Por Adrián Luciani

Bahía Blanca no sólo se encuentra a las puertas de enormes proyectos energéticos que pueden cambiar su perfil portuario e industrial, sino también de grandes inversiones en materia vial, capaces de mejorar la red de accesos logísticos a las zonas de muelles y su interconexión con la ciudad.

Pero además, pueden llegar a poner fin a la incomprensible y absurda falta de conexión de las rutas 3 Norte y 3 Sur, que hoy se cortan abruptamente al llegar a sectores como El Triángulo y El Cholo.

Buena parte de este nuevo escenario vial, por el cual Bahía Blanca viene bregando hace décadas, acaba de ser acordado en las oficinas del Palacio de Hacienda de la Nación, durante un encuentro que mantuvieron días atrás el ministro de Economía, Sergio Massa, y el presidente del Consorcio de Gestión del puerto local, Federico Susbielles.

El convenio logrado establece que Vialidad Nacional y el ente portuario local asumirán en partes iguales el costo de las obras, hoy estimadas, en una primera etapa, en cerca de 25 millones de dólares, y todo apunta a que la primera licitación se concrete antes de fin de año.

“Es una obra de gran envergadura, de 22,7 kilómetros de extensión, que viene a completar el cinturón vial de toda la zona portuaria y la ciudad de Bahía Blanca”, explicó a La Nueva Susbielles.

El proyecto abarca dos grandes tramos: el primero comprende el empalme con la gran autopista Paso Urbano – El Cholo en  el sector del frigorífico Incob, ex Paloni, para continuar luego con un sistema multitrocha de rotondas, pasos elevados y derivadores que agilicen la circulación, luego sigan hacia avenida Colón y rotonda de Pedro Pico, hasta llegar a la zona de El Guanaco.

El otro tramo abarca también doble vía desde la zona de Grünbein, ingreso sobre nivel a la ruta 252 en El Triángulo y nuevo paso elevado en la zona del complejo de puentes La Niña, para luego continuar en dirección al acceso a Galván. 

“Es una obra que estamos estimando en una primera etapa de entre 10 y 12 mil millones de pesos que se financiará con una partida especial del ministerio de Economía que va a girar a Vialidad Nacional, por el 50 por ciento.

“El Consorcio –agregó Susbielles--, impulsa esto con una decisión proactiva de buscar inversiones y obras. Es un gran paso para el puerto y también para la ciudad”.

En tal sentido, dijo que el directorio del ente busca mecanismos de apalancamiento financiero, con un pensamiento de largo plazo, que tiende no solo a la inversión portuaria de concretar muelles y sumar infraestructura, sino a innovar y mejorar la conectividad portuaria, incluido su cinturón logístico.

“La decisión del Consorcio de invertir en esta obra es fundamental, del mismo modo que ha decidido inversiones en medio ambiente, en desarrollo y acompañamiento a la comunidad, porque la gestión portuaria tiene que ser hoy integrada, balanceada.

“Necesitamos un puerto que gestione y piense de esta manera y también que sea capaz de traccionar un plan de desarrollo local y regional donde las grandes inversiones que van a llegar generen empleo, se potencien a través de las pymes y mejoren la calidad de vida de la población”.

Sobre la postura de Massa frente a la cuestión de los accesos portuarios bahienses, Susbielles dijo que encontró en el ministro no sólo una comprensión cabal de la situación estratégica que vive Bahía Blanca y su puerto.

“Estuvimos conversando sobre el tema energético, sobre la ley de GNL que enviará al Congreso, los proyectos que se plantean para el puerto local y la importancia estratégica de poder fortalecer todo el cinturón logístico. 

“El ministro mostró un gran compromiso y ejecutividad. Coincidimos en que es un momento trascendental y uno tiene que enfocarse en gestionar porque muchas veces hay dirigentes que pierden la senda o confunden prioridades. Con esto estamos abriendo un camino que va a generar acciones transformadoras y volví muy contento”, enfatizó.