El fiscal ante la Cámara Federal porteña Germán Moldes pidió que se incorporen los delitos de "traición a la patria" y "omisión funcional de perseguir delincuentes" en la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman contra Cristina Kirchner y otros ex funcionarios, por encubrimiento a los presuntos responsables iraníes del atentado contra la AMIA.

Moldes presentó el viernes, al filo del cierre del horario judicial, un dictamen ante la sala I de la Cámara Federal porteña. Se trató de la concreción de una estrategia del fiscal en la búsqueda de reabrir la denuncia de Nisman, tal como anticipó LA NACION el domingo 24 de julio.

En su dictamen, Moldes exigió la reapertura de la denuncia del ex fiscal del caso AMIA contra la ex mandataria. "¿Cómo entender por qué en 2012/2013 Cristina Fernández llegó a un acuerdo con el Estado que representaba a los prófugos? (alguno de ellos siguen desempeñando relevantes responsabilidades políticas en Irán). Así se habría explorado la posibilidad de que lograran impunidad", dice el escrito de Moldes en referencia al memorándum de entendimiento, según consignó Télam.

"La traición a la patria se configuraría en caso de llegar a acreditarse que argentinos que ejercían cargos públicos relevantes y otros que no lo son, pero que tan sólo eran parte del desafinado coro de lacayos y cortesanos que suele acompañar los antojos y caprichos del poderoso, se habrían unido a los enemigos de la República para prestarles su ayuda", se subraya en el dictamen.

La denuncia de Nisman fue desestimada por inexistencia de delito, en una decisión del juez Daniel Rafecas. Ahora, esa causa tiene un pedido de reapertura por parte de la DAIA y del fiscal Gerardo Pollicita. La sala I del Tribunal de Apelaciones dio su visto bueno al archivo determinado por Rafecas. Moldes impugnó ese fallo; lo considera nulo porque los camaristas Eduardo Freiler y Jorge Ballestero llegaron a la decisión a partir de razones diferentes, mientras que el otro integrante de la Cámara, Eduardo Farah, votó por impulsar la denuncia.

El expediente contra Cristina se reactivó tras una serie de medidas de prueba ordenadas por el juez federal Claudio Bonadio, quien le solicitó a Rafecas que le envíe el expediente de la denuncia para sumarlo a su investigación contra Héctor Timerman por "traición a la patria". Bonadio investiga al ex canciller porque en una grabación subrepticia afirmó que Irán era responsable de la bomba contra la AMIA y, sin embargo, firmó con ese país el memorándum.

Moldes argumentó que se registró un "cambio copernicano en la política exterior del Estado" en lo relativo a la investigación del ataque contra la AMIA entre 2005, cuando el presidente era Néstor Kirchner, y 2013, "época de la gestión y suscripción del 'memorándum' con todas sus consecuencias".