En una conferencia junto a Randazzo y al titular del ORSNA, defendió la decisión de desalojar a la compañía de ese espacio. Y reclamó al grupo Latam que "contribuya" con gestiones para que Aerolíneas pueda realizar vuelos de cabotaje en Brasil y Chile.
En este contexto, Kiciloff intentó desactivar el conflicto y remarcó: "Parecía que le habíamos ido a sacar una tarjeta roja. Nos pareció desproporcionada la actitud de LAN, porque es un hangarcito".
También reiteró que mantuvo una charla cordial con el CEO de la aerolínea chilena, Ignacio Cueto y negó que la compañía deje de operar en Argentina. "Les pedimos que nos ayuden a conseguir la autorización y poder operar cabotaje en Brasil y en Chile, porque es un buen negocio".
Por su parte, Randazzo afirmó que el Gobierno no quiere "echar" a ninguna línea aérea que opera en la Argentina y en cuanto al pedido de desalojar el hangar de Aeroparque, el ministro apuntó que el objetivo es que Aerolíneas Argentinas cuente con los mismos derechos que tiene la empresa chilena en el país.
"Hemos solicitado que tanto Chile como Brasil autoricen a Aerolíneas a realizar vuelos de cabotaje en esos territorios. Lo único que estamos pidiendo es gozar en Chile y Brasil de los mismos beneficios que LAN tiene en Argentina", remarcó Randazzo y aclaró que "se suspenderán las obras en Aeroparque a la espera de la resolución judicial".
Según trascendió, el ejecutivo chileno manifestó que "si Aerolíneas Argentinas quiere operar en el mercado doméstico chileno puede hacerlo sin ningún tipo de trabas, de la misma manera que en Perú, Colombia y Brasil".
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