Jujuy vota entre "los candidatos de Gerardo" y un peronismo en ebullición

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Morales se puso al frente para ampliar su mayoría legislativa. Las tribus todistas dirimen su interna a cielo abierto. El rol de Rivarola. La foto de Fernández.

El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, buscará consolidar su hegemonía en las elecciones provinciales de este domingo, frente a un peronismo dividido representado en varias listas que pujarán contra un oficialismo fuertemente ligado a la figura del mandatario radical y, al mismo tiempo, jugarán su propio partido.

 

Un total de 570.879 electores podrán sufragar para renovar 24 bancas de la Cámara de Diputados provincial, además de la mitad de los cargos en los concejos deliberantes de 26 municipios y de 31 comisiones municipales. Jujuy es la segunda provincia en ir a las urnas en medio de la pandemia del coronavirus y de manera desdoblada de las elecciones nacionales legislativas. Misiones inauguró el calendario electoral 2021 el 6 de junio pasado con un amplio triunfo que ratificó el predominio del Frente de la Concordia Misionero.

 

Morales firmó en marzo el decreto de adelantamiento de los comicios provinciales. No es la primera vez que lo hace. En 2019 le dio buenos resultados: obtuvo su reelección con el 43,76% de los votos. Los peronistas unidos hubieran arañado el 50%, pero se repartieron en tres opciones.

Hoy el gobernador cuenta con 28 de las 48 bancas de la Legislatura, de las cuales pone en juego 13 este domingo. Del resto, le corresponden 13 al justicialismo, cuatro a la izquierda y tres a Juntos por Jujuy, el espacio del actual senador nacional Guillermo Snopek. 

 

El oficialismo provincial estará representado por dos espacios: el Frente Cambia Jujuy (FCJ), que es la versión local de Juntos por el Cambio, y el Frente Primero Jujuy, que tiene como referente al vicegobernador Carlos Haquim, de borroso origen peronista y que fuera abanderado del massismo en la provincia. 

El FJC, tal como lo consigna el eslogan de campaña, lleva a “los candidatos de Gerardo”. La alianza está integrada por 26 partidos provinciales y municipales y como primer candidato tiene a Omar Gutiérrez, actual director del Comité Operativo de Emergencia (COE). Desconocido para la ciudadanía hasta marzo de 2020, Gutiérrez no tiene un pasado ligado a la actividad política. Su grado de exposición desde el inicio de la pandemia lo posicionó como el candidato adecuado, sobre todo para aquellos sectores de la población desencantados con la política tradicional. 

 

El Frente de Todos-Partido Justicialista es la alianza electoral capitaneada por el presidente del justicialismo jujeño, el empresario y diputado provincial Rubén Rivarola. Para llevar el nombre del “Frente de Todos” en la boleta, debió acudir a la justicia electoral provincial, ya que esa denominación estaba disputada por más de una alianza. 

La decisión de la Justicia de habilitar al PJ la marca de la coalición de gobierno nacional podría sonar obvia, si no fuera porque Rivarola no logró en esta campaña el apoyo explícito y público del presidente Alberto Fernández, quien en cambio recibió en varias oportunidades a los referentes del Frente Unidad para la Victoria, cercano a la Tupac Amaru, de Milagro Sala. El último de esos encuentros se dio en Salta, el miércoles 16, y Fernández incluso se sacó una foto con la boleta en la mano. 

 

El Frente Todos por Jujuy, por otra parte, está liderado por la diputada nacional Carolina Moisés. La nómina provincial la encabeza Carlos de Aparici. El espacio mantiene un vínculo de confianza con Fernández y una posición claramente opositora a Morales.

 

Un papel similar ha jugado en la Legislatura provincial Alejandra Cejas, que busca retener su banca en la lista del Frente Unidad para la Victoria, donde ocupa el segundo lugar detrás de Diego “Dingui” Martín Palmieri. De hecho, los jujeños identificados con el gobierno nacional vivieron con decepción el hecho de que no se haya alcanzado un acuerdo entre ambos espacios.

 

En la política local, se volvieron moneda corriente las versiones sobre un acuerdo político entre Morales y Rivarola. Cejas denunció un pacto entre ambos dirigentes y lo padeció en carne propia: recibió una suspensión por 90 días solicitada en el recinto nada menos que por el propio titular del PJ, y operaciones mediáticas y judiciales en su contra vinculadas con cuestiones de su vida familiar. El aval de Fernández a su frente generó expectativas que se pondrán a prueba el domingo. 

También se presentan otros sectores del panperonismo como el Frente Jujuy Puede, que postula al actual diputado nacional justicialista José Luis Martiarena; el Frente Popular por Vos y el Frente Juntos por Jujuy. Por su parte, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) lleva como postulantes a Alejandro Vilca y Natalia Morales, quienes buscarán retener sus bancas provinciales.

 

Los comicios de este domingo estarán atravesados por la pandemia y por una difícil situación económica y social, evidenciada en que durante 2020 el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) alcanzó al 43% de la población económica activa de Jujuy. El temor y el desánimo producto de ambos factores se espera que afecten la afluencia de votantes. El promedio de participación electoral en Jujuy ronda el 80 por ciento del padrón. Sin embargo, para este turno se espera una asistencia mucho menor, cercana al 65%.

El Tribunal Electoral de Jujuy dispuso protocolos sanitarios especiales para evitar aglomeraciones (se votará en 450 escuelas, el doble de otras elecciones) y la detección de posibles personas infectadas en los centros de votación. Se realizarán controles sanitarios estrictos para identificar contagiados, quienes en caso de resultar positivo de Covid-19 no podrán emitir su voto, serán aislados y se los someterá a un seguimiento de salud.

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