Por: Juan Marcos Pollio.

El IPC de mayo sorprendió con un aumento de 7,8%. La baja en el precio de los alimentos y la estabilidad del dólar fueron las claves para que el índice inflacionario del Indec anote su primera desaceleración desde noviembre del año pasado. De todas maneras, la interanual trepó al 114,2%. Para lo que resta de junio, y del año, los analistas remarcaron que la dinámica del dólar será fundamental para sostener un equilibrio alto con piso de 7% mensual. El Gobierno apunta a conseguir reservas vía swap y adelanto de desembolsos del FMI, mantener la tasa alta en términos reales e intervenir en los mercados cambiarios.

La consultora ACM consideró que el dato de mayo "se puede ver explicado principalmente por la desaceleración en alimentos respecto a los meses anteriores, ya que es el principal componente del índice, y por los aumentos de los precios regulados (9%), sobre todo en lo que corresponde a tarifas de electricidad y gas". Justamente, la baja en el precio de los alimentos fue un dato remarcado por la mayoría de los expertos. 

"Resalta la sensible reducción de la inflación de alimentos (5,8%), siendo el segundo rubro con menor incremento en el mes", resaltaron desde CEPA, que también afirmaron que el programa de Precios Justos mostró en los grandes supermercados, una evolución en línea con el acuerdo (4,5%), pero superaron ese guarismo en mercados y bocas de expendio de cercanía. 

La consultora LCG dijo que la baja de ese rubro "está explicada por una caída en Frutas (4,1% mensual) y menores aumentos en Verduras (7,6%) y también fue determinante la suba moderada en Carnes (1,5% mensual en mayo) que representa 33% de la canasta de alimento".

El economista del CESO, Federico Zirulnik, opinó en diálogo con BAE Negocios que "el hecho de que el ritmo de devaluación del tipo de cambio se haya mantenido por debajo del 7% mensual también ayudó", debido a que muchos de los precios de los alimentos siguen anclados al dólar mayorista. AMC argumentó que en mayo hubo "cierta calma cambiaria en los dólares paralelos, evitando que este efecto termine transándose a precios". 

Para lo que viene, el director de la consultora Ledesma, Gabriel Caamaño Gómez, explicó que "parece haber una nueva velocidad crucero de entre 7/8% mensual". Para el economista Rodrigo Álvarez, el piso inflacionario "lo van a marcar los salarios y el tipo de cambio, donde no hay margen para atrasos por falta de dólares", pronosticando que se mantendrá en esos valores "hasta pasadas las elecciones, en un nivel muy alto, pero más bajo que el 8% de abril". 

Ante la escasez de dólares producto de la sequía, la estrategia del Gobierno en el último tiempo fue buscar engrosar las arcas del Central, lo que se plasmó en el viaje del ministro de Economía, Sergio Massa, a China para activar un nuevo tramo del swap, lo que tendrá su correlato en un nuevo viaje a EE.UU. para conseguir adelantos de desembolsos del Fondo por USD 10.80 millones. También jugó la suba de tasas al 8,1% mensual para intentar detener la demanda de dólares y las intervenciones del BCRA en las cotizaciones financieras.

La variación en los pronósticos

Los primeros datos oficiales de las inflaciones provinciales habían dado señales mixtas. Por un lado, la inflación general de CABA bajó de 7,8% a 7,5% en mayo, destacándose el descenso de la inflación núcleo de 8,1% a 7,6%. En contraposición, la inflación calculada por Córdoba aceleró tanto la general, pasando de 6,5% a 8%, como el IPC núcleo, de 7% a 7,4%.

En cuanto a las expectativas del mercado, los analistas consultados por el último REM las elevaron considerablemente para mayo tras el 8,4% de abril y esperaban un 9%, subiendo desde el 7,4% que preveían en abril. Sin embargo, en el mismo informe, las autoridades del BCRA habían aclarado que "se conoció nueva información que sugiere que la inflación mensual se moderó con respecto al 8,4% observado en abril".