Tabaré Vázquez ganó el ballotage en las elecciones presidenciales en Uruguay y pese a que el kirchnerismo intentó capitalizar ese triunfo, es Daniel Scioli acaso el único gran ganador de la jornada del otro lado del Río de la Plata.

Scioli viajó a Uruguay ni bien se enteró de que la tendencia muy favorable que tenía Vázquez tras la primera vuelta se confirmó en las urnas esta tarde. El gobernador bonaerense intentó de esa forma sacarle el jugo a su apuesta por Tabaré, que contrastó nítidamente con la que hizo su rival Sergio Massa, que se fotografió con el perdedor, Luis Lacalle Pou.

Mientras que en el Frente Renovador hubo ruido por la foto que el ex intendente de Tigre se sacó pocas semanas antes de la primera vuelta, cuando las encuestas lo daban ganador a Tabaré, desde el entorno del ex motonauta celebraban esta noche el cuarto encuentro entre Scioli y el uruguayo este año.

Scioli recibió a Tabaré en Buenos Aires, luego participó en el cierre de campaña en la ciudad uruguaya de Colonia y se volvió a mostrar con el ganador tras el triunfo en la primera vuelta, en Montevideo.

La primera de esas reuniones fue en junio y por entonces, el objetivo del líder frenteamplista era reunirse con Cristina Kirchner. Sin embargo, el círculo más cercano de la Presidenta no le perdonó las diferencias por la pasteras del Río Uruguay y nadie del entorno kirchnerista lo quiso recibir.

Scioli comenzó a acumular fotos con presidentes de la región, como hizo días atrás con la chilena Michelle Bachelet, con el objetivo de mostrar un perfil presidencial. En su entorno celebraban además el “triunfo de los oficialismos”, como el de Tabaré, la brasileña Dilma Roussef y el de Evo Morales, porque creen que en la Argentina se repetirá la tendencia.

Odio K

Otra de las golpeadas por el triunfo del Frente Amplio es Cristina, que lo odia a Tabaré por el conflicto de las pasteras y en el kirchnerismo aseguran que el uruguayo incluso llegó a pedirle ayuda al ex presidente norteamericano George Bush. 

“Kirchner me quiere llevar a la guerra”, le habría dicho Tabaré a Bush según los K.

Tabaré siguió siendo un escollo para el santacruceño una vez que Cristina asumió su primer mandato. 

El uruguayo no quería votarlo a Néstor para la presidencia de la Unasur, por lo que el argentino debió esperar a que José “Pepe” Mujica relevara a Tabaré en la presidencia de Uruguay para obtener el voto en el organismo internacional, que debe ser de carácter unánime.