Los bonos argentinos operaron durante la jornada del viernes con bajas de más de 1%. Hay expectativa por anuncios del equipo económico, así como también acerca de cómo continuará la crisis política que se desató en el Gobierno tras la derrota en las PASO del último domingo. 

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Todos los tramos de la curva soberana argentina operaron en negativo el viernes. La parte corta de la curva cerró con fuertes bajas, con un descenso de 1,48% en el Global 2029  y de 1,28% en el Global 2030. En el tramo medio, los Globales 2035 y 2038 evidenciaron pérdidas de 1,41% y 1,28% respectivamente, mientras que el tramo largo de la curva se vieron caídas de 1,1% en promedio. 

En el último mes, los bonos suben hasta 8,7% y rebotaron hasta 3,4% en los últimos 5 días. De todos modos, los rendimientos siguen siendo muy altos, con los bonos cortos rindiendo 18,3% y los más largos 14,8 por ciento.

El riesgo país no ha podido descender significativamente en las ultimas jornadas pese a que el mercado tenía cierta expectativa sobre el trade electoral y el impacto en los activos financieros.

El riesgo país se ubica en 1513 puntos básicos y si bien se alejó de sus máximos de 1680, se sostiene por encima del umbral de 1500 unidades.

Los activos locales siguen bajo presión tras la volatilidad que generó la crisis política dentro del Gobierno, una vez que el oficialismo perdió las PASO.

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Analistas creen que esta crisis podría ser una oportunidad para los activos argentinos ya que impedirían que el Gobierno tenga una mejora en las elecciones de noviembre, potenciando el trade electoral.

"Paradójicamente, este fenómeno y la resistencia del presidente aumenta la probabilidad de repetir el resultado del domingo en noviembre, lo cual mejora la perspectiva futura de los activos argentinos", dijeron los analistas de Portfolio Personal Inversiones (PPI).

En cuanto a las acciones en la bolsa local, el S&P Merval cayó 1,54% hasta los 78.512,09 puntos. 

Los ADR también operaron con mayoría de bajas lideradas por Ternium, que se hundió 8,2%. Entre los papeles de peor performance también sobresalieron Cresud, Telecom y Tenaris, que retrocedieron en torno a un 5% cada uno. 

WALL STREET OPERÓ EN ROJO

En el marco global, los tres principales índices bursátiles de Estados Unidos cerraron la semana con signo negativo. El Dow Jones cayó 0,48%, mientras que el S&P500 y el Nasdaq retrocedieron 0,91% cada uno. En el acumulado del año, sin embargo, los índices muestran subas de más de 20% y se han más que duplicado desde el piso que tocaron en marzo de 2020.

En el viejo continente, las bolsas operaron mixtas. El Stoxx600 cayó 0,9%, y el Dax 30 de Alemania y el FTSEMIB de Milán cedieron 1% cada uno. 

Los mercados han estado fluctuando con mayor volatilidad en las últimas semanas tanto por los vencimientos de opciones y de incertidumbre sobre la dinámica monetaria y sanitaria.

"Esperamos que la volatilidad aumente durante el próximo mes, impulsada por un repunte estacional de la incertidumbre de los inversores, la continua incertidumbre del virus y los importantes catalizadores de la política fiscal y monetaria", escribió John Marshall, jefe de investigación de derivados de Goldman Sachs, en una nota el viernes.

De a poco la atención comienza a centrarse en el futuro de la política monetaria. Es que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) se reunirá durante dos días la semana que viene y se espera que el miércoles dé más pistas sobre cuándo puede comenzar a desacelerar sus u$s 120.000 millones en compras mensuales de bonos. Dichas compras han permitido que se materialice la recuperación económica, aunque también han contribuido a un aumento de la inflación.

 

El presidente de la Fed, Jerome Powell, ha dicho que el tapering (la reducción de compras de activos financieros) podría ocurrir este año, pero los inversores aún esperan conocer más detalles.