Empresarios vinculados a la producción y el comercio mostraron su entusiasmo por la decisión del Gobierno de avanzar en una pesificación de los costos eléctricos, y si bien esperan que exista una desdolarización de todo el sistema energético, advirtieron sobre la necesidad de organizar un esquema de actualización de tarifas que evita un atraso que dispare una nueva crisis en la generación y distribución.

Dueños y directivos de empresas consultados por BAE Negocios afirmaron que el sector privado necesita tener "previsibilidad" en los costos energéticos para diseñar los modelos de negocios en el mediano plazo, y evitar los "saltos" que se dieron durante el macrismo o los "atrasos" que se registraron durante el kirchnerismo. Todos coincidieron que la medida del Gobierno fortalecerá principalmente a la clase media y eso ayudará a dinamizar la economía general.

"Después vendrá la industria y el comercio de manera directa", aclaró el referente de una de las firmas industriales más poderosas del país. Sucede que si bien los dueños de las fábricas no conocían de antemano la medida que circuló, no hubo sorpresas al señalarla dentro de un "plan macroeconómico que va en línea con otras decisiones que apuntan a mejorar las condiciones de la actividad".

"Me parece que hasta que se defina un sistema que sirva a todos, está bien; pero en el corto plazo deberíamos ver un mecanismo de actualización (de precios) razonable", afirmó el integrante del Comité Ejecutivo de la UIA y referente de las economías regionales, José Urtubey. Sucede que los industriales no quieren volver a la frase que resonaba en los pasillo de la entidad industrial en el último tramo del gobierno de Cristina Kirchner y que paralizaba a las fábricas: "No hay peor energía que la que no existe". 

Fuentes empresarias, consultadas por este diario, evitaron dar definiciones hasta tener una comunicación oficial del Gobierno y un análisis puntual de las medidas. Mientras uno de los interlocutores asiduos que existe entre la UIA y el Gobierno consideró a la iniciativa como "un punto más dentro del plan macroeconómico acertado que tiene el Gobierno", otro industrial afirmó que se trata "sólo de un parche".

El presidente de Industriales Pymes Argentino (IPA), Daniel Rosato, respaldó la decisión del Gobierno al sostener que "todo camino que vaya en la dirección de desdolarizar los costos energéticos es muy positiva" aunque reclamó "una definición muy transparente de la medida para analizar los efectos sobre las pymes, en donde los precios energéticos son muy determinantes".

"Queremos cuánto va a afectar a las empresas categorías 2 y 3 y a las electrointensivas. Cuando sepamos los costos de la energía para la industria podremos tener previsibilidad de las compras y poder así diseñar con normalidad la producción de un tiempo lógico para hacer negocios", afirmó Rosato.

Lo cierto es que los dueños de las fábricas y de los comercios respaldarán la medida que será formalizada en las próximas horas, esperarán un avance en todas los demás tramos y sectores, y buscarán mejoras en el consumo interno.