Quienes traigan dólares para invertirlos en el Bonte 2030 apuestan a que, al vencimiento, los rendimientos obtenidos superarán al avance del tipo de cambio
Por José Carmona
La nueva medida del Gobierno sumará más participantes en la estrategia del carry trade, maniobra en la que los inversores venden dólares para suscribirse a instrumentos en pesos, aprovechar las tasas de interés y, con la expectativa de que las cotizaciones del dólar avanzarán poco o caerán, en determinado momento comprar más divisas con la ganancia.
La ampliación de la estrategia se generará a partir del lanzamiento del Bono del Tesoro Nacional (Bonte), el cual se ofrecerá en la licitación de este miércoles. Se trata de un título de deuda en pesos a tasa fija, con la particularidad de que no se ingresa con moneda local, sino con dólares, y está destinado para inversores no residentes en el país.
Este instrumento, que vence en el año 2030, tiene otra particularidad: ofrece un "put", que es una especie de seguro que le da a los inversores la posibilidad de devolver el bono al emisor en caso de que no quieran quedarse hasta el vencimiento. El put es a dos años, previo a que termine el período de gestión del presidente Javier Milei, lo que ofrece mayor confianza a los inversores.
Si bien la emisión de este título de deuda tiene como objetivo captar dólares (hasta u$s1.000 millones) para reforzar las reservas del Banco Central, ya que la entidad no está comprando divisas en el mercado de cambios debido al esquema de bandas de flotación, terminará funcionando como una operación de carry trade para los inversores extranjeros que se suscriban.
¿Por qué se trata de un carry trade para extranjeros?
Los inversores que traigan dólares al país para invertirlos en el "Bonte 2030" lo harán con la expectativa de que al vencimiento del título los rendimientos obtenidos superarán al avance del tipo de cambio. Al salir, esperan hacerlo con un monto en dólares superior al que tenían cuando ingresaron, tal como funciona la estrategia del carry trade en todos los casos.
El equipo de Portfolio Personal Inversiones había anticipado que la flexibilización de los controles para el acceso al mercado oficial de cambios para inversores no residentes que implementó el Banco Central (con un mínimo de permanencia de 180 días) habilita el camino para que ingresen fondos con el objetivo de hacer operaciones de carry trade desde el exterior.
"El mercado busca aprovechar la calma cambiaria y las señales positivas de la macroeconomía, como la desinflación, para hacer más apuestas hacia colocaciones en moneda local. Ahora, la estrategia se ampliará porque contará con la participación de inversores internacionales dedicados a mercados emergentes", afirma el analista Gustavo Ber.
En diálogo con iProfesional, el especialista sostiene que los inversores extranjeros que ingresen al "Bonte 2030" terminarán haciendo la operatoria conocida como carry trade. Aunque recibirán intereses en pesos, destaca, su objetivo final será obtener una rentabilidad en moneda extranjera, la cual se logrará con la ayuda de la calma cambiaria que se prevé durante el período de la inversión.
Más allá de la ampliación del carry trade por el ingreso de inversores extranjeros, la estrategia se mantiene firme por parte de los inversores locales, lo que en parte contribuye a que los tipos de cambio se mantengan relativamente estables y con tendencia bajista, oscilando dentro de la banda de flotación que estableció el Gobierno.
En ese sentido, Cristian López, director de Novus Asset Management, destaca que en las últimas semanas se observa un "desplazamiento" de fondos hacia colocaciones en pesos para hacer carry trade, ya que la estrategia "ofrece cierto confort de rentabilidad", en un escenario en el que los tipos de cambio se quedaron operando "razonablemente" en la mitad de banda de flotación.
Alta expectativa de ingreso de dólares para hacer carry trade
Los operadores del mercado descuentan que la emisión del "Bonte 2030" ampliará los participantes de la estrategia del carry trade, ya que se prevé que contará con una buena adhesión tras gestiones previas del equipo económico del Gobierno con inversores del exterior. De resultar exitoso, la ampliación del carry trade debería redundar en la extensión de la calma cambiaria.
El equipo de research de Max Capital asegura que en las últimas semanas funcionarios del Ministerio de Economía se reunieron con fondos internacionales para detectar el nivel de adhesión que tendría el nuevo instrumento y, en función de eso, se habría establecido el monto objetivo. Por lo tanto, "gran parte de la operación ya estaría asegurada".
El bróker de bolsa destaca que "este instrumento está diseñado para apostar a un escenario de rápida desaceleración de los niveles de inflación, ofreciendo duración y convexidad atractivas para los inversores, por lo que creemos que la mayoría de los compradores lo mantendrán en su cartera durante un tiempo".
"Las perspectivas para el Bonte 2030 son positivas. Estimo que captará una importante demanda de inversores internacionales dedicados a emergentes y, por ende, podrían alcanzarse los u$s1.000 millones que fijó el Gobierno como máximo. A pesar del menor apetito por posibles ruidos externos, no creo que haya alteraciones en el tranquilo contexto financiero", afirma Ber.
Comentá la nota