Buscan que obras sociales y prepagas incorporen la gestión menstrual

Buscan que obras sociales y prepagas incorporen la gestión menstrual

La iniciativa impulsa la obligatoriedad de la prestación en el Programa Médico Obligatorio, en busca de que los beneficios “lleguen efectivamente a todo el universo de personas menstruantes”.

El espacio político Igualar, integrante del Frente de Todos, impulsa un proyecto para promover la inclusión de la gestión menstrual en el Programa Médico Obligatorio (PMO), de modo que las obras sociales y las empresas de medicina prepaga provean a sus afiliadas elementos que sean ecológicamente sustentables, como un paso más hacia la “libertad económica de las mujeres, condición fundamental hacia la equidad”.

Así lo adelantó Carmela Moreau, asesora de la Jefatura de Gabinete, que anticipó que la próxima semana el diputado nacional Nicolás Rodríguez Saa presentará la iniciativa en el Congreso, donde ya existen otros proyectos para que la gestión menstrual se declare como política de salud pública.

La diferencia es que esta iniciativa impulsa la obligatoriedad de la prestación por parte de las obras sociales y las firmas de medicina prepaga, en busca de que los beneficios “lleguen efectivamente a todo el universo de personas menstruantes”, según un comunicado.

El texto de Moreau –dirigente además de la Asociación del Personal Legislativo (APL)- alienta el uso de toallitas reutilizables y de la copa menstrual, y contempla a los antiinflamatorios en la provisión obligatoria.

“Estoy convencida de que la libertad económica de las mujeres es una condición fundamental para generar equidad. Y para muchas de ellas, la gestión de la menstruación representa un gasto significativo”, expresó la asesora de la Jefatura de Gabinete.

Destacó también que si la iniciativa que irá al legislativo es aprobada, “además de alivianar esa carga”, contribuirá a la erradicación de toallitas descartables y tampones que, una vez utilizados, “constituyen residuos patógenos”.

“Hoy más que nunca hay que profundizar el feminismo popular y el desarrollo sustentable”, concluyó.

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