La Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar) entregó nuevos cestos de cartón a municipios adheridos al programa de Preclasificación de Residuos en Instituciones, que serán distribuidos por cada jurisdicción en instituciones públicas, como jardines de infantes, escuelas, delegaciones municipales, estaciones de tren y hospitales, entre otros sitios.

La medida tiene como objetivo promover la separación de origen y la valorización de los residuos reciclables, según indico Acumar. Además, se articula con las acciones del programa Escuelas por la Cuenca, que busca promover y fortalecer el compromiso de las instituciones educativas con la educación ambiental, y se complementa con la red de Estaciones de Reciclado que el organismo instala en los distintos municipios, para promover la separación y entrega voluntaria de reciclables.

“Separar los residuos en las distintas instituciones representa un aporte positivo a la gestión local. Se apunta al aprovechamiento de los recursos presentes en los residuos, la preservación de bienes comunes, la prevención de riesgos para la salud de la población y la disminución de la cantidad de desechos enviados a disposición final, que también implican la reducción de la utilización de tierras destinadas a ese fin”, aseguró el presidente de Acumar, Martín Sabbatella.

El manejo inadecuado de los residuos es una de las principales causas de contaminación de la Cuenca Matanza Riachuelo, a través de la que se generan, aproximadamente, 10 mil toneladas diarias. Es por eso que este programa se enmarca en el cumplimiento de los objetivos del Plan Integral de Saneamiento Ambiental (PISA), a través del cual se busca sensibilizar a la población en la necesidad de avanzar hacia una gestión integral de los residuos.

El Plan Integral de Saneamiento Ambiental (PISA) es el documento que guía el trabajo de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR), permitiendo el accionar coordinado entre los distintos actores que trabajan para resolver las problemáticas de la región. Fue elaborado en 2009/2010 y actualizado en 2016, resultado del trabajo de especialistas y del consenso entre las jurisdicciones afectadas. Está organizado en 14 líneas de acción con proyectos que responden a los ejes de: control, prevención, transparencia y gestión. El PISA es un proyecto flexible y dinámico, que se adapta a las complejidades del territorio.

Su actualización fue una nueva oportunidad para la Cuenca Matanza Riachuelo. Esta necesidad que surgió como respuesta a una exigencia judicial, a 8 años de la sentencia y con al menos dos siglos de contaminación, fue precisa para poder revisar, continuar, discontinuar o crear nuevas acciones a fin de garantizar la mejora en la calidad de vida de los habitantes, la recomposición del ambiente en todos sus componentes (agua, aire y suelo) y la prevención de daños con suficiente y razonable grado de predicción.