Militantes de SMATA abuchearon a diputados opositores

Militantes de SMATA abuchearon a diputados opositores

Interrumpieron con silbidos e insultos a Del Caño, del Frente de Izquierda, quien denunció haber sido reprimido por Gendarmería en una marcha por Lear. Y también hostilizaron a radicales y massistas que salieron a respaldarlo.

Los abucheos que recibieron varios diputados opositores de parte de militantes de SMATA que ocupan los palcos de la Cámara de Diputados alteró el inicio del debate por el nuevo canje de la deuda.

El primero en ser hostigado fue Nicolás del Caño, del Frente de Izquierda, cuando alzó la voz para presentar una cuestión de privilegio por el ataque que sufrió de parte de Gendarmería durante la manifestación del jueves pasado en la que acompañó a los trabajadores despedidos de la la autopartista Lear.

 

“Berni pasó de las palabras a los hechos. Primero amenazó y después nos mandó a la Gendarmería para impedir que ejerza el mandato como diputado que recibió más del 15 % de los votos de los mendocinos, un claro mandato de estar y apoyar la lucha de la clase trabajadora", señaló Del Caño.

Enseguida, desde los palcos, un grupo identificado con los colores del gremio de los mecánicos, que dirige Ricardo Pignanelli, de buena sintonía con la Casa Rosada, comenzó a insultar y silbar al diputado.

Pese al abucheo, Del Caño pudo proseguir con su discurso. Insistió en la“gravedad institucional” que implicó el ataque que sufrió de la Gendarmería durante las protestas en la autopista Panamericana y cuestionó que la defensa “de una empresa buitre como Lear”.  “Esto no puede cajonearse, por eso planteo que se abra un debate acá mismo en el recinto", enfatizó.

Los agravios que bajaban desde los palcos y la pasividad del bloque K motivaron a que varios opositores salieran en defensa de Del Caño. El jefe de la bancada radical, Mario Negri, le preguntó al titular de la Cámara, Julián Domínguez, los motivos por los que se autorizó el ingreso a este grupo: "¿A qué vienen? ¿Vienen a plantear la cuestión de los despidos y de las suspensiones?", preguntó, con ironía, en alusión a los gremialistas, que entonces dirigieron sus abucheos hacia el cordobés.

A este reclamo se sumó Graciela Camaño, del Frente Renovador, quien arremetió contra Domínguez "por haber permitido que se lo hostigue a Nicolás del Caño". Y Néstor Pitrola, otro integrante del Frente de Izquierda, denunció un trato desigual a los sectores: "Cuando vinieron los despedidos de Shell y de Calsa a este recinto, los sacó y maltrató. Ahora viene esta patota amenazante y la Presidencia los deja estar".

Lejos de solidarizarse con Del Caño, desde el bloque del FPV surgió una voz en defensa de los mecánicos. Fue la del diputado Oscar Romero, dirigente de SMATA, quien realzó el accionar de su gremio en los conflictos de Lear y de Gestamp y avaló la permanencia en el palco del grupo que hostigó al legislador.

Pese a que Domínguez les pidió guardar sus banderas, los militantes de SMATA -que conduce el dirigente kirchnerista Ricardo Pignanelli- silbaron a Del Caño. La comisión interna de izquierda de Lear está enfrentada a la conducción de los mecánicos.

Comentá la nota