El consumo en supermercados acumuló una caída del 12,4% en los primeros cinco meses del año y del 9,7% contra mayo de 2023. Si bien en mayo las ventas tuvieron un repunte del 3,9%, no alcanzó para que se recuperen los niveles previos a la devaluación y la disparada inflacionaria. El ministro de Economía, Luis Caputo, les dijo a los supermercadistas que "no existen razones macroeconómicas para que haya inflación". 

La Encuesta de Supermercados publicada este miércoles por el Indec reveló un crecimiento del 3,9% en la medición mensual desestacionalizada de mayo, que venía de una contracción del 3,5% en abril. A pesar de este repunte, las ventas presentaron una caída del 9,7% respecto a igual mes de 2023 y una baja del 12,4% en el acumulado enero-mayo de 2024. 

Una tendencia similar tuvieron las ventas en autoservicios mayoristas, que presentaron una suba del 1,7% mensual, pero cayeron un 13,3% interanual y un 12,2% en los primeros cinco meses de 2024. Por su parte, los shoppings siguieron en baja y registraron una contracción del 12,7% interanual en mayo. 

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR:La industria volvió a caer durante el segundo trimestre y se reducen las inversionesAdvierten por el impacto de aflojar el cepo sobre las reservas

El caso de las ventas en supermercados no escapa a un contexto de desplome del consumo en general, que no logra salir del pozo. La devaluación de diciembre provocó una disparada inflacionaria que golpeó duro en los ingresos y la pérdida del poder adquisitivo de los salarios decantó en un desplome de la demanda y de la actividad, en especial de las ramas que abastecen al mercado interno. 

En su medición interanual, las ventas del rubro vienen en baja desde noviembre. Octubre fue el último resultado positivo (7,2%), en línea con una suba del consumo por cobertura frente a las expectativas negativas, en la previa de las elecciones presidenciales. 

Luis Caputo se reunió con empresarios de supermercados.

En mayo, el 30% de las ventas estuvo en los artículos de almacén, que tuvieron el primer puesto, seguido por los de limpieza y perfumería con el 14,7%; los lácteos, con el 12%; y las carnes, con el 10,9%. De hecho, Argentina alcanzó en ese mes un mínimo histórico en el consumo de carne debido al aumento de precios, que fueron del 25% a casi el 50%, desde diciembre a mayo.

Según el IPC, los alimentos subieron un 4,8% en mayo y desaceleraron al 3% en junio. En julio retomaron la senda alcista y, hasta la tercera semana del mes, habían acumulado un incremento del 3,9%, acorde a la estimación de la consultora LCG. Además, las bajas temperaturas y las heladas afectaron a la producción de frutas y verduras. 

En ese marco, el ministro de Economía, Luis Caputo, se reunió con supermercadistas y les aseguró que "en la actualidad no existen razones macroeconómicas para que haya inflación". El Gobierno estrenó esta semana la segunda fase de su plan económico, que busca "cerrar las canillas de emisión monetaria" para ir a la inflación cero a fin de año.