1975-2013: comparación sin fundamentos

Por Eric Calcagno - El presidente de la Unión Industrial Argentina(UIA), José Ignacio de Mendiguren evocó la posibilidad de que la pugna distributiva entre asalariados y empresarios pueda llevar a un nuevo "Rodrigazo".
La única explicación de tales palabras es que haya sido una "chicana" dentro de la actual negociación de los convenios colectivos de trabajo, ya que comparar junio de 1975 con enero de 2013 carece de fundamento.

En efecto, las diferencias entre situaciones política, económica y social son sustantivas, como lo muestran algunas cifras.

En junio de 1975 Celestino Rodrigo asumió el Ministerio de Economía, para aplicar un ajuste salvaje: devaluación del 160% para el tipo de cambio comercial y del 100% para el financiero; reajuste del precio de la nafta del 181%; el precio de los transportes urbanos aumentó en un 75% y subieron las tasas de interés.

En 1975 la inflación fue del 180% y las subas de salarios del 100% (véase Mario Rapoport, Historia política, económica y social de la Argentina).

Fue una política antiinflacionaria monetarista y recesiva, que obtuvo resultados opuestos a los que decía perseguir.

En 1975, el déficit del Tesoro Nacional fue de 174 mil millones de pesos, los ingresos fueron de 51 mil millones y la principal fuente de financiamiento fue el Banco Central (120 mil millones de pesos); así, el déficit triplicaba la recaudación fiscal y llegó al 15% del Producto Interno Bruto.

En el sector externo, el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos equivalía al 43% de las exportaciones (véase Banco Central de la República Argentina, Memoria Anual, 1976).

Nada hay que pueda compararse esa economía de 1975 en catástrofe, antesala de todos los infiernos, con la política económica actual, donde se aplica con decisión un modelo de desarrollo industrial con justicia social, con cuentas macroeconómicas equilibradas, en particular con superávit fiscal y externo.

Por último, la consistencia del proyecto político, desde la conducción hasta los militantes, es otro diferencia fundamental entre 1975 y 2013.

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