La jornada de lunes tuvo a la gaseosa Manaos en el centro de la escena. Después de dos semanas de silencio, se volvió a dar información acerca de la agenda del presidente Mauricio Macri y tomó estado público su visita a la fábrica de gaseosas nacionales en La Matanza. 

Por primera vez el Jefe de Estado pisaría el principal bastión peronista de la provincia de Buenos Aires, y lo haría junto a María Eugenia Vidal. 

No obstante, la visita se suspendió por supuesto mal clima y la imposibilidad de despegar del helicóptero. En la oposición, se sembró la duda sobre un supuesto temor a ser víctima de nuevos escraches.

A pesar de la pronta suspensión del mandatario y la Gobernadora, el PRO decidió no dejar huerfana de representación oficial al anuncio que realizará la fábrica y el enviado fue Diego Santilli, vicejefe de Gobierno Porteño. 

El segundo de Horacio Rodríguez Larreta recorrió las instalaciones junto a su titular, Orlando Canido, mientras se aguardaba por la llegada de Vidal y Macri.

El hecho en particular se dio con la presencia de la intendenta local, Verónica Magario, junto al presidente del Partido Justicialista de la provincia de Buenos Aires. Los matanceros se adueñaron del acto y fueron la principal figura política, ante la tardanza de las cabezas del PRO.

Mientras aguardaban por los mandatarios, Magario y Espinoza aprovecharon para llenar de fotografías sus cuentas de Twitter.

De todos modos, la foto más llamativa fue la foto borrada. Desde la cuenta de la mandamás matancera se subió una imagen de ella junto a Macri y Vidal que segundos después, cuando la batalla estaba librada, fue eliminada.