La llegada de Matranga a la secretaría aún es estudiada  por los gobernadores provinciales, que discuten hace semanas la letra chica de la norma que reemplazara la ley de 1967, llamada “Ley Corta” y que fue acordada por los gobernadores y el ex presidente Néstor Kirchner en  2006.

La disputa entre la Nación y las provincias se centra en cómo se distribuirán los ingresos de los beneficios que deje Vaca Muerta, la cuarta formación más grande del mundo de shale oil y la segunda mayor reserva de shale gas del mundo.

El nombramiento de Mariana Matranga, una ingeniera química de 38 años de edad y  asesora de  YPF desde agosto de 2012, que  fue designado por el Gobierno  para reemplazar Daniel Cameron, quien ocupó el cargo durante 11 años, cambió el mapa de la discusión de la ley de hidrocarburos.

Matranga integró el equipo del ministro de Economía, Axel Kicillof, durante la intervención gubernamental en YPF, tras la salida de Repsol como socio controlante de la compañía, ahora de mayoría accionaria estatal.

Los mas afectados por los cambios fueron el gobernador de Chubut y presidente de la Ofephi (Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos), Martín Buzzi, y el mandatario neuquino Jorge Sapag, quienes habian agendado esta semana una reunión, la que se pospuso  por la renuncia de Cameron. De todas maneras, la pelea con los fondos buitre ya había congelado las negociaciones.

De todas maneras, Matranga tendrá que resolver junto a Kicillof de urgencia la situación de Petrolera Argentina, la pequeña refinería de Plaza Huincul que amenaza con cerrar y por la que Jorge Sapag pidió una entrevista por con el ministro de Economía, promotor de Matranga.

Matranga estudió en el Colegio Nacional de Buenos Aires, una de  las escuelas secundarias más prestigiosas del país, y se cruzó por esos pasillos con quienes están ahora en la conducción del equipo económico, tanto Kicillof como el secretario de Comercio,  Augusto Costa, quien reemplazó el año pasado Guillermo Moreno.

El pérfil técnico de Mantranga, quien es además investigadora de la Facultad de Ingeniería de la UBA y trabajó en el sector privado, especialmente en la industria petrolera donde diseñó y operó instalaciones de superficie, inclusive en Noruega y Canadá, y su cercanía con Kicillof, fue una de las razones centrales que impulsaron su nombramiento.