Lejos de los subgrupos de intendentes que por estos días miden fuerzas en la interna del peronismo bonaerense, dos de los barones del conurbano que sobrevivieron a la pasada elección, Mario Ishii (José C. Paz) y Alejandro Granados (Ezeiza), compartieron este martes una cena que consolidó la unidad de criterios entre ambos mandatarios municipales en lo que refiere tanto a la discusión interna peronista como a la postura a exhibir para con el oficialismo en el orden nacional y provincial. Pararse en la vereda de enfrente a todo lo relacionado con la figura de Cristina Fernández de Kirchner y colaborar con los gobiernos de Macri y Vidal, fueron los ejes definidos según lo detallado a Letra P por fuentes confiables.  

Se trató de un encuentro que apuesta a crecer en su volumen político con el correr del tiempo, teniendo así en la mira a jefes comunales que al momento no definen posicionamiento interno en ninguno de los agrupamientos de alcaldes, aunque se aclaró que “todavía es temprano” para acelerar en tal sentido.   

“El peronismo no tiene una opción de superación y los municipios necesitan de los recursos de la Provincia y la Nación para concretar obras importantes”, resumió una voz del entorno para dar cuenta del alejamiento de Ishii y Granados del abanico de grupos que se abre en la interna de intendentes peronistas, al tiempo que refuerzan los lazos con los funcionarios nacionales y provinciales.

Tanto el jefe comunal de José C. Paz como el de Ezeiza recibieron en sus distritos a la gobernadora María Eugenia Vidal y se reunieron, entre otros, con funcionarios como el ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, el presidente del Instituto de Previsión Social (IPS), Christian Gribaudo,y el titular del Bapro e intendente de Vicente López, Jorge Macri.

Con concejos deliberantes bajo control, 2017 no resulta un año en el que, políticamente los dos barones se jueguen muchas cosas. La mira está puesta en 2019 y ante eso tienen en claro que, sin asistencia financiera de Nación y Provincia, no se puede llegar con demasiado oxígeno.  

LEJOS DE CFK. Vale recordar que Granados fue el primer intendente que ganó en 2015 bajo el sello del FpV que salió a despegarse del espacio de la ex presidenta: “Sepan que soy un intendente peronista y que nada tengo que ver con el Frente para la Victoria”, deslizó al momento de jurar una vez más al frente de la comuna de Ezeiza.

En abril, Ishii siguió el mismo camino al ausentarse de la reunión convocada por CFK con intendentes en el Instituto Patria y tras su paso por Tribunales: "Se tendría que haber hecho antes de las elecciones", reprochó el hombre del poncho para dejar en claro: "Yo soy kirchnerista de Néstor Kirchner porque me parece que hizo un gran gobierno. El gobierno de Cristina Fernández para mí no fue tan bueno".

Esa línea fue reforzada en el encuentro de este martes. “Si el camino es Cristina, estaremos del otro lado”, remarcaron voces del entorno de los jefes comunales que no dejaron de machacar la forma en que jugó CFK en las pasadas elecciones como uno de los factores de la derrota de Daniel Scioli.

Bajo el lema “los municipios son oficialistas por naturaleza”, las señales de Ishii y Granados hacia los ejecutivos de Macri y Vidal seguramente se reforzarán en un futuro próximo. Aunque la pragmática lectura de los acontecimientos venideros y cómo queda parado el Gobierno ante ellos, no dejará de ser uno de los ejes que direccionará los movimientos en estos distritos.