El ministro de Modernización, Andrés Ibarra, salió a poner la cara por el Gobierno en pleno remezón por el número de familiares de funcionarios que fueron contratados por el Estado. El titular de la cartera justificó que "cuando se llega al gobierno algunos puestos se cubren por cercanía o vínculos con funcionarios", pero afirmó que el objetivo es "concursar y tener una carrera pública profesional".

De todos modos, Ibarra intentó despegar al gobierno de la situación ya que "viene de años, no es de ahora" y detalló que "de las 3 mil personas que son directores nacionales, generales o coordinadores, solo siete están por concurso". El gobierno había prometido, en campaña, barrer con la militancia ya que el Estado "no puede ser un aguantadero de La Cámpora".

El ministro declaró que una "gran transformación en el Estado" como la que impulsa Cambiemos requiere "el compromiso de todos los empleados públicos y evitar las malas prácticas". El funcionario macrista explicó en declaraciones a Radio la Red que van a "promover muy fuerte la carrera del empleado, que la alta dirección pública sea súper profesionalizada y por concursos". 

Los casos más polémicos, según informó el programa periodístico Periodismo para todos: 

Jorge Triaca: Su esposa María Cecilia Loccisano  fue designada en el cargo extraescalafonario de Coordinadora General, de la UNIDAD DE FINANCIAMIENTO INTERNACIONAL DE SALUD del MINISTERIO DE SALUD. Posee rango y jerarquía de Subsecretaria, con carácter de excepción a lo dispuesto por el artículo 7° de la Ley N° 27.008.  

Oscar Aguad. Rodrigo de Loredo, abogado, es el yerno del ministro de Comunicaciones y, pese a no tener experiencia en el sector, fue designado presidente de la empresa estatal ARSAT.

Gustavo Santos. El hijo del Ministro de Turismo, Matías Agustín Santos Crocsel, fue nombrado Jefe de Asesores de Gabinete del Ministro de Turismo, con rango y jerarquía de Subsecretario. Se incorpora el cargo con carácter de excepción.