Tras la caída del capítulo fiscal, por qué persisten las dudas y tensiones en la industria

Tras la caída del capítulo fiscal, por qué persisten las dudas y tensiones en la industria

Distintos sectores habían advertido por la "primarización" de la economía y la pérdida millonaria de divisas por el desincentivo a la exportación con valor agregado.

Belén Ehuletche

El sector industrial recibió con moderación la caída del capítulo fiscal de la ley ómnibus que anunció el ministro de EconomíaLuis Caputo, en un guiño a los gobernadores que alzaron la voz en defensa de la producción local, para lograr que la Ley de Bases avance en el Congreso

 

Por ahora, el consorcio exportador, no ve el anuncio como una "marcha atrás" sino como una decisión parcial"se sacó de este paquete, pero el tema sigue latente", explicó un dirigente.

La propuesta que incluía el aumento en los Derechos a la Exportación (DEX) al 15%, a excepción de 36 producciones de las economías regionales, puso en alerta al amplio abanico que conforma la industria nacional que, en las últimas horas, advirtió sobre el efecto "primarizador de la economía" y, en consecuencia, una pérdida millonaria de divisas, inversión y empleo.

La problemática fue planteada por las autoridades de la Unión Industrial Argentina (UIA) al ministro Caputo, en una reunión donde también estuvieron presentes Federico SturzeneggerJuan Pazo y Omar Yasín en representación del Gobierno nacional. 

Según estimaciones de la central industrial, la presión fiscal por efecto de los nuevos derechos sobre las exportaciones de los bienes industriales y alimentos y bebidas hubiesen incrementado en promedio más de 11 puntos porcentuales, lo que "erosiona" rápidamente la competitividad ganada por el nuevo tipo de cambio oficial. 

"Le planteamos al ministro la fuerte preocupación por el aumento de las retenciones ya que consideramos que castiga la exportación de valor agregado argentino", indicó Daniel Funes de Rioja, titular de la UIA, y planteó la importancia de excluir a las pymes para evitar "una reducción de la producción, empleo y las exportaciones".

Desde otras entidades también hicieron llegar sus números a funcionarios del oficialismo y la oposición que debatirán la Ley de Bases el próximo miércoles. "Es muy positivo que se trabajen nuevas alternativas fiscales que no tengan este efecto negativo", señaló Fernando Landa, titular de CERA y sostuvo que las retenciones son "un impuesto regresivo que no es utilizado en el comercio internacional de bienes manufacturados y suponía una pérdida de competitividad". 

Menos divisas

El impacto de las retenciones en las exportaciones "ha llevado a una reducción significativa en la participación mundial de Argentina, llegando al 0,25% en 2023", precisó el titular de CERA y aclaró que este panorama se traduce en pérdidas anuales de u$s 42.000 millones y un estancamiento de las exportaciones totales durante los últimos 16 años.

 Gustavo del Boca, presidente de la Cámara de Metalúrgicos de Córdoba (CIMCC) celebró la decisión oficial y marcó que "el esfuerzo no puede implicar perder dólares". Se mostró de acuerdo con la necesidad de equilibrar la balanza comercial y reducir el déficit dijo que "no se resuelve con más impuestos".  

Con el capítulo fiscal afuera, a futuro, la industria se apoya en el poder del Congreso para impedir que el tema "retenciones" vuelva a la agenda; incluso confía en que el mayor aporte de divisas del agro este año, contribuya a cumplir la meta de déficit fiscal cero y avanzar en mejorar la carga tributaria de los sectores que aportan valor agregado a sus exportaciones.

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