el otro dato es que Funes de Rioja ocupa ahora la presidencia de la UIA y desde allí busca influenciar al Gobierno para que no les impidan seguir subiendo precios.

Las más ricas de la región

 

La inflación de la canasta básica pasó de ser de 3% mensual en promedio en 2020 a ser de 4,4% en los primeros meses del año, mientras que en la mayoría de las economías de la región los índices desaceleraron o se mantuvieron estables.

El hallazgo es parte de un estudio reciente del Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea. La entidad midió cuál fue el impacto del alza de los commodities en los precios de los alimentos.

Ello lo hizo para Argentina y también para otros ocho países, y concluyeron que las alimenticias se enriquecieron exponencialmente como consecuencia de la suba indiscriminada de precios, generando incluso más pobreza en el país.

Es que la inflación de los alimentos en la Argentina pasó de ser de 3% mensual en promedio en 2020 a ser de 4,4% en los primeros meses del año, mientras que en la mayoría de las economías de la región los índices desaceleraron o se mantuvieron estables.

 

La canasta básica en comparación

En ese sentido, Ieral mostró que un relevamiento periódico que hace la FAO (Naciones Unidas) reflejó que el valor internacional de una canasta de alimentos se viene incrementando al 3,2% mensual en los cinco primeros meses del 2021.

Dentro de esta canasta, los precios de los distintos grupos de productos aceleraron su ritmo respecto al 2020, principalmente los aceites (+5,9%) y el azúcar (+4,1%).

“Debe aclararse que en la valorización de esta canasta FAO incluye precios de comercio exterior y en muchos casos los productos son en realidad más bien insumos para la elaboración de alimentos”, aclaró Ieral.

Para el caso argentino, “la inflación minorista en alimentos y bebidas no alcohólicas pasó del 3,0% mensual en el 2020 al 4,4% mensual en los primeros cuatro meses del 2021″, midió Ieral. “Es decir, la tasa que ya era elevada subió 1,4 puntos porcentuales”, continuó.

 

Una realidad diferencial

 

La realidad de los países de la región es muy distinta. “Ahora bien, en Latinoamérica, y analizando 8 países de la región como para tener una muestra relativamente amplia, la inflación para el mismo rubro de bienes fue de sólo el 0,4% mensual en el 2021”, aseguran.

Se trata de una tasa considerablemente más baja, pero que además muestra una desaceleración (muy leve) respecto del 2020, cuando la mediana era del 0,5% mensual, fue una de las conclusiones de Ieral.

Garzón consultó las cifras de inflación de los últimos meses en Brasil, Chile, Uruguay, Colombia, Perú, México, Costa Rica y Bolivia para poder compararlas con las de la Argentina.

El sondeo arrojó como resultados que cuatro países muestran desaceleración de precios en los alimentos (Chile, Uruguay, Costa Rica y Brasil), tres de ellos aceleración (Perú, Bolivia y Colombia) y uno (México) no presenta cambios.

El estudio ensayó una explicación sobre por qué en la Argentina la inflación es superior a la de sus pares latinoamericanos.

“Seguramente que las explicaciones son múltiples, incluyendo cuestiones de manejo prudencial de la macroeconomía (política monetaria, cambiaria), aspectos microeconómicos y también de conformación de canastas de consumo”, mencionó Garzón.

Así, explica en la Argentina “hay cadenas mucho más vinculadas al comercio exterior que otras y que por tanto transmitirán más rápido lo que suceda afuera.

Efectivamente, las alimenticias continúan con su tendencia a subir precios de manera descontrolada, mientras niegan ser responsables de la inflación.

Comentá la nota