A pesar de la mejora en el balance anual, el consumo volvió a mostrar señales de enfriamiento, con una baja del 6,7% frente al mes anterior, de acuerdo con la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Las pequeñas y medianas empresas sufren otra caída en sus ventas por la falta de consumo. Tal como indica el último informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la actividad comercial minorista registró una caída del 0,5% interanual a precios constantes, y retrocedió un 6,7% respecto al mes anterior.
A pesar de esta caída, el documento oficial señala que en el acumulado del primer semestre las ventas muestran un crecimiento del 9,1% respecto al mismo período de 2024, cuando el sector había sufrido una fuerte caída del 17,2%. Desde ese punto de vista, la entidad destaca que “se observa una leve mejoría respecto a los meses anteriores, aunque el consumo sigue enfrentando desafíos importantes”.
Por lo que se refiere a la situación económica de los comercios, el 58,3% de los encuestados manifestó que su situación se mantuvo estable respecto al año pasado, mientras que un 27,5% indicó que empeoró. Aún así, el informe resalta que cerca del 50% de los comerciantes cree que la situación de su negocio mejorará en 2025, mientras que sólo un 7,8% espera un panorama peor.
En el Día del Padre, la mayoría de los comercios ofreció promociones con tarjetas de crédito y descuentos, pero el consumo siguió siendo cauteloso y enfocado en productos de menor valor
La recuperación en ciertos rubros se dio de forma concreta, impulsada por las compras vinculadas al Día del Padre y el cobro del medio aguinaldo. Algunos de los sectores que más crecieron fueron equipos periféricos y celulares (9,7%), electrodomésticos (5,8%), cosmética (4,6%) y calzado (0,6%).
Sin embargo, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa advirtió que “estos incrementos no alcanzaron para cambiar la tendencia general, que continúa marcada por la fragilidad del consumo”.
Así evolucionaron las ventas minoristas en los distintos rubros
En el análisis por rubros, se observó que, de los siete sectores relevados, cinco mostraron crecimientos interanuales, reflejando una mejora en la demanda respecto al año pasado:
- Alimentos y bebidas: aumento del 1,8%, liderando el crecimiento entre los sectores.
- Farmacia: registró un crecimiento del 1,3%, manteniendo una demanda constante.
- Ferretería, materiales eléctricos y construcción: subió un 0,7%, impulsada por obras y mejoras en el hogar.
- Bazar, decoración, textiles de hogar y muebles: tuvo un incremento del 0,4%, reflejando un interés moderado en estos productos.
- Perfumería: mostró un leve aumento del 0,2%, manteniendo su estabilidad en el mercado.
A pesar de eso, dos sectores tuvieron bajas en sus ventas:
- Calzado y marroquinería: con un descenso del 5,2%, reflejando menor demanda y competencia con otros canales.
- Textil e indumentaria: bajó un 4,7%, afectado posiblemente por cambios en las preferencias del consumidor y factores estacionales.
En muchos comercios se reportaron menores niveles de facturación y una reducción en la afluencia de clientes, lo que indica un consumo más cauteloso. Sin embargo, se mantiene la demanda en canales digitales, y muchas empresas aplican estrategias con precios agresivos para atraer compradores. Además, en sectores estacionales, las condiciones climáticas ayudaron a mejorar el rendimiento mensual.
Ante este consumo frágil, la finalización del programa Cuota Simple representó un nuevo desafío para las pequeñas y medianas empresas, que dependen del financiamiento en cuotas para mantener sus ventas. Como respuesta, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) impulsó la creación de Cuotas MiPyme, un sistema que, desde el 1° de julio, permite a los comercios adheridos ofrecer 3 o 6 cuotas con tasas promocionales y sin límite de monto, abarcando los mismos rubros que el programa anterior.
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