Deuda en pesos: Guzmán saldrá a despejar un megavencimiento

Deuda en pesos: Guzmán saldrá a despejar un megavencimiento

Buscará armar un colchón de fondeo neto e intentará descomprimir el pago de más de $500.000 millones que vencen a fin de mes. En el mercado esperan elevada adhesión. Plan financiero y FMI.

Martín Guzmán realizará mañana una doble operación financiera con el objetivo de descomprimir el abultado calendario de compromisos de fin de mes y de cara a un año desafiante en materia financiera tras el principio de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

El Ministerio de Economía lanzó, por un lado, una nueva licitación de deuda en pesos, con la que buscará hacerse de un colchón de fondeo neto. Por otro, anunció un canje de dos títulos que expiran el 28 de febrero para aliviar un vencimiento que supera los $500.000 millones.

Se trata de una operación importante para los planes oficiales: la renovación de los compromisos en moneda local y la acumulación de nuevo endeudamiento en pesos es la vía clave a la que apuesta el Gobierno para reducir los pedidos de asistencia monetaria al Banco Central, como acordó con el FMI. Para ello, la Secretaría de Finanzas diseñó un menú que ofrece una recompensa a los tenedores decidan ingresar.

En la licitación por efectivo, Finanzas ofrecerá cuatro letras. Habrá una nueva Lelite al 2 de marzo (título de muy corto plazo sólo destinado a fondos comunes de inversión) con un precio prefijado de $984,68 por cada $1.000 de valor nominal; y se reabrirán dos Ledes (letras a descuento) a mayo y julio, y una Lecer (indexada a la inflación) a octubre. Las Ledes y la Lecer saldrán sin referencia de precio y tasa. Entre los cuatro instrumentos, buscará colocar al menos $20.000 millones, un monto que está en línea con los compromisos de la primera parte de febrero ($18.500 millones), pero que es ampliable.

En paralelo, se ofrecerá a los tenedores de la Ledes y la Lecer que caducan a fin de mes ingresar a un canje por una canasta de instrumentos de deuda en pesos. El objetivo es empezar a despejar de antemano el vencimiento de más de $500.000 millones que concentran en conjunto ambas letras: según datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso, se trata de $224.999 millones en la Ledes S28F2 y $288.710 millones en la Lecer X28F2.

La S28F2 se tomará a un valor técnico de $1.000 por cada $1.000 nominales y el monto ingresado se podrá canjear por una canasta compuesta en un 20% por una Ledes a abril (que se colocará a un precio de $923,88 por cada $1.000 de valor nominal) y en un 80% por otra Ledes a junio (a $858,70 por cada $1.000). Por su parte, la X28F2 se tomará a $1.446 por cada $1.000 nominales y se podrá convertir a otros dos títulos también atados a la inflación: el 50% a una Lecer a agosto de 2022 (a $1.091,80 por cada $1.000 de valor nominal) y la otra mitad al Boncer T2X3 que expira en agosto de 2023 (a $1.779,67 por cada $1.000).

Una fuente oficial le comentó a Ámbito que la conversión se diseñó para “incentivar a la participación”. Es decir, se incluyó una recompensa respecto de lo que obtendrían los inversores por una operación similar en el mercado secundario. La intención es conseguir un resultado que permita allanar el terreno para reducir los pagos venideros y, en la última licitación de febrero, redondear un fondeo neto considerable.

Fuentes del mercado coincidieron en que la propuesta de canje resulta tentadora para los acreedores de ambas letras y señalaron que podría haber una alta participación. “Por los precios de licitación y los precios de mercado, parece atractivo entrar. Hay un premio de entre 1,6% y 2,3% (a precios de cierre de mercado de hoy). La canasta vale más que los títulos que se van a entregar”, señaló Nicolás Rivas, trader de BAVSA. Y agregó: “El tema es que se estira bastante la duración de los instrumentos, sobre todo en el canje de la Lecer. Para los FCI que son T+1 eso le resta atractivo. Pero por los precios, parece que será una licitación con aceptación”.

En definitiva, Economía apunta a sostener un elevado nivel de fondeo neto (en enero, con menos vencimiento, cosechó $139.070 millones). Es que el acuerdo con el FMI impone una drástica reducción del financiamiento del Tesoro con emisión monetaria al 1% del PBI en 2022 (en 2021 rondó el 4%) y cubrir el resto del déficit fiscal con nuevo endeudamiento en pesos y desembolsos netos de organismos multilaterales. La consultora Delphos estimó que, para lograrlo, Finanzas deberá colocar 2,1% del PBI netos este año. En Economía señalan que aún trabajan en el programa financiero anual para definir el monto objetivo.

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