Kicillof denunció que “AmCham pidió la condena” contra Cristina y advirtió: “No les tenemos miedo”

Kicillof denunció que “AmCham pidió la condena” contra Cristina y advirtió: “No les tenemos miedo”

El gobernador bonaerense acusó a Estados Unidos de estar detrás del fallo de la Corte contra la expresidenta; aseguró que es una “intimidación” a la dirigencia política

 

El gobernador Axel Kicillof denunció este miércoles a la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina (AmCham) por supuestamente haber pedido la condena contra Cristina Kirchner en la causa Vialidad, que ratificó la Corte Suprema de Justicia el martes.

Seguro de que este fallo contra la expresidenta es “un desastre”, un “ataque tremendo” y una forma de “intimidación” que se orquestó desde Estados Unidos como represalia a las políticas que tomó Cristina Kirchner cuando estaba en la Casa Rosada, el gobernador de la provincia de Buenos Aires sin embargo advirtió: “No les tenemos miedo”.

Cuando analizó la decisión de la Corte, que confirmó la prisión de seis años y la inhabilitación de por vida para ejercer cargos públicos contra la expresidenta, acusada de direccionar obras públicas a favor de Lázaro Báez en Santa Cruz, Kicillof dijo que existieron “vínculos tremendamente significativos en el terreno de la política y la geopolítica” para que se definiera de esa forma la suerte judicial de la expresidenta.

“Con toda impunidad tomaron la decisión de hacer una condena sin pruebas y de llegar a este extremo”, afirmó en Radio El Destape y fue ahí que marcó: “Yo creo que AmCham pidió directamente la condena”.

Además, dijo que no hay que “dejar de tener en cuenta” que hace poco tiempo Estados Unidos le quitó la posibilidad de ingresar al país a la expresidenta. “Parecía que era algo que no tenía una conexión con otras cosas, pero esta condena no puede no leerse dentro de esa otra decisión, totalmente arbitraria y obviamente de magnitud internacional”, consideró el mandatario, que atraviesa un período de fricciones con la expresidenta por el liderazgo del peronismo, pero que tuvo algunos acercamientos en los últimos días para ver si lograban avanzar con la unidad de cara a las legislativas.

Se refirió así a lo que ocurrió en marzo, cuando el Departamento de Estado de Estados Unidos les prohibió a Cristina Kirchner y a sus hijos, el diputado nacional Máximo Kirchner y Florencia Kirchner, entrar a ese país, por considerarlos personas involucradas en casos de corrupción.

En esa oportunidad, el secretario de Estado, Marco Rubio, de alta sintonía con los libertarios a nivel local, publicó un comunicado para notificar la novedad.

“Hoy la derecha, la ultraderecha, se ha convertido en una especie de club trasnacional del que [el presidente Javier] Milei forma parte”, indicó Kicillof, siempre crítico del gobierno nacional.

En eso, planteó que él siente una “conmoción total” en este momento. “Hacía días que venían preanunciando esto con diferentes trascendidos, idas y vueltas, y ahí está: acaban de hacer el desastre. Condenan a Cristina en una causa absolutamente toqueteada y preparada para hacerlo sin pruebas y por fuera del derecho", remarcó y añadió: “Creo que tiene un carácter de intimidación y disciplinamiento de la dirigencia política. Observamos que la condenan a Cristina por algo absolutamente inexplicable desde la responsabilidad, más allá de que tampoco se encontraron ni subejecuciones ni desvíos de las obras que analizaron. Ni siquiera hay algo para constatar, como en otros casos: una afirmación, un hecho”.

Axel Kicillof, ayer al salir de la sede del Partido JusticialistaALESSIA MACCIONI - AFP

Además, Kicillof aseguró que esas obras en cuestión habían sido autorizadas por el Congreso en el Presupuesto y que también está rota en esta causa la “cadena de responsabilidades” porque no están implicados, por ejemplo, el jefe de Gabinete, ni los ministros del área, ni las autoridades provinciales que firmaron los conformes, pero sí la entonces presidenta.

“Se la condena por algo que no existió y que no está probado, con lo que no tuvo nada que ver, sin garantías de defensa. Tiene todos los condimentos para decir que si no les gusta lo que hace determinado funcionario o dirigencia política, te va a caer una condena, aunque no tengan pruebas“, enfatizó el gobernador, que tiene intenciones presidenciales en 2027, en sintonía con el discurso de los distintos referentes del kirchnerismo al respecto de Vialidad.

Convencido de que este “embate del poder” está direccionado a los líderes que aplican políticas “en favor de la mayoría”, Kicillof no obstante avisó: “El mensaje es que no les tenemos miedo. Vamos a seguir trabajando. Buscaremos la forma, los caminos. Y desde la dirigencia ahora se redoblan los esfuerzos. Nadie va a aflojar y tomar amenazas, por más tremendas que sean”.

El martes, cuando la dirigencia del Partido Justicialista (PJ) estaba reunida en la sede de Matheu, el gobernador se acercó hasta ahí aproximadamente 15 minutos con su ministro de Gobierno, Carlos Bianco.

Alejado en este último tiempo de la expresidenta, habían retomado el contacto la semana pasada, cuando decidieron reunirse después de meses de diálogo cortado para analizar cómo unificar ambas vertientes de cara a las elecciones legislativas, que en la provincia de Buenos Aires se harán desdobladas por una decisión del propio Kicillof, con la que Cristina Kirchner no está de acuerdo.

También participó el lunes de un acto en el PJ, en un momento en que el kirchnerismo ya evaluaba con mayor certeza la posibilidad de que a la exmandataria le dictaran la prisión.

Este miércoles, LA NACION confirmó que el gobernador suspendió su agenda por la situación judicial de Cristina Kirchner. Tenía pensado ir a Ameghino y a Carlos Tejedor.

Comentá la nota