Por César Morielli

Falta un mes para las elecciones generales. En el oficialismo de San Martín ya planificaron la recta final de campaña para que Gabriel Katopodis pueda conseguir la reelección y redondear el objetivo “hacer resurgir al distrito”, a decir del katopodismo.  El trabajo tendrá varios ejes, y el discurso hará referencias a las circunstancias locales y también a la coyuntura nacional.

En las últimas semanas se pudo escuchar al intendente haciendo referencias constantes a la agenda nacional. Fiel a su estilo, sin estridencias, opinó sobre temas que fueron batallas del Frente para la Victoria contra el macrismo. Así, Katopodis alineó con prudencia su discurso contra el PRO. De rebote, sin menciones, apostó al daño colateral sobre Ricardo Ivoskus, el candidato de Cambiemos en San Martín. La idea es apostar al futuro, a construir sobre lo que consiguieron Néstor y Cristina en estos 12 años, a fortalecer la figura de Daniel Scioli como continuador coherente de una política de estado; y a resaltar el peligro de pegar un salto al vacío, de señalar a quienes hablan de un cambio pero que no proponen ideas, a recordar que la oposición es un rejuntado de los 90 que ya fracasó.

En lo local, el discurso apunta a resaltar cómo se puso de pie San Martín, a destacar la potenciada política de seguridad y la gran cantidad de inversiones en móviles, cámaras y central de monitoreo, al incremento de efectivos policiales de la bonaerense y de la policía local. Pero también a las inversiones en las áreas de salud, cultura y deporte; a la descentralización del estado municipal y la inclusión de zonas postergadas. Además de los aportes de la gestión en asfalto y luminarias. Katopodis aprovecha cada pregunta de la prensa para enumerar las cosas que hizo la gestión municipal en estos cuatro años. El latiguillo preferido es advertir que se recibió al distrito en una situación de abandono absoluto y que en esta gestión se puso en marcha. En ese sentido, se interpelará a la ciudadanía el voto para continuar con el "resurgimiento de San Martín". Aquí también, al igual que en las referencias nacionales, se apelará al recurso de apostar por el futuro, ir hacia adelante, seguir avanzando, y no volver hacia atrás.

Pero no solo lo discursivo fue analizado para los últimos 30 días. Katopodis quiere apostar, como siempre, al cara a cara, el mano a mano. Sabe que lo mejor que tiene es el carisma y el diálogo franco. No dejará de lado la agenda institucional, pero pide a la militancia que le organice reuniones fuera de agenda. Y con vecinos descontentos. En el círculo íntimo repiten una idea: preferible una reunión entre 10 personas que quieren protestar y no con 100 que vienen a sacarse fotos. Saben que lo importante es convencer y conquistar el voto de los vecinos que aún están dudando. En cuanto el mano a mano con el vecino, se privilegiarán los rastrillajes domiciliarios a las mesas en las calles, porque el comando de campaña considera que en agosto, se saturó el vecino con esa metodología.

La militancia se sorprende con la capacidad del intendente de escuchar reclamos. Resaltan que tiene un don especial para absorber las críticas y los pedidos de los vecinos y luego convencerlos.

Con todo, respecto de la gestión, habrá una intensificación de las cuadrillas municipales en las calles haciendo tareas de limpieza y mantenimiento. Y se desecha la idea de cortar calles y generar fastidio en el vecino con cartelerías y desvíos por obras en momentos de campaña.

En la agenda que valoriza el intendente aparecen estas pequeñas reuniones. Se van a privilegiar por sobre las caminatas callejeras. De todas formas habrá algunas recorridas y encuentros militantes para dar arengas a los propios. También se organizarán recorridas por fábricas e industrias. En el oficialismo tomaron nota que es un sector que tiene reclamos y sugerencias. Escucharán pedidos y concejos y no dejarán el terreno a la conquista de los candidatos opositores.

Apuestan a quedarse con los votos del FPV, y esa especulación es optimista de cara al resultado final, pero no pueden dejar nada librado al azar y a la posibilidad de una volatilidad en el electorado. Revisando los números de las PASO, la interna kirchnerista cosechó 97 mil votos, 10 mil más que Scioli y 35 mil más que Ricardo Ivoskus. La idea, claro, es que Katopodis se quede con todos esos o pueda superar los 90 mil.

Por otro lado estarán los actos institucionales. En el oficialismo creen que se suma poco a la campaña, pero son necesarios. Ya hubo un acto conjunto con Scioli en el Club Aleman, presentación de patrulleros, y llegarán más anuncios.