La renuncia de María Cristina Martínez Córdoba, representante de la Defensoría General, por un “pico de presión”, hizo caer en la nada el juicio contra Campagnoli, justo cuando debían comenzar los alegatos y dictarse sentencia. Sin veredicto ni resolución, Campagnoli fue repuesto automáticamente en su cargo en la fiscalía barrial de Saavedra.

El tribunal que debiera intervenir en el caso de Gonella sería casi el mismo, salvo dos cambios. Ya no está Martínez Córdoba y la reemplaza Nicolás Toselli. Tampoco está la abogada Adriana Donato –ahora integrante del Consejo de la Magistratura nacional– y su lugar lo ocupa Laura Calogero. Los otros cinco miembros intervinieron en el caso Campagnoli. Ellos son el abogado cordobés Javier Panero; el fiscal Daniel Adler; el representante del Poder Ejecutivo y ex titular de la Inspección General de Justicia (IGJ) Ernesto Kreplak, candidato del Gobierno a una fiscalía clave en Comodoro Py; el del Senado, Rodolfo Ojea Quintana; y el ex procurador Juan Octavio Gauna.

Hasta anoche, el pedido de desafuero formulado por el juez Claudio Bonadio no había ingresado ni a la Procuración ni al Tribunal de Enjuiciamiento, según aseguraron fuentes judiciales a Clarín.

Las fuentes no supieron precisar si el tribunal actuará de oficio, una vez ingresadas las actuaciones, o si deberá aguardar un pronunciamiento previo de la procuradora general.

Gils Carbó propuso hace casi exactamente un año la suspensión y envío a juicio político de Campagnoli, cuestión que decidió el tribunal de manera expedita con el voto desempate de Martínez Córdoba por cuatro a tres. Finalmente, en el juicio, la mayoría de los testigos fuero favorables a Campagnoli y luego se cayó el jury por la falta de un séptimo jurado. Con el caso de Gonella, las fuentes consultadas por Clarín ven difícil que se llegue a la instancia de juicio. La estrategia del fiscal es aguardar lo que diga la Casación sobre sus planteos contra Bonadio.